Dos estrategias, un mismo objetivo

Ximo Puig basa su campaña para las autonómicas en la defensa de la gestión realizada como presidente y sus proyectos de futuro, mientras que Carlos Mazón presta una mayor atención a la política nacional

Carlos Mazón y Ximo Puig en una reunión mantenida en el Palau de la Generalitat.

Carlos Mazón y Ximo Puig en una reunión mantenida en el Palau de la Generalitat. / Kai FORSTERLING / EFE

M. Vilaplana

M. Vilaplana

Pese a que la campaña electoral como tal no arrancará oficialmente hasta el 12 de mayo, los partidos ya hace tiempo que andan enzarzados en la confrontación de ideas y proyectos con el objetivo de convencer a los ciudadanos en su carrera para alcanzar la Presidencia de la Generalitat. El objetivo, por tanto, es común, pero la estrategia para conseguirlo presenta bastantes diferencias. Así, mientras el socialista Ximo Puig, actual jefe del Consell, está basando su argumentario en la defensa de la gestión realizada en los últimos ocho años y los proyectos de cara al futuro, su principal rival, el popular Carlos Mazón, también presidente de la Diputación, está prestando una mayor atención a la política nacional, pasando a veces de puntillas por los temas autonómicos. También el estilo es opuesto, con un perfil más moderado en el caso de Puig, frente a la mayor tensión dialéctica que trata de aportar el líder del PP

Todas las elecciones tienen sus claves y significados, pero los comicios autonómicos alcanzan en España una proyección que supera ampliamente su espacio territorial, al generar impactos que son fundamentales tanto para el Gobierno de la nación como para la estabilidad de los propios partidos políticos. Así lo destaca el sociólogo y profesor de la Universidad de Alicante (UA) Carlos Gómez Gil, quien añade que este hecho ha venido sucediendo desde hace tiempo, con unas variables que entrarán también en juego el próximo 28 de mayo.

El experto abunda en la cuestión, subrayando que lo vivido en los últimos años, a nivel mundial y en España, con la pandemia, la guerra y la inflación, es tan excepcional que ha marcado el debate político y polarizado a la sociedad, sacudiendo a la opinión pública como pocas veces en la historia reciente. Además, apunta, el magma de la extrema derecha ha seguido erupcionando, mientras que el principal partido de la oposición, según sus palabras, no acaba de encontrar una ruta de tranquilidad y estabilidad tras la salida traumática de su anterior líder. Todo ello sin olvidar que un partido de centro, como es Ciudadanos, se está desmoronando en medio de la desbandada de muchos de sus dirigentes, que hay problemas entre los socios del Gobierno central, y que ha aparecido una nueva fuerza política de izquierdas, como es Sumar, dentro de la propia coalición. «Nadie puede negar que el debate político está altamente electrizado, existiendo temas de calado que distorsionan el debate electoral autonómico», resalta Gómez Gil.

La pregunta, por tanto, es cómo está afectando y va a afectar este cúmulo de circunstancias a la campaña en la Comunidad Valenciana. El profesor de la UA señala que se está produciendo una curiosa dualidad entre el enfoque que le está dando el candidato del PP que opta al Palau de la Generalitat, Carlos Mazón, y el que promulga el líder de los socialistas, Ximo Puig, que aspira a la reelección. «En el primer caso -indica-, no ha ahorrado esfuerzos y polémicas para dirigir sus discursos con una elevada tensión política hacia los temas nacionales e, incluso, hacia el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pasando de puntillas por importantes temas de gestión de la Comunidad». Por el contrario, añade, «Ximo Puig ha ido afrontando la campaña desde la gestión, los avances y los proyectos de futuro, con un marcado anclaje territorial en el conjunto de las tres provincias valencianas».

Para el sociólogo, Mazón y sus asesores «son conscientes de que canalizar el malestar y la polarización social que se arrastra en las sucesivas crisis generadas desde la pandemia puede llevarles a captar votos de todo ese sector de descontentos con las políticas estatales». En el otro lado, subraya, «Puig y su equipo intentan construir un discurso en positivo con un marcado perfil de gestión, logros y horizontes futuros, desmarcándose de polémicas estatales».

Coincidencia

Ese es el diagnóstico de un experto en la materia, y con el que en cierta forma coinciden, aunque con matices, los responsables de campaña de ambos candidatos. Por parte del PP, Miguel Barrachina reconoce que en los mensajes de Mazón tienen un peso importante los asuntos nacionales, algo que considera totalmente lógico, desde la perspectiva, enfatiza, de que «la situación que se vive en el país tiene su reflejo en la Comunidad». Y pone algunos ejemplos, como «los agresores sexuales a los que se les ha rebajado la pena por la ley del ‘solo sí es sí’, los recortes en el agua o la ausencia de inversiones en nuestro territorio». Barrachina, con todo, resalta que los temas autonómicos, como no podía ser de otra forma, también están muy presentes en la campaña, con asuntos como el colapso del sistema sanitario, la simplificación de los trámites administrativos, el agua o la rebaja de impuestos.

Por su parte, el responsable de campaña del PSPV, Miquel Soler, coincide plenamente en que Ximo Puig está haciendo valer la labor realizada estos últimos ocho años. «La gestión -indica- es el mejor aval para el futuro, y eso está muy presente en nuestros discursos». Soler, en este sentido, destaca que no se trata de un espíritu de complacencia, sino de trasladar la evidencia de los resultados. «Todos los indicadores económicos y sociales han mejorado. También la sanidad ha avanzado mucho, pese al impacto que tuvo la pandemia, con lo que la gente, a la vista de todo ello, sabe que lo que proponemos va en serio y lo cumplimos», apostilla.

El asunto, una vez puestas las cartas encima de la mesa, es averiguar a quién le puede ir mejor con su táctica. El sociólogo Carlos Gómez Gil señala que ambas estrategias tienen sus riesgos y ventajas. «Hacer campaña a cara de perro, como está haciendo Carlos Mazón, sin miramientos en los discursos ni contemplaciones en sus disparos, puede llevarle a captar ese voto muy ideologizado, próximo a sectores más ultras, en clara competición con Vox, haciendo que, a fuerza de plantear debates estatales, pueda ser más conocido». El riesgo, añade, es que pueda alejarle de otros sectores más moderados y vinculados al territorio, y con necesidades básicas en línea con las que competencias que tiene la Generalitat. 

Frente a ello, asevera, «plantear una campaña más de guante blanco, haciendo balance de la gestión y ofreciendo compromisos futuros, plantea el interrogante de si será suficiente para separarse de los lastres que existan a nivel estatal y que en no pocas ocasiones han dañado a esta Comunidad, como la financiación, el agua o las inversiones».

Dilemas

En todo caso, el profesor universitario también advierte de que, si uno de los grandes dilemas es saber hacia dónde basculan los votos de Ciudadanos, «no parece que una balcanización de la campaña electoral, por la que pudiera parecer que ha optado el PP, sea el camino más correcto para atraer este tipo de voto, sino que puede acabar por competir con su hipotético socio de gobierno, con quien cada vez existen menos diferencias en los mensajes y discursos». Por otro lado, matiza el experto, «si el PSPV necesita, como están señalando las encuestas, aumentar su movilización y agitar a su electorado, se necesitará algún revulsivo que le haga ver la urgencia de sus votos y la necesidad de apoyos».

A la vista de todo esto, Gómez Gil hace un símil con la guerra de Ucrania para manifestar que «está por ver qué es más eficaz: si la campaña de bombardeos políticos masivos sobre la que parece apoyarse Mazón, o los disparos electorales precisos y selectivos que parece estar llevando a cabo Ximo Puig. Bien es cierto que, en ambos casos, la moral de la tropa va a ser determinante para alcanzar la victoria».

Actividad intensa para dar a conocer al candidato

Si hay algo en lo que tiene cierta desventaja Carlos Mazón es en el hecho de que se trata de un candidato nuevo, y que eso puede propiciar que el electorado no lo conozca tanto como a su rival, Ximo Puig, especialmente en las provincias de Valencia y Castellón, donde no ha tenido tanta exposición mediática. Y de eso es consciente el PPCV, que está organizando multitud de actos con el objetivo, precisamente, de difundir tanto su imagen como su discurso.

Así lo señala el responsable de la campaña, Miguel Barrachina, quien destaca que, desde la primera semana de noviembre, se han llevado a cabo 2.100 actos en el conjunto de la Comunidad Valenciana, en gran parte de los cuales ha intervenido el propio Mazón. «Queremos tener una presencia masiva, teniendo en cuenta que contamos con un candidato con una vitalidad y capacidad de trabajo desbordantes. De hecho, no son raras las jornadas en las que participa en más diez actos, en los que, además, estamos encontrado una respuesta por parte del público multitudinaria», subraya.

Barrachina señala, además, que el posible hándicap que podría supone el hecho de presentar un cabeza de lista nuevo en estos comicios ya se está corrigiendo, «como así lo ponen de manifiesto las encuestas».

Los actos, añade, se están realizando con numerosos colectivos, con la finalidad de trasladar el mensaje y difundir el programa electoral del PP, captando, al mismo tiempo, necesidades y propuestas. Barrachina está convencido de que «vamos a llevar a cabo más actividades que las demás formaciones políticas juntas».

De gira por las plazas de todas las comarcas

La campaña electoral que está desarrollando el PSPV tiene en la gira que está llevando a cabo por todas las comarcas de la Comunidad Valenciana una de sus principales bazas. Según explica el responsable, Miquel Soler, la finalidad de los actos, que se celebran en las principales plazas de los municipios, tiene como objetivo rendir cuentas sobre la gestión de los últimos ocho años, así como recoger las sugerencias que puedan llegar desde la ciudadanía.

En esta gira, además, los socialistas valencianos exponen las principales líneas en las que pretenden seguir avanzando, con el objetivo, añade Soler, de «alcanzar el pleno empleo, reforzar la justicia social y tener un territorio más cohesionado y sostenible».

El candidato a la reelección, Ximo Puig, ha estado presente en estos actos, en una dinámica que ha combinado con una serie de reuniones y encuentros más selectivos con diferentes sectores sociales, siempre con la finalidad de conocer sus demandas y trasladarles las iniciativas que se han estado desarrollando durante los dos últimos mandatos.

El responsable de campaña destaca que «hemos estado con jóvenes, agricultores, empresarios y un largo etcétera de colectivos, para tomar nota y conocer de primera mano los temas en los que debemos actuar. Tienen problemas y quieren soluciones, y nuestro compromiso es que vamos a trabajar para intentar responder a sus demandas, independientemente de si es de nuestra competencia o corresponde a otras administraciones. Reivindicaremos lo que haga falta donde sea, e insisto en que nuestra gestión es nuestro mejor aval».

Actos de cierre de campaña

Los candidatos tanto del PSPV como del PP tienen previsto celebrar actos de cierre de campaña en Alicante. En el caso de los socialistas, los eventos centrales, con presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, arrancaron el pasado viernes en Alicante, y continuarán el día 9 en Castellón y el 20 en València. La gira comarcal sigue en curso, y desembocará el día 26 en Alicante, donde Ximo Puig pondrá el broche a la contienda electoral. En el caso del PP, el acto central, en el que intervendrá el presidente nacional del partido, Alberto Núñez Feijóo, está programado para el día 21 en la plaza de toros de València. En el cierre de campaña, el día 26, Carlos Mazón estará en Alicante, aunque todavía no se ha decidido si acudirá también a València o Castellón. m. v.