La Sociedad Cultural Deportiva San Blas visita La Marjal de San Juan

El pasado domingo tuvo lugar una nueva salida de la SCD San Blas, dentro de las actividades programadas del Proyecto de barrio “El mar comienza en mi barrio”. En esta ocasión visitaron el Parque Urbano Inundable La Marjal, ubicado en la zona de la playa de San Juan, gracias a la intervención de la empresa de servicios Aguas de Alicante, que les facilitó la visita guiada.

Didácticamente desarrollada por uno de los biólogos del equipo de educación ambiental, que les explicó en el inicio de la visita que La Marjal estaba constituida por una parcela de unos 37.000 m2 de superficie, un terreno natural que se había destinado a retener las aguas pluviales, y que dada su topografía había podido transformarse en una zona de gran diversidad de flora y fauna.

Comenzaron la visita en el mirador escalonado bajo el cual se encuentran las bombas y compuertas que permiten la entrada de agua regenerada y las procedentes de pluviales. Dividida en zonas, visitaron primero la zona de vegetación forestal donde se recrea un ecosistema vegetal silvestre de los montes de la Comunidad valenciana: arbustos como el lentisco, árboles como la casuaria, o el pino, y diversas plantas aromáticas.

Siguieron con la observación de cultivos agrícolas de secano abancalados para facilitar la retención de tierra y agua; donde crecían algarrobos, almendros, higueras y viñas. Pasaron entonces por el estanque pequeño, de 335 m2, situado a continuación del vaso de retención de pluviales, la cascada, que oxigena sus aguas y el jardín vertical que oculta el muro que lo conforma.

De todas las zonas, la dedicada al estanque grande, con 6.700 m2 de superficie, es sin duda la más inspiradora; ya que en ella se encuentran dos islas de espacio dedicado a la nidificación de aves, casetas con nidales para atraer al martín pescador, y otras para los ánades y fochas que recorren las aguas del estanque.

La vegetación de ribera también está contemplada en sus alrededores, carrizos, eneas, juncos, sauces y chopos forman un contorno vegetal bien cuidado. Para terminar, el educador ambiental nos ayudó a descubrir la gran variedad de pájaros que ha llegado a La Marjal, mirlos, gorriones, urracas, verderones, jilgueros, abubillas e incluso halcones, entre otros, que forman una gran familia en crecimiento.

En síntesis, la visita a La Marjal aportó el conocimiento de un espacio que aboga por la creación de soluciones naturales a problemas medioamientales, mediante un espacio de recogida de agua regenerada y pluvial que además ha facilitado la creación de un hábitat de acogida para una gran biodiversidad.

Los visitantes descubrieron un espacio medioambiental municipal que merece la pena preservar; y que esperan constituya una experiencia extensible a otras zonas de la ciudad que también necesitan esas soluciones con carácter de urgencia.