Después del romántico reencuentro que protagonizaron hace tan solo unos días, Ángel Cristo Jr y Ana Herminia han disfrutado de su esperada boda en Supervivientes en compañía de algunos de sus compañeros de edición, porque no todos estaban invitados al gran evento de la edición.

Aunque la novia en un principio había apuntado a que todos los concursantes estarían invitados al evento pero finalmente Ángel decidió que no iba a ser así. Ángel decidió que sus damas de honor serían Aurah y Blanca y también asistirán Kiko Jiménez, Laura Matamoros, Gorka, Arkano y Pedro García Aguado. Por su parte, Javier Ungría, Arantxa del Sol, Marieta, Miri y Rubén seguían por televisión el enlace comiendo palomitas.

Con muchas ganas de verse por fin y convertidos en marido y mujer, Ángel y Ana se reencontraban en la ceremonia de su boda tras haber reconocido que están hecho el uno para el otro ya que esperan poder compartir el resto de su vida juntos. "Yo pensaba que me iba a quedar sola y Dios me premió con ese pedazo de hombre" reconocía la novia minutos antes de reencontrarse con Ángel. Recordando el complicado momento familiar que vive Ángel, su futura mujer reconocía que seguramente echaría de menos a ciertas personas en un día tan especial para él: "Yo me imagino que sí, habrá muchas personas a las que echará de menos, obviamente".

La esperada boda

Emocionado y muy nervioso, Ángel esperaba a su futura mujer en el altar dedicándole unas preciosas palabras: "Para mí es lo más importante de mi vida, me ha salvado, gracias a ella estoy aquí, no en Honduras, aquí viviendo". "Ella y yo ya nos conocíamos de otra vida" añadía. Finalmente, la pareja se reencontraba entre lágrimas y muestras de cariño demostrando el gran amor que se procesan.

Ana iba con un precioso traje blanco y una corona de flores con un velo por detrás. Ángel también vestido blanco con traje y pantalón y con su diadema roja en al cabeza no podía contener la emoción.

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"Me encontraste en el peor momento y gracias a tí estoy aquí, estoy vivo. Tú y yo sabemos que nuestro amor lo hemos vivido en otra vida muy lejana, era tan fuerte que Dios nos ha dado la oportuniad de revivirlo, somos almas gemelas" comenzaba diciendo Ángel en sus votos.

Derrochando amor y complicidad, la pareja ponía punto y final a la ceremonia poniendo rumbo a su noche de bodas, la más especial de todas en los cayos cochinos no sin antes lanzar el ramo de flores de la novia que cayó en manos de Gorka.