Opinión

Una de bacalao

Pablo Iglesias abre un bar en el popular barrio madrileño de Lavapiés

Pablo Iglesias abre un bar en el popular barrio madrileño de Lavapiés

Pablo Iglesias va a abrir un bar. El exdirigente de Podemos ha dado con la fórmula para volver a conectar con alguna plebe. No hay nada que el personal necesite más en estos momentos que darse a la bebida. Después de un porrón de vaivenes con los que los renombrados círculos fueron deshaciéndose esta es una buena iniciativa para reactivarlos. Que en la carta figure un plato de carrillada bajo el epígrafe de Brigada Garibaldi ofrece esperanzas.

   De una forma o de otra se antojaba vital poner tierra de por medio con la marisquería Koldo. Qué manera de chupar. Con la envergadura que presenta resulta envidiable la capacidad del personaje para desdoblarse. Y todavía le daba tiempo a percibir que con Ábalos estamos ante una figura pública sin igual. Casi, casi un estadista. Lo malo es que no creo que esto contente a la presidenta madrileña. Después de emplear tanta labia para ser ella quien dé la réplica al tal Sánchez ninguneando de paso a sus jefes de filas, ahora resulta que el plano que ocupa es el que le enfrenta al devorador de moluscos y de crustáceos. Eso sí, ha salido Tamara Falcó en su defensa para advertir que «estás en una relación y no sabes todo de la otra persona». Los pelos se te ponen de punta.

   En esas horas calientes, el entrenador del Oporto, Sérgio Conceiçao, tuvo una reacción explosiva al señalar que Mikel Arteta había insultado a su familia durante el choque de Champions, aunque luego se ha sabido que tres años atrás ya utilizó dicha táctica en un duelo frente al Chelsea. Es tan inspirador escuchar las exposiciones de Ayuso en torno a las cuestiones que se cuecen a su alrededor y en general sobre el resto de historias que no puedes por menos que pensar que, bajo a esa apariencia puede que algo altanera, se esconde una mujer cultivada, atormentada por no poder desplegar el rico sedimento que atesora edificado sobre la lectura de los grandes pensadores y pensadoras desde el principio de los tiempos, aunque con un claro referente por encima de todos. Efectivamente, Sérgio Conceiçao.