Opinión

Parloteo agridulce en “Charlas de azucarillo”

Teatro Arniches de Alicante.

Teatro Arniches de Alicante. / INFORMACIÓN

Charlas de azucarillo

TEATRE ARNICHES DE ALICANTE

** ½

Autoría, dirección e interpretación: Las Couchers. Actrices: Elena Donzel y Mari Marcos.

Mediante la idea de que una empresa de asesoramiento ayuda a conseguir la paz interior, la felicidad, la superación y el renacimiento personal, dos actrices, Elena Donzel y Mari Marcos, Las Couchers, amenizan y estimulan la reflexión de los asistentes con «Charlas de azucarillo», espectáculo con autoría y dirección de ambas y el contraste de esa pareja.

Consuelo y Socorro buscan la sanación de los espectadores, como los nombres de ellas indican y con la energía que transmiten. A nadie le viene mal una dosis de auxilio ante las adversidades y las circunstancias que nos frenan para seguir avanzando o convivir con ciertas cuestiones no siempre deseables.

La fórmula consiste en motivar a través de lo excéntrico, y la comunicación con el público es una de las herramientas básicas. Ahí está la técnica del mazazo contra las creencias u obstáculos que perjudican al individuo. La buena capacidad de las protagonistas se pone al servicio de estos asuntos con una de cal y otra de arena. Palabrerías, banalidad y algunos aspectos más aceptables.

¿Recuerdan la canción «El jardín prohibido»? Pues eso. La vida es así. La búsqueda permanente de la felicidad y del amor no siempre es una misión posible. Pero ahí están para imprimir ánimo con sus formas. «¡Viva la vida!», pese a todo, gritan.

El lenguaje gestual y corporal del histrionismo sale a relucir. Elementos de pantomima y acciones físicas y habladas. O la voz inicial en «off» de Juan Andrés González con tres eternas preguntas. ¿Quién soy yo? ¿De dónde vengo? ¿A dónde voy?

El grito del técnico-actor Jano de Miguel, además de las luces y del espacio sonoro, da lustre a la puesta en escena, junto a la bufonesca actitud y al delirio en una parodia que exige experiencia en este campo escénico.

Cada una aporta lo suyo y llevan juntas desde 2021, ya que durante la pandemia se unieron con el objetivo de poner en marcha una comicidad sanadora. Lo han intentado en el Teatre Arniches de Alicante. Y la compañía Las Couchers recibe grandes aplausos.