A dormir pronto

Imagen de archivo

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Clàudia Flaqué Vela

Un estudio publicado por el European Heart Journal, realizado a partir del estudio a 88.000 voluntarios, asegura que irse a la cama entre las 22:00 y las 23:00 horas mejora la salud de nuestro corazón.

Pero, ¿es esto realmente viable en nuestro país?

En España, llegamos tarde a casa de trabajar, de recoger a nuestros hijos o hermanos de sus actividades extraescolares y aún tenemos que convocar una reunión de última hora vía Zoom para terminar un trabajo de la universidad, pues hemos terminado las clases a las 21:00h. Después, una vez ya habiendo cenado, nos sentamos por fin en el sofá, justo a tiempo para empezar a ver nuestro programa favorito.

Son las 22:45h. La hora fijada en la cual arranca el prime time en nuestro país, uno de los más tardíos del mundo. Queden 15 minutos para llegar al límite de la franja establecida por el European Heart Journal. 15 minutos de tiempo libre en todo el día. Los únicos 15 minutos para sentarnos a charlar con nuestra familia y contarnos las anécdotas de ese día.

Sin darnos cuenta, se nos ha escapado el día y el presentador del programa anuncia ya la publicidad de casi media noche. Llevamos casi una hora empeorando la salud de nuestro corazón. ¿Será que los españoles no nos preocupamos por esto? ¿O es necesario un replanteamiento estructural y sistemático de nuestro estilo de vida para hacerlo más saludable, conciliable y sensato?