Barrachina y Pérez Llorca asumen la defensa del futuro gobierno de Mazón en las Cortes
El director de campaña será el síndic del Grupo Popular y como adjuntos estarán el alcalde de Finestrat, junto a Salomé Pradas y Laura Chuliá
cortes grupo pp / Información
El Partido Popular ha hecho bueno el dicho de «si funciona, no lo toques» o algo parecido ha debido pensar el presidente del PPCV, Carlos Mazón, cuando ha confiado, de nuevo, en el tándem formado por Miguel Barrachina y Juan Francisco Pérez Llorca para asumir la defensa del nuevo gobierno autonómico en las Cortes Valencianas.
La formación de centroderecha registró ayer su nueva estructura, donde el actual director de campaña será el síndic y el vicesecretario de Organización, adjunto. Este último compartirá cargo con la castellonense Salomé Pradas y la valenciana Laura Chuliá. Los cuatro conformarán el núcleo duro del Parlamento que, entre otras funciones, llevará el peso legislativo de un gobierno que se autodefine por «los cambios» a implantar.
Barrachina cuenta con experiencia en la Cámara, pues será su cuarto periodo en el hemiciclo valenciano y, en la anterior, fue azote del Botànic en cuestiones como la línea 9 del Tram o el caso Azud. Desde que Mazón iniciara la carrera hacia el Palau, el de Segorbe se ha convertido en una persona de máxima confianza y apoyo para el presidente popular. Lo mismo ocurre con Pérez Llorca. El alcalde de Finestrat comenzó el pasado mandato como diputado provincial alicantino y dejó su cargo para asumir nuevas responsabilidades en el partido.
El alicantino se estrena en las Cortes como sus otras dos compañeras. Los adjuntos también responden a la representación territorial, pues cada uno es diputado por las tres diferentes circunscripciones. Salomé Pradas es, en la actualidad, concejala por el Ayuntamiento de Castellón, pero hasta la convocatoria del 23J ocupó su escaño como senadora durante cuatro legislaturas. La abogada castellonense, además, fue directora general de Medio Natural de la Generalitat durante el final de etapa de Alberto Fabra como presidente de la Generalitat Valenciana. Por su parte, Laura Chuliá fue alcaldesa de Benetússer, una pequeña población del cinturón metropolitano de València y ahora era asesora en la Diputación valenciana.
Los cuatro portavoces del PP en las Cortes. / Información / David Revenga
Dosis de celeridad
En cuanto a los tiempos con los que se trabaja, el síndic del PP pidió a los grupos que todavía no se han constituido que lo hagan «con urgencia para no demorar más el cambio que pidieron los valencianos», en clara alusión al PSPV-PSOE. «Si el PP, que es el grupo más amplio, ha podido recoger 40 firmas y entregarlas, no tiene sentido que PSPV y Compromís se retrasen. Todo lo que pase de mañana (por hoy) será demorar intencionadamente la toma de posesión de Carlos Mazón como president de la Generalitat», indicó.
Además, el también director de campaña urgió a los socialistas a que «abrevien los plazos para que el cambio pueda ser cuanto antes». Barrachina se dirigió directamente a Puig, a quien le pidió «asumir que ha perdido las elecciones y debe ceder el paso. Apelamos a la naturalidad, deportividad y elegancia parlamentaria y que se deje de boicotear el proceso», señaló. Sus palabras fueron eco de lo que, en los últimos días, lleva diciendo Carlos Mazón. El líder popular llegó a pedir al jefe del Consell en funciones que saliera «del sillón» el pasado martes, día en el que el PPCV celebró un acto con Alberto Núñez Feijóo en la capital del Túria.
Estas afirmaciones chocan con lo expresado por el propio Ximo Puig, quien ayer pidió «lealtad» para realizar el traspaso, pero al mismo tiempo, confirmó que las portavocías de su grupo se definirán la próxima semana.
Los socialistas aplazan su estructura hasta la próxima semana
Mientras el PP está con el contador en la mano, los socialistas quieren marcar sus propios tiempos. Los partidos disponen hasta el jueves 6 de julio para registrar sus órganos de representación en la Cámara.
Ayer el secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, avanzó en Alicante que la próxima semana se constituirá el grupo parlamentario. Los que están mejor posicionados son los consellers Rebeca Torró y Arcadi España que, hasta el momento y junto a María José Salvador, se han ocupado de las negociaciones con el resto de partidos y, en especial, han tenido que afrontar las comparecencias ante los medios de comunicación. En este ecuación, hay que tener en cuenta que, de acuerdo con el número de diputados (31), la formación tiene derecho a designar un síndic y tres adjuntos. El mismo número que el PP. Los socialistas se convertirán en el último partido en configurar su equipo y hasta que no lo hagan, la Mesa de las Cortes no podrá realizar las consultas con los portavoces para que den a conocer a sus candidatos a la presidencia de la Generalitat Valenciana.
Fuera de la normativa del Parlamento, los partidos tienen la opción de determinar su organigrama como consideren. Es ahí donde emerge la figura del presidente del grupo. Tanto los populares como los socialistas la han utilizado y su papel tiene un exclusivo valor político, pues la representatividad la tienen los síndicos y síndicos adjuntos tal y como marca el reglamento vigente.
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