La recuperación de la Vega Baja tras la DANA: el Consell amplía el plazo de las ayudas y el Botànic defiende su legado

Las Cortes convalida hoy la prórroga de las obras hasta 2026 tras un debate en el que el PP acusa al PSOE de «vender humo» en la comarca y en el que los socialistas reivindican el trabajo del Gobierno de Puig

Minuto de silencio en las Cortes por el incendio de València, entre otros motivos

Minuto de silencio en las Cortes por el incendio de València, entre otros motivos / José Cuéllar / Cortes Valencianas

Borja Campoy

Borja Campoy

Tras la catástrofe que supuso para la Vega Baja la DANA de 2019, el consenso político en torno al plan de recuperación económica y social de la comarca no se ha producido nunca y, conforme pasa el tiempo, no tiene visos de que vaya a llegar. Las distancias en este asunto, sobre todo entre el Partido Popular y el PSPV-PSOE, son cada vez más grandes, como quedó en evidencia este miércoles en el debate que se celebró en las Cortes Valencianas, previo a la convalidación este jueves del decreto del Consell por el que el plazo de ejecución de las obras en los municipios de la Vega Baja y en Crevillent se prorrogará hasta el 30 de noviembre de 2026.

Propaganda

Desde las filas populares se ha venido criticando el Plan Vega Renhace que puso en marcha en su día el Botànic para impulsar la recuperación de este territorio. «Es propaganda pura», aseguró el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, en un pleno que el Consell celebró en Orihuela el pasado septiembre. El actual Gobierno autonómico ha decidido eliminar el nombre del plan que impulsó el anterior Ejecutivo y en el debate de ayer en las Cortes se repitieron las acusaciones a los socialistas de «vender humo» en el sur de la provincia de Alicante y de haber incluido infraestructuras educativas y sanitarias en un proyecto que originalmente estaba concebido para la realización de obras que evitaran nuevas inundaciones. Desde las filas socialistas, por su parte, se defiende el legado del trabajo hecho por el Botànic, se reivindica la apuesta que el propio Ximo Puig hizo por la Vega Baja y se acusa a Mazón de intentar borrar la huella de su antecesor y ponerse él la medalla de la regeneración.

La presentación este miércoles en las Cortes del decreto del Consell por el que se aprueba la ampliación del plazo para la ejecución de las obras corrió a cargo de la consellera de Medio Ambiente, Salomé Pradas. La representante del Gobierno autonómico defendió que las obras se puedan culminar en 2026 por la incidencia que han tenido factores como la pandemia, la guerra de Ucrania o el incremento de los precios y responsabilizó al Botànic de que las obras no hayan avanzado por «inacción, contradicciones internas y nula colaboración con los ayuntamientos». Del mismo modo, acusó al Ejecutivo de izquierdas de haber «callado» ante los recortes que ha venido sufriendo el trasvase Tajo-Segura, situación que consideró que ha supuesto un lastre para el desarrollo de la comarca.

Alicantinos

Los cuatro diputados que participaron en el debate por parte de los grupos con representación en las Cortes son alicantinos. Por el PP tomó la palabra la también alcaldesa de Almoradí, María Gómez, que acusó al Botànic de «diseñar planes y más planes» y que consideró que el resultado de las elecciones del 28M en la Vega Baja, que fue favorable para el PP, refleja el descontento de la comarca con el plan de Puig. El socialista Ramón Abad defendió que el Botànic aplicó una «política de Estado» para la recuperación tras la DANA que el PP busca eliminar por «sectarismo». La participación de Juan Bordera, de Compromís, y Miguel Pascual, de Vox, fue residual. El primero giró el debate hacia el cambio climático, mientras que el voxista cerró filas con el discurso de su socio de gobierno.

De las acusaciones a la CHS a la situación que vive Torrevieja

El pleno en las Cortes, al margen de evidenciar las discrepancias entre el PP y el PSPV, sirvió para que se pusieran otras cuestiones sobre la mesa. Los populares, al margen de culpar al Botànic, arremetieron contra la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), a la que acusaron de no acometer las infraestructuras que son de su competencia. Por su parte, los socialistas cargaron contra el Ayuntamiento de Torrevieja, gobernado por el PP, por no haber tramitado en dos años las subvenciones de siete actuaciones contra las inundaciones financiadas por el Consell.