Inicialmente habían dicho que se encadenarían frente al Ayuntamiento durante 24 horas, pero pronto ampliaron su protesta a 72 horas. El traslado de lugar se debió a las "sugerencias" de los cuerpos de seguridad, según explicaron. Al final tuvieron que clausurar su peculiar "acampada" una noche antes de lo previsto, pues las fuertes lluvias les impedían seguir con los trabajos preparatorios de pancartas y materiales que usaron en la marcha celebrada ayer.