Una treintena de personas se concentraron ayer en el vestíbulo del Ayuntamiento de Orihuela para decir "no al cierre de la residencia del "Oriol"". De este modo, la asociación ADIS y las asociaciones de padres y madres del centro ocupacional "Oriol" y del colegio de educación especial "Antonio Sequeros" protestaron por la clausura de este servicio, que cubre a 28 discapacitados de esta ciudad y de otros puntos de la provincia de Alicante.
La demolición y construcción del nuevo centro ocupacional "Oriol" supondrá el fin de esta residencia que comenzó a estar operativa en 2001. Los internos fueron trasladados al edificio que ocupaba el antiguo asilo y que ha sido alquilado por el Ayuntamiento para alojar provisionalmente a los residentes y a los usuarios de los talleres ocupacionales. Después del verano, algunos ingresados serán derivados a residencias de otros municipios de la Comunidad Valenciana y otros volverán a casa con sus familias. Muchos de los residentes lo son porque sus parientes no pueden hacerse cargo de ellos y algunos no tienen ningún familiar.
La presidenta de ADIS, Josefina Valero, pidió al equipo de Gobierno que mantenga a los internos en las dependencias provisionales del asilo hasta que haya una nueva residencia en Orihuela. "Tienen en la residencia su vida y están acostumbrados al trato con el personal y los compañeros", señaló Valero. La presidenta del colectivo que representa a los discapacitados de la comarca de la Vega Baja temió que el traslado de los internos provoque el "desarraigo" de estos después de vivir durante diez años en Orihuela.
"Alejamiento y desapego es lo que van a recibir (los residentes) de su municipio", sentenció, al tiempo que indicó que "hacen desaparecer su pasado y les dejan sin futuro". De este modo, Valero adelantó que los manifestantes volverán a ocupar el vestíbulo del consistorio el próximo 28 de diciembre y todos los martes del mes de enero entre las 10.30 y las 11.30 horas, siempre y cuando el equipo de Gobierno no dé marcha atrás en el cierre de la residencia o se comprometa a alojar a los internos en un local mientras se construye una nueva residencia. El equipo de Gobierno, por su parte, promovió una moción institucional para pedir a la Conselleria de Bienestar Social que construya una nueva residencia.
"Conselleria sabe que se necesita esa instalación"
La concejala de Bienestar Social, Araceli Vilella, explicó que la Generalitat "sabe que se necesita una residencia (para discapacitados en Orihuela)". La edil habló con los manifestantes y les informó de la moción institucional del PP en la que se pide a la Conselleria de Bienestar Social que construya un nuevo internado. Preguntada por el hecho de que se haya cerrado la residencia antes de solicitar el nuevo centro, Vilella matizó que el Ayuntamiento informó de la clausura a la Generalitat "en 2009" y que "sabe que se necesita una". Recordó que hay instalaciones "nuevas" para discapacitados sin abrir en Callosa. m. l. m.
