El jueves por la mañana está previsto que el secretario municipal de Orihuela emita un informe jurídico que podría decidir el futuro de la moción de censura presentada por el PP y CLr contra el gobierno bipartito del alcalde Monserrate Guillén (Los Verdes). El fedatario público se pronunciará sobre la expulsión y adscripción de los ediles Juan Ignacio López Bas y Pedro Mancebo (CLr). El hecho de que los considere no adscritos impediría que se llevase a cabo la votación en el pleno previsto para el viernes. Los ediles Asunción Mayoral y Bob Houliston deberán remitir al secretario toda la información sobre el proceso de expulsión de la coalición, decidido hace unos días, de López Bas y Mancebo antes del jueves.

La expulsión se decidió después de que el secretario diera por buenas las firmas de ambos ediles. Los concejales no adscritos no pueden votar mociones de censura. Una medida legal para evitar que los gobiernos de la administración local sean decididos con el voto de tránsfugas.

El alcalde de Orihuela, Monserrate Guillén, de Los Verdes y que gobierna en minoría con el apoyo del PSPV-PSOE, ha lamentado que lo quieran "echar" pese a que es el primer regidor de la ciudad en el último cuarto de siglo que no ha tenido problemas con la Justicia.

Guillén se ha referido de esta forma a la moción de censura que el PP y dos concejales elegidos por el CLr-Claro (Pedro Mancebo y Juan Ignacio López-Bas) pretenden hacer prosperar el próximo día 3, a la espera de que se aclare si éstos dos últimos pueden votar legalmente a favor de la iniciativa en dicha sesión.

Guillén es el alcalde ecologista de mayor relevancia del país, el segundo es de Villena (Francisco Esquembre), y dirige uno de los mayores términos municipales y una población de más de 90.000 habitantes.

En las elecciones de 2011 y pese a tener sólo 3 de los 25 concejales de la corporación, se convirtió en alcalde con el apoyo de los 6 del PSPV-PSOE y los 4 del CLr-Claro, aunque ésta última coalición le retiró el apoyo hace poco menos de un año.

Guillén afirma que, ante la situación de la moción de censura, ha optado por recoger sus pertenencias del despacho de la alcaldía, aunque ha insistido en que el gobierno que ha trabajado estos dos años por la ciudad "merece una consideración".

"Si el día 3 de enero sale adelante una moción de censura seguiré trabajando desde la oposición, tal y como he intentado hacerlo en el grupo de gobierno", ha subrayado.

De su legado político, en caso de que el día 3 deje el cargo, ha destacado que en dos años de una crisis económica "terrible" ha mantenido "e incluso mejorado" los servicios públicos, los puestos de trabajo y sin hacer "recortes de ningún tipo", siempre defendiendo "los intereses generales de todos los ciudadanos".

Por ello, ha pedido ser recordado por el "gran trabajo realizado por Orihuela, la honradez en todos los sentidos y la honestidad en los planteamientos, así como la transparencia y cercanía del ayuntamiento".

Ha subrayado que bajo su mandato "no se ha gastado ni un céntimo más de lo que estaba presupuestado" para evitar incrementar la deuda millonaria que ya mantiene el consistorio, y también ha valorado la labor desarrollada en las pedanías, la costa y el casco urbano oriolano.

Para Guillén, pese a la falta de dinero los dos últimos años han sido de esplendor cultural y educativo y, como no podía ser de otro modo tratándose del primer alcalde ecologista, de trabajo en diversos aspectos medioambientales, como la consolidación del Palmeral.

Ha explicado que en los presupuestos de 2014 pretende seguir avanzando en construir una Orihuela "sostenible y accesible" teniendo muy presentes la zona costera, donde se destinará una parte considerable para la construcción, entre otros, de una pasarela sobre la N-332 o un ecoparque que resuelva definitivamente el destino de las podas.

En cuanto al casco urbano, uno de los aspectos más importantes que tratarían es la "urbanización de la losa del AVE" puesto que, según las palabras del alcalde, ADIF les ha confirmado que a finales del próximo año estará concluida la obra del paso de la línea.

Las cuentas también incluirían el pago del más de millón de euros por las expropiaciones realizadas en 2008 por los trabajos en la N-332, y sobre las que existe una sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJCV).

Uno de los asuntos por los que Orihuela pelea desde hace años y que aún colea es la permuta con la Generalitat por el Palacio de Justicia, un asunto que confía en retomar "pronto", en caso de seguir el frente de Orihuela, aunque duda del compromiso del Consell.