Después de 50 días hábiles de plazo para realizar ofertas, siete empresas se han presentado a la licitación de las obras de conservación, restauración y rehabilitación del Palacio de Rubalcava de Orihuela. Antes, a principios de marzo, el área de Contratación del Ayuntamiento había convocado a las mercantiles interesadas para una visita guiada por el edificio. Lo mismo ha hecho la administración con la antigua sede de la caja de ahorros de Nuestra Señora de Monserrate. En este caso finalmente han sido cuatro empresas las que optan a hacerse con el contrato. Fuentes del Ayuntamiento indican que habrá que esperar mínimo dos meses para que se resuelvan las adjudicaciones.
En el caso del Palacio de Rubalcava, que figura en el Plan Especial de Protección del Casco Histórico, se trata de un inmueble que el Consistorio compró hace 41 años para darle un uso social y cultural. Desde entonces, ventanas abiertas a un deterioro galopante, cristales rotos, maleza y palmeras pasto del picudo han sido su leitmotiv. Por su "degradación progresiva y un aspecto de decrepitud" la asociación Hispania Nostra lo incluyó en 2016 en la Lista Roja del Patrimonio. Incluso, el año pasado se desprendieron varios elementos de su fachada cayendo a la vía pública.
El anuncio de licitación establece que las obras, con un presupuesto de 3,8 millones de euros, tendrán una duración de 18 meses, siendo este periodo de ejecución susceptible de reducción por la oferta del adjudicatario. El objetivo es que albergue salas de museo y multifuncionales, así como una escuela de hostelería, con un restaurante y cafetería.
Según el Ayuntamiento, se trata de uno de los grandes proyectos de este mandato que tras años de dificultades, finalmente afronta su fase final para poner en marcha las obras de rehabilitación de este Bien de Relevancia Local y que está situado en un entorno considerado Bien de Interés Cultural".
La antigua caja de ahorros, un palacio abarrocado y de una gran calidad arquitectónica, en pleno casco histórico -junto a la Biblioteca Fernando de Loazes-, es la sede del centro cultural Miguel Hernández: "Presenta un deterioro acelerado al que hay que poner fin mediante la restauración de los elementos arquitectónicos con valor cultural y la conservación de los espacios, abriéndolo al uso público como elemento potenciador de los itinerarios culturales y turísticos del casco histórico de Orihuela", recoge el proyecto de actuación.
Con un presupuesto de 3,5 millones de euros y un plazo de ejecución de 14 meses, dispondrá de espacios polivalentes dedicados a la docencia, las industrias creativas y la vida asociativa. En concreto, el proyecto describe cuatro ejes: formación en torno al turismo, el patrimonio, la cultura y el ocio, lo que requiere de espacios abiertos de trabajo en equipo; un vivero de empresas innovadoras para apoyar a emprendedores, con salas flexibles y oficinas; laboratorios destinados a la fabricación física y digital de productos asociados a las industrias creativas, y espacios de encuentro y trabajo colaborativo que permitan la celebración de actos y otras actividades para dar cabida a la participación ciudadana.
Ambas actuaciones, que pretenden contribuir a recuperar la actividad del casco histórico, se enmarcan en la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible (Edusi), que está cofinanciada al 50% por fondos europeos. En cuanto al ámbito municipal, el PP pudo sacarlo adelante gracias al apoyo del PSOE, que en julio votó a favor de una propuesta que obtuvo el rechazo de su socio de gobierno (Ciudadanos), para incorporar un montante del superávit de los presupuestos para este fin.
Dos edificios emblemáticos de Orihuela que necesitan una actuación de manera urgente. En palabras, del Ayuntamiento dos de las obras más importantes que se van a llevar a cabo en este mandato en cuanto a conservación, restauración y rehabilitación del patrimonio.
