La Hoguera del barrio Molinos del Calvario vuelve a plantar su monumento en este popular lugar de Torrevieja. Mantiene contra viento y marea la tradición de las fiestas de las Hogueras de San Juan desde hace 30 años, pese a las muchas dificultades. Y desde hace ya mucho tiempo es la única hoguera que sigue rindiendo culto al fuego en una ciudad en la que se llegaron a levantar más de media docena distribuidas por sus principales barrios.
Tras sobrevivir a dos años de pandemia explica Alfredo Guillén, impulsor de la fiesta, que cuenta con un respaldo económico vital del Ayuntamiento de Torrevieja. La hoguera infantil, de Servior & Priol Arts, está dedicada a las fiestas de la Costa Blanca e indulta la ofrenda de flores a la Purísima, mientras que en el monumento principal, bajo el lema "Oriéntame", una creación del artista foguerer y faller Álex Oliver de Carcaixent, presenta en torno a una pagoda figuras y temáticas centradas en Asia y en especial en China, pasadas al tamiz de la actualidad local y contadas en puro torrevejense. Entre ellas una figura de la concejala de Fiestas, Concha Sala, con un gato de la suerte. Este momento está preparado antes de la pandemia.
Todo con una programación de lo más intensa, que permite disfrutar de la calle, sin coches durante unos días, en este genuino rincón del casco urbano de Torrevieja. Comenzará con el encendido de la iluminación de la calle este domingo, la inauguración de la barraca el lunes 20 y chocolate con mona; los almuerzos, actuaciones y juegos el martes; la actuación de la chirigota Los Sangochaos el miércoles, o la paella gigante y el pasacalles de la comisión el jueves.
El viernes llega el día grande. Se espera desde hace dos años y se dará buena cuenta con la recuperación de una ruidosa mascletà que de seguro hará temblar la plaza del Calvario. La cremà del monumento ya bien avanzada la medianoche, será el acto central que renueve la fiesta.
