La cuenca del Segura sigue en alerta por escasez y habrá restricciones al regadío pero no al abastecimiento

La situación crítica en los embalses de la cuenca del Segura acarreará, finalmente, restricciones al regadío a partir de este mes de octubre. El Segura continúa en situación de alerta por escasez por segundo mes consecutivo por lo que la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) convocará a su junta de gobierno para la próxima semana para la aplicación de las medidas establecidas en el Plan Especial de Sequía, que aplicará medidas restrictivas en el caso del riego.

No obstante, el abastecimiento a las poblaciones continúa garantizado para el presente año hidrológico gracias a las garantías del Taibilla, aseguran desde el organismo de cuenca. Pese a ser el segundo mes consecutivo con estado de alerta en la cuenca del río Segura, la CHS advierte de que no se prevén restricciones para el abastecimiento en este año hidrológico 2023-2024 gracias a los diversos orígenes de recursos que gestiona la Mancomunidad de los Canales del Taibilla.

La crítica situación de los embalses en la cuenca del Segura amenaza con restricciones al regadío desde octubre

Plan Especial de Sequía

Sin embargo, la declaración del escenario de Alerta implica que la CHS activará las medidas correspondientes contempladas en el Plan Especial de Sequía para la cuenca del Segura en el caso del regadío. Esta cuestión se va a proponer a la próxima junta de gobierno e implicará una "reducción moderada", señala la CHS, de las dotaciones a suministrar a la espera de la evolución hidrológica de este otoño.

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura, Mario Urrea, ya advirtió hace unos días en Orihuela que los indicadores que maneja el organismo de cuenca señalaban que se mantendría la situación de alerta. De esta forma, al continuar los embalses de la cuenca del Segura como hasta ahora, por debajo del 25% de capacidad, la CHS activará el Plan Especial de Sequía que contempla restricciones, primeramente, al regadío tradicional. Para generar esta medida se deben dar dos meses consecutivos de prealerta o alerta, como sucede desde julio.

El plan especial contempla hasta un 25% de limitación de los aportes a los regantes. Sin embargo, la CHS maneja un porcentaje que oscilará entre el 10% y el 15% de las concesiones, según indicó Urrea hace unos días.

En concreto, los embalses de la cuenca del Segura están al 24,39% de su capacidad, con 278 hectómetros cúbicos de agua de los 1.140 que podrían almacenar. Son 3 hectómetros cúbicos menos que hace una semana, y 109 menos que hace un año.

Asimismo, la Comisaría de Agua intensificará el control y vigilancia de los recursos hídricos a fin de garantizar el reparto equitativo de las dotaciones resultantes en razón de las reducciones que finalmente se adopten.

Por todos estos motivos, la CHS quiere hacer un llamamiento a todos los usuarios para que realicen un consumo racional de los recursos disponibles dada la situación de alerta que se constata en la Demarcación del Segura.

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Índices de escasez

Los índices de escasez coyuntural de la cuenca del Segura se encuentran en nivel de alerta a fecha 1 de octubre de 2023. El índice de escasez del sistema global que incluye las aportaciones y existencias de la cuenca y del trasvase Tajo-Segura está en 0.234 sobre 1, que se corresponde con la situación de alerta.

De forma individualizada, el índice de escasez del Sistema Cuenca está en 0.288 sobre 1, situación de alerta. Por su parte, el Índice de escasez Sistema Trasvase está en 0.18 sobre 1, situación de alerta.

Por otro lado, el resto de unidades territoriales contemplan que la zona de cabecera está en prealerta, mientras que la margen derecha e izquierda mantienen una situación de normalidad.

La cuenca del Segura mantiene la ausencia de sequía prolongada, que se calcula únicamente con datos de pluviometría, lo que implica el mantenimiento de los caudales ecológicos que contempla la planificación hidrológica y que son una restricción a los usos, excluido el abastecimiento.