La ministra Ribera a los vecinos de San Miguel: "Buscamos la mejor solución para que nadie sienta la planta solar como una agresión"

"Estamos trabajando sobre el terreno para encontrar la mejor solución. Espero en las próximas semanas poder presentar esa solución idónea para los vecinos, los regantes, y obviamente para quienes viven en la zona". Es lo más concreto que pudo decir este martes la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera (PSOE) a preguntas del Partido Popular en la sesión de control del Senado sobre el proyecto de planta fotovoltaica que ha provocado una gran preocupación entre los vecinos y regantes de San Miguel de Salinas, protagonistas de varias movilizaciones y concentraciones de rechazo en los últimos meses.

200 hectáreas

Una instalación en cuyo anteproyecto figura la ocupación de 200 hectáreas de suelo del llano del Campo de Salinas con placas solares para rebajar la factura eléctrica de la vecina desaladora de Torrevieja que abastece a los regantes del trasvase Tajo-Segura.

En un breve encuentro posterior con los vecinos -el municipio fletó un autobús para estar presente en la sesión- aseguró Ribera que la planta solar "no estará donde se dice que va a estar y no se va a hacer contra la voluntad de los vecinos", sin dar más detalle, ante los representantes de la Asociación de Vecinos de San Miguel y el alcalde Juan de Dios Fresneda (PSOE) y miembros de la Corporación como la concejala Bienvenida Campillo (IU). También anticipó que esa iniciativa se dará a conocer antes de que deje el puesto vacante de ministra y vicepresidenta.

Encuentro en el Senado

La ministra confirmó esa seguridad de que la planta no va en el llano del Campo de Salinas cuando fue abordada en los pasillos del Senado por las concejalas del Partido Popular, Soledad Soto y Maria José Costa Medrano, que le dejaron claro el sentir de la mayoría de los vecinos en contra la instalación.

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Pregunta de Teresa Belmonte

Esa respuesta y también la reunión con los vecinos fue posible después de que la senadora y alcaldesa de Bigastro, Teresa Belmonte (PP), interpelara a la ministra y vicepresidenta del Gobierno por le proyecto que moviliza a los vecinos de San Miguel desde el pasado mes de febrero para rechazar la planta.

La senadora popular pidió a la ministra que mirase a los ojos de los vecinos -presentes en la sesión del Senado-, y les dijera que la planta solar no iba a poner en peligro su municipio, que vive, dijo de la agricultura del turismo y donde están censados casi 8.000 vecinos de más de 70 nacionalidades.

Belmonte tachó de dudoso el plan hidrológico de cuenca del Tajo que recorta el trasvase, la preferencia por el agua desalada -"de peor calidad pese a lo que usted diga"- y se remontó a la derogación del Plan Hidrológico de Zapatero en su interpelación.

De la mano de los actores locales

Ribera, que está de salida del Gobierno como cabeza de lista socialista a las elecciones europeas, se comprometió a decidir sobre esta instalación "de la mano de los actores locales. Buscando soluciones que nadie sienta como una agresión y sabiendo que efectivamente será importante que esto no sea percibido por el término municipal como una imposición desde fuera", señaló.

Sí que quiso Ribera ser algo más precisa en los motivos que explican la necesidad de la planta más allá de valorar que se ubique en uno de los suelos con mayor capacidad agrícola de la Vega Baja, entre el casco urbano de San Miguel y la laguna de Torrevieja.

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En esencia, ha recordó que el Estado financia con su presupuesto un precio estable asumible del metro cúbico para que los regantes puedan abastecerse de esa agua. Y necesita, al mismo tiempo, garantizar el suministro energético, que confirmó, supone 55 millones de euros anuales solo para la planta de Torrevieja -el 60% del coste de un metro cúbico de agua desalada, en torno a un euro, se atribuye al coste energético-.

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Buscando la mejor solución

"Estamos buscando la mejor solución para ese desarrollo fotovoltaico que nos permita tener la infraestructura activa de la planta desaladora de Torrevieja en una producción de 120 hectómetros cúbicos". Y ahí es donde ha recordado, en primer lugar, que la construcción está financiada por unos fondos europeos de resiliencia que contaron, a juicio de Ribera, con la "férrea oposición" del Partido Popular en Bruselas. Para especificar que en dos ocasiones que la previsión es que la planta desaladora de Torrevieja esté ampliada a finales de 2026 con la capacidad prevista de 120 hectómetros anuales, frente a los 80 actuales.

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Aunque la adjudicación del proyecto a Ferrovial-Sacyr está pendiente de un recurso de Acciona, cuya plica fue excluida del concurso para esa ampliación valorada en más de cien millones de euros. "Por eso hemos acordado con los regantes una aportación extraordinaria para mantener un precio estable en el metro cúbico del agua desalada gracias a una aportación directa de los presupuestos generales del Estado a Acuamed que alivia esa carga económica del agua desalada", recordó al Partido Popular, en alusión a las concesiones a las comunidades de regantes del Sindicato Central del Acueducto Tajo-Segura que reciben el caudal de Torrevieja con un 70% del precio del metro cúbico subvencionado.

Pregunta de la senadora Teresa Belmonte y respuesta de la ministra Ribera desde el -2:17

La mayor parte de los 80 hectómetros y la ampliación de la capacidad de generación por la que los regantes de San Miguel podrían perder sus tierras se derivarán a la agricultura intensiva de empresas agrícolas murcianas, aunque la administración también tiene planes para que las comunidades de la Vega Baja cuenten con infraestructuras que permitan optar a estos caudales.

Ante las alusiones que hizo la senadora popular a las políticas de agua del Gobierno señaló Ribera "que es importante trabajar junto a los regantes. Lo venimos haciendo desde el primer día, con honestidad y franqueza. Si no llueve da igual lo que digan las reglas del trasvase Tajo-Segura. Lo importante es hacer una buena gestión de las reglas del trasvase que es lo que veníamos haciendo y nos ha permitido garantizar unos volúmenes máximos de aportación y de mantenimiento de cabecera de Tajo".

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"Y hacerlo de forma que el agua que pueda ser utilizada por los regantes, ya sea de superficie, de los acuíferos o desalada sea a un precio asumible por los regantes. Esto requiere una inversión importante que es lo que hemos reflejado en nuestros planes hidrológicos", ha indicado.

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Revisión

En su réplica a la respuesta de la ministra Belmonte agradeció a la ministra que "busque alternativas técnicas" y que se vaya a revisar el proyecto, si finalmente es así, y recordó los valores ambientales en los que están enclavados los terrenos, entre el Paisaje Protegido de Sierra Escalona y junto al parque natural de las lagunas de Torrevieja y La Mata. También señaló que el proyecto tiene un impacto muy negativo en las propiedades sobre una extensión de dos millones de metros cuadrados.

En diez días

Teresa Belmonte ha puesto en valor el hecho de que el grupo del Partido Popular en el Senado, del que también forma parte la oriolana Eva Ortiz, pudiera plantear este debate en menos de diez días en el Senado, gracias al contacto que establecieron primero con los vecinos afectados, la Asociación de Vecinos y el Ayuntamiento de San Miguel, gobernado por el PSOE y al hecho de plantear en el grupo popular la necesidad de actuar lo antes posible.