Paralizan la ampliación del vertedero de El Campello para proteger a los vecinos de los malos olores

La Conselleria envía un informe a FCC, empresa que opera en la planta de tratamiento, en el que exige conocer más detalles sobre los procedimientos que se van a ejecutar en el recinto

La planta de residuos de El Campello

La planta de residuos de El Campello / INFORMACIÓN

Un alto temporal en el camino. En esa fase ha entrado el vertedero de El Campello, que aparece mencionado en una nota a la que ha tenido acceso INFORMACIÓN, emitida por la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, y dirigida a FCC, empresa que opera en la planta. El organismo autonómico ha respondido a la compañía y a su solicitud de aumentar las dimensiones del recinto, objetivo que queda ahora en punto muerto hasta que se resuelvan un par de cuestiones relevantes.

Ese par de asuntos son «la nueva redacción del plan de olores» y «el nuevo plan de vigilancia». Se trata de dos materias que la Generalitat quiere conocer más a fondo como condición para que la ampliación del centro de residuos se pueda retomar. La finalidad de estas exigencias es garantizar las buenas prácticas por parte de la mercantil, que según se desprende en el comunicado, «no ha realizado los informes sobre el cumplimiento del Plan de Gestión de Olores». Según indica la Generalitat, «el Estudio Olfatométrico que presenta FCC en su solicitud no reúne los requisitos que exige la Ley» y «utiliza una metodología inadecuada», ya que ha empleado un procedimiento que «no es capaz de aportar resultados concluyentes».

La Conselleria también especifica que el plan de desarrollo del vertedero presentado por la firma «no cumple los requisitos generales de control de gases, molestias y riesgos». En su carta remitida a la compañía, la institución autonómica considera que la modificación que se proyecta para el complejo está construida sobre «vaguedades» como recomendar actuaciones «con la frecuencia adecuada».

La Generalitat tampoco entiende que sean los responsables del área los que deban «familiarizarse con los procesos/características o procedimientos de trabajo» y pide que, con el fin de dar luz verde a la ejecución, estos detalles deben «figurar de manera concreta». Pese a estas aparentes hostilidades, el presidente del Consorcio Mare, entidad que gestiona la planta, José Ramón González de Zárate, ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad con el fin de reflejar la buena sintonía con la Conselleria.

Según ha afirmado el máximo representante de la corporación, y también miembro del equipo de gobierno (PP) en el Ayuntamiento de Benidorm, la decisión de Conselleria hay que valorarla como un paso más para cumplir el objetivo que también pretende conseguir la institución que él dirige: «Proteger mucho más a los vecinos».

González de Zárate ha calificado las peticiones de Conselleria como un procedimiento necesario para vigilar que todo funciona adecuadamente y hacer un estudio más profundo que permita constatar que los niveles de olores se ajustan a lo que marca la normativa. El dirigente del Consorcio ha querido sacar pecho por la gestión del vertedero y ha adelantado que «dentro de breves fechas, vamos a poner en marcha el 100% del recinto». «El presupuesto es de más de 26 millones de euros y el 60% de ese dinero va a ir destinado a mejorar la planta de gases», ha expresado el presidente de la entidad, que ha querido disipar cualquier duda al respecto y ha afirmado que FCC ya ha enviado a la Generalitat los documentos solicitados.

El máximo mandatario del organismo ha recordado que en 2023 la planta de tratamiento ubicada en El Campello, y que da servicio tanto al municipio costero de l’Alacantí como a las localidades de la Marina Baixa y la Marina Alta, fue la primera en alcanzar los «exigentes objetivos» establecidos Plan Integral de Residuos de la Comunidad Valenciana (PIRCV).

Desde el Ayuntamiento de la ciudad también se ha optado por el tono diplomático cuando se ha tenido conocimiento de la noticia. «Siempre al lado de lo que resuelva la Conselleria de Medio Ambiente, y en este caso por supuesto, ya que se trata de exigir medidas garantistas, con las que siempre estaremos de acuerdo». Así se ha pronunciado el alcalde de la ciudad, Juanjo Berenguer (PP).

Los vecinos siguen preocupados

Más escépticos se muestran algunos de los vecinos de la localidad, como la Asociación Vecinal Campellera, uno de los colectivos más críticos con respecto a todo lo que rodea a la polémica con el vertedero. «Asombro, preocupación y disconformidad», son las palabras que han elegido desde la agrupación para plasmar su sentir. «La mercantil ha sufrido decenas de expedientes sancionadores por la mala gestión de la planta de tratamiento de residuos y del vertedero anexo», remarcan desde la asociación, que contradicen la versión positiva aportada desde la dirección del Consorcio Mare y recuerdan que «se han presentado miles de denuncias por vecinos a causa de los constantes olores insoportables».

En este sentido, la sociedad ha recalcado que «es de comprender el enfado general de la población campellera al no entender que la administración autonómica pueda autorizar la ampliación del vertedero y alargar la vida útil de esa actividad molesta y perjudicial para los vecinos en particular y el municipio en general».