Si usted ha circulado en las últimas semanas por el túnel de Sant Joan, es probable que se haya fijado en unos conos en los laterales, en unas vallas en una de las seis salidas de emergencia o en que la pared tiene un color blanco impoluto. Forman parte de la primera gran obra que la administración central ha acometido en el paso subterráneo, de casi dos kilómetros, para mejorar la seguridad de una infraestructura para la que pasan los años, 32, desde su puesta en funcionamiento.

Por ese tramo de la A-70 transitan cada día unos 60.000 vehículos y la infraestructura no cumplía los requisitos mínimos de seguridad que fija el decreto del año 2006 en la red de carreteras del Estado. Por ello, el Ministerio de Transportes y Movilidad Urbana destinó 22 millones de euros al proyecto de adecuación que, tras un concurso, adjudicó a la empresa Acciona.

Entrada al túnel con las advertencias de las obras HECTOR FUENTES

 Las obras arrancaron en el primer trimestre de 2021 y tienen un plazo de ejecución de tres años, con lo que deberían finalizar para principios de 2024. De momento, los trabajos van según el calendario fijado, pero ante la posibilidad de que surjan «problemas puntuales», el Ministerio ha optado por no dar plazos concretos. 

La obra es de tal envergadura, dada la mejora sustancial de la infraestructura, que se ha modificado el planteamiento inicial. Así, aunque en un primer momento solo se contemplaba el corte de un carril en uno de los dos sentidos de circulación, finalmente «es inevitable» el cierre al tráfico de forma puntual de uno de los dos tubos al completo, según han explicado fuentes ministeriales. 

«Se contempla el corte del tubo en horario y calendario de menor afección al tráfico. Lógicamente, se evitan los períodos de mayor concentración de circulación», añaden las mismas fuentes, para minimizar el impacto sobre los conductores. 

Transportes, eso sí, no ha sido más concreto sobre la fecha exacta ni sobre el tiempo que estará cerrado al tráfico el túnel ni si compartirán un mismo tubo los dos sentidos o se desviará por otras vías. Cuando se produce algún accidente de tráfico en este falso túnel, como ha ocurrido en varias ocasiones, las colas kilométricas son habituales en la A-70.

El paso subterráneo, que atraviesa los municipios de Sant Joan y Mutxamel, cuenta con salidas de emergencia, tres por cada sentido de circulación. En estos momentos una de ellas, la del medio justo del túnel, en dirección desde Valencia a Alicante, está cerrada por los trabajos que se están realizando. 

¿Se están cumpliendo las medidas de seguridad? Desde el Ministerio no hay dudas. «El túnel presenta unas condiciones de explotación favorables y seguras. No obstante, las obras son necesarias para modernizar y mejorar las instalaciones. Para realizar el cierre de la salida de emergencia se ha comprobado mediante un análisis de riesgos que, en caso de incendio, los usuarios retenidos podrían evacuarse en condiciones de seguridad. Dicha actuación se ha ejecutado tras comprobar que el índice de riesgo del túnel no cambiaba», sostienen las mismas fuentes.

El Ministerio lleva invertidos desde junio de 2018 más de 130 millones en la Red de Carreteras del Estado de la provincia.

Más salidas de emergencia y sistemas de extracción de humos y drenaje

Entre las actuaciones que se van a realizar en el túnel de Sant Joan d’Alacant se incluye una séptima salida de emergencia en el lado sur, así como la construcción de galerías para alojar las conducciones y servicios, según explican fuentes del Ministerio de Transportes.

Además, en los pozos de ventilación se sustituye la ventilación longitudinal existente por un sistema de extracción de humos, mientras que en las galerías de servicios se construyen sendas galerías visitables para alojar todas las conducciones y servicios, según explica el Ministerio.

Por otra parte, se proyecta un sistema de drenaje separado para vertidos accidentales, independiente del de la calzada. Otra de las novedades es la construcción de un nuevo edificio técnico junto al existente para alojar los equipos de control y medida eléctricos, los transformadores y los grupos electrógenos. Por lo que respecta a la instalación eléctrica, habrá una nueva línea de alta tensión, así como nuevos transformadores y grupos electrógenos.

Las obras en este conducto de la A-70 contemplan la mejora de la señalización interior, el sistema de circuito cerrado de televisión, la megafonía, la cobertura interior de comunicaciones, la iluminación de emergencia y la plataforma integradora del centro de control. Además, se implantan paneles de mensajería variable en los accesos.