La Conselleria de Sanidad administra ya en la provincia de Alicante la cuarta dosis de la vacuna desde que empezó la inmunización contra el SARS-CoV-2. Las primeras en recibir la nueva dosis de recuerdo de la vacuna contra el covid serán unas 13.600 personas, entre las que viven en residencias de mayores y de diversidad funcional (unas 9.100), y el personal que trabaja en ellas (4.500), según fuentes sanitarias.

La estimación de dosis de recuerdo para la vacunación en residencias de los departamentos de Alicante y Sant Joan (que cubren toda la capital de la provincia) a administrar esta temporada, tanto a residentes como a trabajadores, es de unas 6.000 dosis de vacuna bivalente frente al virus, adaptada a las nuevas variantes. Una parte de esta vacunación va a ser realizada por el personal sanitario de las propias residencias y en otras contarán con un refuerzo por parte del personal de Atención Primaria de los dos departamentos.

En toda la Comunidad Valenciana la cifra asciende a 30.000 personas, de ellas 25.000 usuarios y el resto trabajadores, que han empezado hoy con los pinchazos para intentar frenar el alza de contagios que se espera para otoño. La patronal de las residencias de mayores AERTE aprovecha para solicitar la eliminación definitiva de las restricciones covid en estos centros.

De momento se desconoce cuándo se pondrá esta nueva dosis al resto de edades, aunque desde Sanidad informan que lo decidirá la Comisión de Salud Pública, entidad que también determinará si se hace en los centros de salud o es necesario reabrir algún vacunódromo.

Según fuentes sanitarias, muy pocas residencias de mayores han empezado este lunes a poner la cuarta dosis y esperarán a hacerlo a lo largo de la semana. Entre las que sí lo han hecho está la residencia La Florida de Alicante, donde han recibido la dosis de refuerzo 80 de sus 87 usuarios en una jornada que el director del centro, Javier Sánchez Sierra, ha definido como casi festiva para los mayores al romper las costumbres habituales. En este centro está vacunando su propio personal médico y de enfermería.

"Estaban muy contentos. Se han olvidado del pinchazo y estaban más pendientes de estar guapos que de otra cosa", ha explicado de forma cariñosa sobre unos usuarios que "se portan muy bien, son una maravilla y han sufrido mucho todo este tiempo", ha apuntado en referencia a la pandemia. Los que no se han pinchado se debe a que están recibiendo algún tratamiento médico o bien están pendientes de una PCR.

El director del centro ha abundado en que en todo caso tienen capacidad para decidir. Una vez que se vacunen todos, se hará lo propio con los profesionales, ha dicho el dirigente, quien se ha mostrado a favor de que los usuarios puedan ir abriéndose aún más a la comunidad tras tanto tiempo de restricciones por el covid. Entre las personas vacunadas este lunes en la residencia La Florida hay una centenaria.

"Se han olvidado del pinchazo y estaban más pendientes de estar guapos que de otra cosa"

Javier Sánchez Sierra - Director de la residencia de mayores La Florida de Alicante

Otra de las inmunizadas hoy con la cuarta dosis en la citada residencia es María Blasa Rodríguez Gómez, que cumplirá 78 años en octubre, quien asegura que apenas se ha enterado del pinchazo. Las anteriores veces que se vacunó solo tuvo algunas décimas de fiebre por la noche. Pese a cumplir escrupulosamente con el calendario de vacunación y con las medidas de protección, tanto ella como su marido, que vive en las mismas dependencias, se contagiaron, por lo que pasaron unos días aislados aunque sin apenas síntomas, explica.

Temor a contagiar a otros residentes

Hoy han salido al pasillo a media mañana a ponerse la nueva dosis y "deseando que se acabe todo porque esto nos afecta a todos". María Blasa, vecina de La Florida y que vio cómo se construía la residencia donde ahora vive, se refiere a que antes de la pandemia el matrimonio salía a pasear libremente, y aunque ahora han vuelto a hacerlo al levantarse las restricciones no se sienten tan libres. "Estamos más chafados, sales, andas un poco, gracias al andador, porque nos sirve para sentarnos (ambos tienen problemas de rodilla)y te vuelves. Ya no vas a gusto, piensas si por la calle alguien te lo puede pegar porque el virus no ha desaparecido, luego vienes aquí y lo contagias". Es decir, han perdido la dinámica que tenían.

"Ya no vamos a caminar a gusto, piensas si por la calle alguien te lo puede pegar porque el virus no ha desaparecido, luego vienes aquí y lo contagias"

María Blasa Rodríguez - Usuaria de la residencia de la Florida vacunada este lunes

El pasado sábado fue el primer día que la mujer y su marido, que llevan una década viviendo en la residencia, fueron al mercadillo de Babel, donde los placeros les recibieron con la alegría de verles con buena salud después de no saber nada de ellos desde que empezó la pandemia. "Como dice la canción de Karina volver la vista atrás es bueno a veces pero mirar hacia delante es vivir sin temor", señala María Blasa. En su centro de mayores viven, afirma, contentos, bien atendidos las 24 horas, y con la alegría de no haber tenido fallecidos por covid, señala, "porque lo han llevado de maravilla".

Tipo de vacunas

Las dosis que se ponen desde hoy son nuevas vacunas bivalentes, que generan protección frente a las subvariantes de ómicron (las presentes actualmente), así como frente a otras variantes que circularon con anterioridad.

Además de las personas que viven o trabajan en residencias de mayores y otros centros de atención a la discapacidad, más adelante también recibirán esta nueva dosis de recuerdo otros grupos de población como es el personal sanitario, quienes tienen condiciones de salud de alto riesgo, y la población de 80 y más años, de acuerdo con las recomendaciones de vacunación frente al covid para el otoño en España del Ministerio de Sanidad. Está por fijar la fecha para recibir la protección.

“El objetivo es comenzar la campaña protegiendo a los colectivos más vulnerables de cara al otoño”, explica el conseller de Sanidad, Miguel Mínguez. “Es importante recordar que la inmunización es la mejor protección frente a las formas graves de la enfermedad y que la vacuna sigue salvando vidas”, destaca.

Vacuna antigripal

A la vacunación en residencias seguirá la inmunización del personal de los centros, servicios y establecimientos sanitarios, tanto de Atención Primaria como hospitalaria, pública y privada, y personas que trabajan en los servicios de emergencias sanitarias en contacto con pacientes.

La inmunización seguirá con las personas que se vacunan por edad. En este caso, el objetivo es simultanear la segunda dosis de recuerdo de la vacuna contra el covid con la vacuna de la gripe para optimizar desplazamientos y minimizar molestias. A todos ellos se les inmunizará en los centros de salud en las fechas que se comunicarán por parte de la Conselleria de Sanidad.

Teniendo en cuenta que la edad es el principal factor de riesgo de enfermedad grave y muerte, está previsto comenzar con los mayores de 80 años y completar la campaña con la vacunación de los mayores de 70 y 60 años. En este caso, también se busca hace coincidir la vacuna contra el coronavirus y la vacuna antigripal.

Sumando todos los colectivos, el número de personas susceptibles de recibir la segunda dosis de refuerzo de la vacuna contra el coronavirus, asciende a 1.659.534 en toda la Comunidad.

Dosis de recuerdo

Esta nueva dosis de recuerdo se va a inocular a residentes y trabajadores de centros de mayores o diversidad funcional, personal sanitario, pacientes con condiciones de riesgo y personas de entre 80 y 60 años, independientemente del número de dosis recibidas con anterioridad al tratarse de nuevas vacunas, que protegen contra subvariantes de ómicron y otros linajes.

Además, la infección reciente no es una contraindicación ni una precaución para la vacunación frente al covid. Ahora bien, se ha observado una mejor respuesta a la vacunación cuando se respeta un intervalo de tiempo entre la infección previa y la vacunación.

Por ello, en el caso de una infección reciente en residentes en centros de mayores, personas de 80 y más años de edad y personas con alto grado de inmunosupresión, se recomienda la administración de la dosis de recuerdo respetando un periodo de tres meses tras la infección. En el resto de casos, el intervalo será de al menos cinco meses tras la infección. Esto incluye a las personas con síntomas prolongados posteriores a la infección.

Fin a las restricciones

Por otro lado, la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la Comunidad Valenciana (AERTE) ha pedido a la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas y a la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública que se derogue la normativa covid todavía existente en los centros de atención a personas mayores con ocasión de la campaña de la segunda dosis de refuerzo a las personas residentes y profesionales.

A pesar de la eliminación de las restricciones en el conjunto de la sociedad que se ha producido en los últimos meses, las residencias y centros de día siguen con una norma específica "que impide avanzar hacia la normalidad total" en la vida de las personas que viven en estos centros.

La exigencia de rellenar cuestionarios previos, los requisitos de las visitas, la reserva de habitaciones para aislamientos, que afecta sobre todo a las residencias de menos de 40 plazas, o la necesidad de estructurar la organización del centro por unidades convivenciales sigue condicionando la situación de estos centros sin permitir que los mismos evolucionen en la misma línea, y con la misma velocidad, que el resto de la sociedad, explican desde AERTE.

Sólo el 2.15% de los fallecidos tenían covid

Los datos, añaden, apuntan a una mejoría muy importante de la situación. "Por ejemplo, sólo el 2.15% de los fallecidos en residencias de personas mayores la última semana en España ha sido con diagnóstico positivo de covid. Estamos en el número de casos en residentes más bajo de las ultimas cuarenta semanas y la incidencia en los mismos, cuando hay casos, suele ser leve".

“Creemos que es hora de eliminar las restricciones de manera definitiva, las personas que viven en residencias y el personal que trabaja en ellas deberían volver a la normalidad. Si se ha podido hacer en los centros de discapacidad y salud mental, también debería hacerse en los de personas mayores” indicó el presidente de AERTE.

Para ello, entienden que sería necesario revisar la calificación que hace el Ministerio de Sanidad de los centros residenciales y que pudieran funcionar con planes de contingencia dinámicos que le permitieran adaptarse en cada momento a los distintos niveles de alerta y el mantenimiento de mascarillas en los profesionales de los centros, pero reduciendo las limitaciones actuales que afectan a la vida de las personas atendidas, a sus familiares y a la propia organización del centro.

Asimismo, la patronal de los centros de mayores considera que la aplicación de la tercera dosis a las personas usuarias reforzó aún más la protección de estos centros y sigue demostrando la eficacia de la vacuna como principal herramienta de lucha contra la enfermedad. "Los brotes que se producen en la actualidad se desarrollan de manera leve, casi sin derivaciones hospitalarias, lo que permite seguir avanzado en esta línea".