Del "no nos gusta, nos parece horrible" al "esperábamos algo más, a ver si la vegetación mejora la imagen", pasando también por el "han puesto mucho banco sin respaldo y la gente mayor necesita descansar la espalda" a "el diseño es demasiado pobre". Aunque también hay ciudadanos que aplauden haber cambiado al acuario, tras años arrastrando problemas constantes que llevaron a su cierre: "Bien, nos gusta, mejor que lo que había antes...".

¿Qué opinan los vecinos de Alicante de la remodelación de la Plaza Nueva?

¿Qué opinan los vecinos de Alicante de la remodelación de la Plaza Nueva? Alex Domínguez

Con todo, en general, la obra de reurbanización de la plaza Nueva está generando más rechazo que buena acogida. Todavía, es cierto, la actuación no está terminada, ya que falta acabar las zonas verdes (incluir algún árbol y sobre todo las plantas arbustivas) y también la luminaria. Sin embargo, la imagen actual, que urbanísticamente será la que ya es, no acaba de gustar a los ciudadanos. "Hay mucho hormigón. En cada obra que hacen, se cargan una nueva plaza. Antes el acuario era un atractivo, pero ahora...", señala Juana Aguilar, una vecina de la zona. En la línea se muestra Ana Belén Carrillo, una comerciante de la plaza: "Hay mucho hormigón, y no piensan en los niños, no hay ningún atractivo para ellos".

Y es que el proyecto, que está a punto de terminar de ejecutarse, ha cambiado el histórico acuario, que estuvo más de dos décadas en pie, por una ágora para, según el Ayuntamiento, como lugar de encuentro para dinamizar el barrio. También ha servido para retirar los pocos juegos infantiles que había. Ya no hay ningún aliciente para los más pequeños: ni juegos ni tampoco acuario. Tampoco se van a plantar tantos árboles en el entorno como figuraban en el proyecto aprobado por el Ayuntamiento, ya que los cuatro proyectados en la calle Navas no se plantarán al descubrirse una canalización de gas.

De igual forma, no hay ni rastro de los que se iban a colocar en el tramo de la calle Pirula Arderius más próximo a la plaza (hasta cinco) y hay menos de los previstos (cuatro frente a siete) en el tramo más cercano a la Montañeta. En total, según los alcorques ya colocados en las calles reurbanizadas, doce árboles menos de los previstos.

Se han mantenido, eso sí, los ejemplares más simbólicos de la plaza: el olivo y los ficus, cuya presencia reivindicaron los vecinos y comerciantes de la zona, que también consiguieron conservar la pérgola. Este proyecto, con un presupuesto de 578.800 euros frente a los 718.293 euros de previsión inicial, ha supuesto el punto final al acuario que se inauguró en 1998, durante el mandato de Díaz Alperi y en el que fallecieron decenas de peces en los últimos años.

La plaza, antes de la obra: con el acuario y la pequeña zona de juegos infantiles Alex Dominguez

La plaza, con la obra a punto de finalizar Alex Dominguez

El gobierno local, a mediados de 2018, decidió sacar definitivamente a todos los ejemplares marinos del acuario tras varios episodios de muertes masivas en la instalación. Los peces (más de 177 ejemplares) murieron poco después de la llegada del tripartito de izquierdas en el verano de 2015. Tras un cierre temporal que se prolongó veinte meses, el acuario volvió a reabrir a principios de 2017 tras una actuación sobre el sistema interno que superó los 120.000 euros.

Un año después de esa reinauguración, ya con el gobierno liderado por Luis Barcala, se decidió cerrar definitivamente las "puertas" después de que otra veintena de animales fallecieran al estropearse la maquinaria y de que los técnicos municipales no pudieran "garantizar la supervivencia de los peces". El acuario estuvo desde entonces clausurado tras la extinción de las especies marinas.

En este tramo de la calle, según el proyecto, se iban a plantar cinco árboles, pero finalmente no hay alcorques. Tampoco en la calle Navas Alex Dominguez

En abril de 2019, el bipartito anunció que esta instalación se convertiría en un espacio de educación ambiental y ludoteca pero sin peces, y presupuestó la transformación de la infraestructura en 100.000 euros. Nada de eso se hizo. Finalmente, la instalación fue derribada a mediados de mayo.

Un mes antes, a principios de abril de este año, arrancó una actuación que sobre el papel tiene un plazo de ejecución de seis meses. Sin embargo, con el objetivo de que no afectase al mes grande de las Hogueras, la adjudicataria propuso al Ayuntamiento acelerar los trabajos para darlos por terminados en dos meses. No fue así, por lo que la obra se paralizó durante las fiestas oficiales de la ciudad. Se retomaron en julio y se prevé que finalicen en breve, aunque el gobierno municipal no ha concretado fechas.

La obra, según el Ayuntamiento, ha permitido reurbanizar la emblemática Plaza Nueva, ampliar aceras con la que ganar espacios para los peatones, así como crear nuevas áreas polivalentes que logren modernizar y renovar este importante espacio urbano, creándose un corredor peatonal que conecte un itinerario desde la Rambla de Méndez Núñez hasta la Montañeta.

Así ha quedado, a falta de completar las zonas ajardinadas, la plaza Nueva Alex Dominguez

Según el gobierno municipal, una de las novedades de la actuación radica en la creación de un "gran espacio abierto en la plaza, con un ágora, como lugar de encuentro para dinamizar el barrio, dotándolo de un espacio vivo donde poder a su vez celebrar eventos, actividades y activar el comercio, que va a cambiar todo el entorno del centro de Alicante, ganando nuevos espacios ajardinados para hacerla más habitable".

La actuación, según el bipartito, ha seguido el "ejemplo de la urbanización de otras plazas como la de Séneca, que ha tenido muy buena acogida y aceptación entre sus vecinos, con plataformas compartidas y donde el peatón tiene prioridad, y los vecinos puede pasear y disfrutar de amplias zonas y plazas", según explica el Ayuntamiento.  

Para el concejal de Infraestructuras, José Ramón González, se trata de una "intervención con el fin de mejorar la distribución de los espacios, las condiciones de accesibilidad, creando nuevos itinerarios peatonales y mejorando su pavimentación en equilibrio con la de la zona que se cambió hace unos años, con un diseño homogéneo, calmando el tráfico motorizado y ensanchando las aceras”.