Alicante tramita 26 solicitudes de eutanasia desde que se aprobó la ley hace dos años

La Asociación Derecho a Morir Dignamente critica que sean los médicos de Atención Primaria los encargados de gestionar las eutanasias. La sobrecarga de trabajo en ocasiones les lleva a declararse objetores, lo que provoca un retraso en la solicitud o incluso que esta se pierda

Una mujer coge la mano de una anciana.

Una mujer coge la mano de una anciana. / EUROPA PRESS

Carmen, -nombre ficticio- llevaba 20 años sufriendo esclerosis múltiple, una enfermedad neurodegenerativa para la que no existe cura. No tenía familiares y contaba con el testamento vital hecho desde hace un tiempo, donde reflejaba su consentimiento para que se le aplicara la eutanasia. No hizo falta. Fue ella en plenas facultades quien decidió solicitar a su médico poder acogerse a la ley cuando se aprobó. La de Carmen fue la primera eutanasia practicada en un hospital de la provincia.

La ley entró en vigor en España el 25 de junio de 2021 y, desde ese momento, en Alicante se han tramitado 26 solicitudes de eutanasia, según los últimos datos facilitados por la Conselleria Sanidad facilitados a este diario.

La portavoz de la Asociación Derecho a Morir Dignamente en Alicante, Marisa Velasco, destaca que existen muchas solicitudes que se pierden por el camino y no llegan a ninguna parte. El motivo obedece, según Velasco, a que son los médicos de Atención Primaria los encargados de llevar el proceso de eutanasia.

"Se ha derivado a que las eutanasias las tramiten los médicos de familia que van sobrecargados de trabajo y hacerse cargo de este proceso supone un extra ya que hay que rellenar documentos, hablar con el paciente… no son consultas que se puedan hacer en diez minutos y esto les lleva a desistir a los enfermos en ocasiones", aclara.

Velasco señala que muchos profesionales de Atención Primaria deciden declararse objetores -y no siempre de conciencia- ante la tramitación de eutanasias. "Estamos convencidos de que los que deciden ser objetores, muchas veces no es por conciencia ni porque estén en contra de la ley, sino que lo que necesitan es liberarse de esa carga de trabajo".

En este sentido, la representante de la Asociación Derecho a Morir Dignamente subraya que declararse objetor no quiere decir que no se vaya a practicar la eutanasia. "Tiene el deber legal de recoger la primera solicitud e informar al paciente de todas las alternativas, pero le advierte que es objetor de conciencia y que trasladará el caso a un superior".

Un profesional auxiliar

La Asociación Derecho a Morir Dignamente celebró el pasado mes de abril un congreso en Gandia en el que reunió a los representantes de las 17 comunidades autónomas. En el congreso se pusieron en común diversos temas relacionados con el proceso de eutanasia.

No obstante, hubo uno al que se le prestó especial atención. La asociación ha detectado que aquellas autonomías en las que los médicos de Atención Primaria cuenta con personal de apoyo para tramitar las eutanasias pueden llevar el caso de una forma más liberada.

"Es otro profesional al que le pueden hacer consultar, plantear dudas y también puede liberarle de horas de su trabajo en consulta para que les dediquen más tiempo a las solicitudes de eutanasia. Es una figura que existe es otras autonomías y aquí en la Comunidad no la tenemos y hace una diferencia sustancial".

Un trámite largo

La ley de eutanasia recoge que el proceso comprendido entre el plazo desde la primera solicitud a su aplicación será al menos de 35-45 días. Los primeros 15 son los reservados para que el solicitante haga por dos veces su petición. La resolución por parte de la comisión de Garantías no deberá tardar más de 10.

Su extensión hace que en ocasiones el enfermo fallezca antes de recibir la eutanasia. "Cuando hablamos de enfermedades avanzadas en estado terminal muchos pacientes no llegan al final. Sobre todo, los oncológicos y los de órgano. En estos primeros la enfermedad progresa más rápido que la ley", asegura Velasco.

"En los pacientes oncológicos la enfermedad progresa más rápido que la ley"

Existen dos formas llegar a la eutanasia, explica la representante de Derecho a Morir Dignamente en Alicante. Por un lado, se solicita, lo que refleja que todavía eres capaz mientras que, por otro lado el paciente lo ha reflejado de forma previa en el documento de voluntades anticipadas, lo que indica que ya no eres capaz.

"Si el médico observa que el paciente puede perder la capacidad, puede acortar los plazos. En el congreso algunas autonomías hablaban que en algunos casos el número de días se había reducido en 20-25 días, pero para eso el profesional se tiene que implicar”, sostiene Velasco.

La Comunidad ha tramitado desde que se aprobó la ley de eutanasia un total de 67 solicitudes: 10 desfavorables, 8 fallecimientos en la tramitación, 4 en trámite y 45 favorables. Por provincia, se han cursado 37 Valencia, 26 Alicante y 4 Castellón, según datos de Sanidad.

"Un acto de amor increíble"

Tanto familias como profesionales médicos que han participado en un proceso de eutanasia explican que es "un acto de amor increíble". Así, lo asegura Marisa Velasco que admite que quienes han pasado por ese momento le han asegurado sentirse agradecidos y que ha sido "algo positivo y no negativo".