Sin tiempo para lamerse las heridas: EU y Podemos ponen la mirada en el 23J desde Alicante

La debacle de la coalición en la capital, a 210 votos de desaparecer, no provoca dimisiones en el seno de las formaciones, que se preparan para las generales de julio con la incógnita de Sumar

Lucía Ibáñez, Manolo Copé, Xavi López y Vanessa Romero, durante la noche electoral.

Lucía Ibáñez, Manolo Copé, Xavi López y Vanessa Romero, durante la noche electoral. / Rafa Arjones

Alejandro J. Fuentes

Alejandro J. Fuentes

Sin un momento para lamentarse. Así han amanecido este lunes en Esquerra Unida y Podemos Alicante, tras conocer la convocatoria de elecciones generales para el próximo 23 de julio. Una noticia que han recibido solo unas horas después de perder un concejal en la capital de la provincia, quedándose a solo 210 votos de desaparecer del Pleno.

La coalición que ambas agrupaciones habían formado junto con ERPV y Alianza Verde cosechó el 5,02% de las papeletas en la jornada electoral del domingo, superando por la mínima la barrera que otorga derecho a representación municipal. Además, la heredera de Unides Podem perdió uno de sus dos concejales, obteniendo un único edil. "Un mal resultado, sin paliativos", según aseguró el alcaldable, Manolo Copé, tras conocer el escrutinio.

El malestar durante la noche electoral fue más que evidente. Hasta el último momento, cuando se constató que la formación resistía con un representante, la dimisión de Manolo Copé estuvo en el aire. Fuentes del entorno del líder de Izquierda Unida señalaron que, de haber perdido la representación, lo lógico habría sido dar un paso al lado para abrir un periodo de diálogo que permitiese refundar el espacio.

Sin embargo, ese 0,02% traducido en poco más de 200 votos dio un balón de oxígeno al partido, que tras cuatro años fuera del grupo municipal volverá a contar con un edil en el Ayuntamiento. Copé salvó su primera bola de partido pese a perder más de 20.000 votos con respecto a 2015, la última vez que Izquierda Unida tuvo concejales, gracias a Guanyar Alacant.

Una suerte diferente corrieron los representantes de Podemos dentro de la coalición, Xavi López y Vanessa Romero, ambos ediles de Unides Podem durante el mandato que se inició en 2019. López y Romero pasaron de ser cabeza de lista y número dos en 2019 a ocupar los puestos dos y tres, respectivamente, en los comicios del domingo, por lo que ninguno de ellos repetirá como concejal.

Eso sí, tendrán la difícil papeleta de, en caso de que Barcala conceda una asignación completa de asesor al grupo, designar a la persona que ocupará el 50% que corresponde a Podemos según el acuerdo de coalición. Un puesto para el que fuentes consultadas afirman que todavía no se ha optado por nadie.

Malestar en Podemos

Esta circunstancia generó una molestia que no se trató de esconder entre las filas moradas. En el cierre de la noche electoral, no trataron de disimular su descontento por el orden de los representantes de la candidatura, donde entendían que López debería haber repetido como cabeza de lista en vez de ceder el liderazgo a Copé. Una decisión tomada desde València en la que los concejales de Podemos creen que la formación municipal tendría que haber tenido un mayor peso.

El todavía portavoz, hasta la disolución del Pleno municipal, publicó una reflexión en Twitter en la que agradeció la "responsabilidad" de la militancia después de las "decisiones tomadas sin su aval". Además, en cuanto a la caída del Botànic, López defendió que "sin una base municipalista potente era todavía más difícil sostener autonómico".

En este primer análisis de López no hubo demasiado espacio para la autocrítica, más allá de una llamada a "reflexionar nuestro papel como fuerza transformadora".

Carmen Villaverde y Vanessa Romero, tras conocer el resultado.

Carmen Villaverde y Vanessa Romero, tras conocer el resultado. / RAFA ARJONES

El también secretario general de Podemos Alicante, que ha aglutinado durante los últimos años el poder del espacio político en la capital de la provincia en torno a su persona, liderando el partido y el grupo municipal, descartó que se fueran a producir dimisiones en el seno de su ejecutiva, dado el complejo escenario que se ha abierto con la convocatoria de elecciones generales por parte de Pedro Sánchez para el próximo 23 de junio.

Este acontecimiento abre ahora una nueva incógnita: la configuración de Sumar. Para la que no parece que haya demasiado tiempo que dedicar a la reflexión. Por el momento, ni los morados ni las filas de Esquerra Unida se atreven a poner nombres propios sobre la mesa, aunque han quedado "huérfanos" de cargo auténticos pesos pesados del espectro de Unides Podem.

Es el caso del hasta ahora vicepresidente Héctor Illueca, la consellera de Transparencia, Rosa Pérez Garijo, o la líder autonómica de Podem, Pilar Lima. Todos ellos, se encuentran ahora en búsqueda de un hueco dentro de un espacio cada vez más reducido, que en la Comunidad apenas superó el 3,5% de los votos.