Centros de personas autistas destacan que el fin de la mascarilla ayudará a mejorar sus habilidades sociales

La dirección del Infanta Leonor de Alicante, que atiende a 80 usuarios entre residencia y centro de día, destaca que la medida es un gran paso adelante en el trabajo diario del personal de atención directa

J. Hernández

J. Hernández

Después de más de 1.100 días, el centro Infanta Leonor de Alicante, dedicado a la atención de personas con autismo, retira el uso obligatorio de mascarillas para su personal de atención directa que trata a un total de 80 usuarios entre la residencia y en el centro de día. "Este importante hito marca un momento de esperanza y alivio para toda la comunidad", señala José Ignacio Leyda, director técnico.

Este centro, explica Leyda, ha tomado desde que comenzó la pandemia medidas estrictas para garantizar la seguridad y el bienestar de sus usuarios y personal. "El uso continuado de mascarillas fue una de las medidas fundamentales adoptadas para prevenir la propagación del virus y proteger a aquellos que son más vulnerables. A lo largo de este arduo período, el personal de atención directa ha demostrado una dedicación y un compromiso inquebrantables al enfrentarse a los desafíos y adaptarse a las nuevas circunstancias".

"El levantamiento de la obligación de utilizar mascarillas es el resultado directo de la mejora significativa de la situación epidemiológica y del progreso en la campaña de vacunación. El centro Infanta Leonor ha seguido rigurosamente las pautas y recomendaciones de las autoridades sanitarias", añade su responsable.

"El levantamiento de la obligación de usar mascarillas es el resultado directo de la mejora significativa de la situación epidemiológica y del progreso en la vacunación. El centro ha seguido rigurosamente las pautas de las autoridades sanitarias"

José Ignacio Leyda

— Director técnico del centro Infanta Leonor

Conexión emocional

La eliminación de la mascarilla "supone un gran paso adelante en el trabajo diario del personal de atención directa. Ahora podrán establecer una mayor conexión emocional y comunicativa con los usuarios, lo que facilitará una interacción más cercana y significativa. Además, esta medida permitirá a los usuarios con autismo desarrollar y mejorar sus habilidades sociales al observar y percibir las expresiones faciales y gestos sin restricciones visuales".

En este momento de transición, el centro Infanta Leonor quiere expresar su gratitud y reconocimiento al personal de atención directa por su dedicación incansable y profesionalismo durante estos 1.100 días. "Su compromiso y cuidado han sido fundamentales para garantizar la seguridad y el bienestar de los usuarios con autismo".

El centro Infanta Leonor reafirma su compromiso de continuar implementando las medidas necesarias para mantener un entorno seguro y saludable para todos. "A medida que avanzamos hacia una nueva normalidad, seguiremos adaptándonos y evolucionando para brindar la mejor atención posible a las personas con autismo".