Así "protege" el Ayuntamiento de Alicante los ficus monumentales de Gabriel Miró

Por los suelos, sin función. Así está desde hace semanas parte del vallado instalado por el Ayuntamiento de Alicante a mediados de 2021 para intentar proteger a los ficus monumentales de la plaza de Gabriel Miró.

Vecinos del entorno del Centro Tradicional y habituales de una de las plazas con más encanto de la ciudad lamentan que el gobierno municipal no se preocupe de unos árboles centenarios, patrimonio de la ciudad, que están más expuestos tanto a actos vandálicos como a personas, principalmente turistas, que ahora pueden acceder con más facilidad a la zona de los troncos, pisando las raíces, para hacerse fotografías con unos árboles que son siempre parada fija para los visitantes.

En agosto de 2021, la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Alicante, ya entonces dirigida por Manuel Villar, inició la instalación de un vallado protector de las raíces de los ficus centenarios de la plaza de Gabriel Miró. El edil Villar explicó entonces que el objeto de esta actuación "es proteger las raíces de los centenarios Ficus macrophylla de la Plaza Gabriel Miró de las frecuentes agresiones que sufren provocadas por las personas que suben a las mismas para fotografiarse junto a sus majestuosos troncos". Estas acciones provocan, según el concejal, "daños irreparables en los árboles que necesitan de estas raíces como soporte estructural de sus enormes copas de hasta cuarenta metros de diámetro".

Por esas razones, el Departamento de Zonas Verdes decidió instalar un vallado protector de los ficus "de estética liviana sin demasiada carga visual", ya que la intención -como se subrayó- era "proteger los árboles, pero sin evitar que puedan ser apreciados en su singular belleza tal como contempla la Ley de protección de árboles monumentales de la Comunidad Valenciana".

Sin embargo, parte del vallado que perimetra los dos ficus situados en la zona norte del parque lleva semanas en el suelo en numerosos puntos, tanto porque el cable se ha soltado como porque los postes se han vencido.

Unos tres años antes, en 2018, con el mismo objetivo de protección de los ficus centenarios, el Ayuntamiento colocó una nueva pasarela de madera para preservar las raíces de los árboles.