Punto final a la obra de la avenida de la Constitución de Alicante: el Ayuntamiento recibe la obra entre críticas por el acabado y la falta de sombras

El gobierno municipal acaba de recepcionar un proyecto que empezó en enero de 2022 y que tenía un plazo de ejecución inicial de seis meses

Esto opinan los vecinos de la nueva Avenida de la Constitución

Áxel Álvarez

C. Pascual

C. Pascual

Ahora, sí. Punto final oficial a las obras en el eje Constitución-Bailén. El Ayuntamiento de Alicante acaba de recepcionar, según confirman fuentes del proyecto, la peatonalización del vial que une el Mercado Central con el Portal de Elche, unos trabajos que arrancaron a principios de enero de 2022 y que, sobre el papel, se iban a prolongar apenas seis meses.

Sin embargo, no ha sido hasta ahora, ya en la recta final de este 2023, cuando el gobierno municipal ha dado por terminada oficialmente una actuación marcada por la polémica, al acumular retrasos y acabar con las melias que en los últimos treinta años habían dado sombra a la avenida. Los últimos arreglos se realizaron hace apenas un mes, donde se incluyeron cambios de baldosas, el principal problema de la ejecución. De hecho, en los últimos meses se han cambiado decenas de unidades, que presentaban evidentes roturas desde el primer momento. Es decir, aún se realizaron trabajos casi veinte meses después de su arranque, pese a que las obras iban a durar medio año.

Qué opinan los vecinos de la nueva Avenida de la Constitución

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El bipartito que por entonces gobernaba la ciudad aprobó en julio de 2021 el proyecto de peatonalización del eje Constitución-Bailén, dentro del Centro Tradicional de Alicante. Casi medio año después, en diciembre de 2021, el gobierno de PP y Ciudadanos adjudicó el contrato a Bertolín, por 1,79 millones de euros, con un plazo de seis meses de ejecución. Ni el coste, que también se incrementó en 268.481 euros ni los tiempos se cumplieron.

La fecha del acta de replanteo fue el 27 de diciembre. Es decir, a partir de esa fecha se activó la cuenta atrás para la finalización de los trabajos, que también se vieron afectados por las fiestas de Hogueras. "Una vez iniciada la obra, se comprueba que los trabajos que está realizando Aguas de Alicante, así como los trabajos del Proyecto de renovación del sistema de drenaje pluvial, se localizan en el mismo ámbito de actuación que las obras de peatonalización del eje Constitución-Bailén", explicaba un informe técnico municipal. Así, "ante esta coincidencia espacial", no se podía "acceder a la mayor parte del ámbito de la obra hasta que Aguas no finalice sus trabajos en la zona y libere espacios para actuar". En consecuencia, se suspendió temporalmente la ejecución de las obras de peatonalización, en febrero de 2022.

En mayo de 2022, desde el Servicio de Tráfico, se remitió al área de Contratación, un informe técnico sobre la necesidad de modificar el proyecto inicial de estas obras, con el objetivo de realizar "ajustes temporales en el programa de trabajos de las obras, ajustes especiales en el ámbito inicial de las obras, cambios en las mediciones y en materiales", como las farolas históricas de la solución de la avenida de la Constitución y ajustes en las actuaciones complementarias de las obras, en Rambla y Alfonso El Sabio.

De las melias a los plataneros

Ese modificado del proyecto, que se entregó al Ayuntamiento a finales de octubre, fue el que incluyó la decisión más polémica del proyecto, como fue el traslado -para su muerte- de las melias de la avenida de la Constitución, alegándose que la especie generaba "problemas de suciedad asociados a la floración y a las diferentes plagas asociadas a la especie, que producen caídas por las sustancias que desprenden y se acrecenta con los pavimentos pétreos seleccionados para las zonas peatonales". Finalmente, se colocaron plataneros.

El resultado de los trabajos no acaba de convencer a numerosos alicantinos, más allá de aplaudirse por lo general la retirada del tráfico de un eje por el que además de vehículos privados también transitaban autobuses del servicio de transporte urbano. "Está todo mal, todo el suelo roto. Y sin árboles, que antes teníamos sombras", lamentaba este miércoles una mujer de avanzada edad que recorría Constitución ayudada por su andador.

En la línea se mostraba una mujer de mediana edad: "La idea de hacerla peatonal es buena, pero es cierto que las baldosas están rotas, y eso que las han modificado. La idea era buena, pero el suelo no es el adecuado, además de que ya está sucia. Y cuando hace mucho sol deslumbra".

No muy diferente era la opinión de otra mujer, también de mediana edad, a preguntas de este diario: "Bien que hayan hecho un paseo peatonal, pero el suelo está fatal, parece viejo". Algo más optimistas se vio a una pareja de personas mayores, más conformistas: "Nos gustaban más los árboles, pero como los cortaron... Ahora hay bancos, hay sol, está muy bien, aunque siempre se pueden mejorar las cosas".