Barcala busca un nuevo comisario para la Policía Local de Alicante

Ampliar el escalafón más alto de la Policía Local de Alicante, ahora en precario tras la inminente jubilación de Eduardo Guijarro -que se oficializa en el primer cuatrimestre de 2024- y la reciente marcha de Julio Calero, actual concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Alicante. Con este objetivo, el gobierno local tiene previsto aprobar este martes, en la sesión ordinaria de la Junta de Gobierno, la convocatoria de un proceso selectivo. En un primer lugar será un concurso de méritos para la creación de una bolsa para cubrir un puesto de trabajo de comisario de la Policía Local del Ayuntamiento de Alicante.

Con todo, en entorno municipal se da por hecha la dificultad de que ese concurso tenga éxito, por lo que ya se desliza que el siguiente paso del ejecutivo municipal será convocar un proceso de mejora de empleo a nivel interno, para que sea uno de los actuales intendentes el que pueda dar el salto a comisario. En ese nivel previo hay dos altos mandos, Raúl Romero y Fernando Aldave, ya que el tercero está como interino, lo que técnicamente le imposibilitaría a optar al nuevo puesto. Este máximo rango, el de comisario, es el necesario para ser nombrado jefe de la Policía Local de Alicante.

El máximo cargo lleva en manos de José María Conesa desde mediados 2009, cuando fue nombrado por la entonces alcaldesa, Sonia Castedo, en sustitución de Luis Gómez. Si no hay cambios en el órgano policial, Conesa se jubilará como jefe de la Policía en menos de cuatro años, prácticamente coincidiendo con las próximas elecciones municipales, de mediados de 2027. Sin embargo, nadie da por hecho que el alcalde, Luis Barcala, vaya a mantener a Conesa en el cargo, dadas las desavenencias existentes entre ellos, que se incrementaron con la polémica que envolvió a las últimas oposiciones al cuerpo de seguridad.

De hecho, su participación en la comisión municipal que investigó el presunto amaño dinamitó el transcurrir del órgano al denunciar una trama de "subordinados" que buscaba su relevo por "venganza" y para "aspirar" a su puesto. Conesa, de hecho, trasladó el foco hacia el documento que vinculó a opositores y agentes del Cuerpo, que aseguró que se había elaborado y filtrado por un "grupo de delincuentes", miembros del Cuerpo de seguridad, con datos "falsos, inexactos y tendenciosos".

Actualmente, junto a Conesa, el otro policía con rango de comisario en Alicante es Miguel Box, una persona que no es del círculo más próximo de Conesa y sí cercano al concejal Calero, según confirman fuentes municipales. Guijarro, por su parte está de salida y Calero es miembro del ejecutivo local desde el pasado mes de junio fue como "seis" en la lista municipal del PP de Barcala. Con el nuevo proceso, la Policía Local ampliaría la nómina de comisarios.