El gobierno local de Benidorm, del Partido Popular, ha hecho valer este miércoles su mayoría absoluta para sacar adelante la cuenta general de 2021, un trámite económico de obligado cumplimiento para rendir cuentas al Ministerio de Hacienda sobre la gestión de la Administración local y que ha recibido la abstención del grupo municipal socialista y el voto en contra de Cs.
El Consistorio benidormense ha acogido esta mañana la celebración de un pleno extraordinario y urgente en el que, además de la aprobación de esta cuenta general, también el gobierno local ha sacado adelante una modificación presupuestaria para dotar de más fondos el proyecto de enlaces para el futuro PP 3/1 del polígono industrial y para atender otras gastos, que ha contado también con el voto a favor de los dos ediles de Ciudadanos.
Además, el socialista Miguel Soldevila ha prometido su cargo como concejal de la corporación, en sustitución del exedil Dani Luque, que renunció a su acta la pasada semana. La toma de posesión de Soldevila como edil ha atraído hasta el salón de plenos a numeroso público, entre el que había familiares del nuevo regidor, amigos y militantes del PSPV-PSOE local, que han querido acompañarlo en este día.
Aprobación de la cuenta general
La concejal de Hacienda, Aida García, ha defendido la propuesta para aprobar este documento económico, compuesto por más de 200 páginas, explicando que se trata de un trámite "puramente técnico" que da cuenta de la gestión económica de cara departamento municipal durante el pasado ejercicio y que no había recibido ninguna alegación ni reclamación en contra durante el periodo de exposición pública.
El grupo municipal socialista se ha abstenido en la votación, mientras que Cs ha votado en contra. En ambos casos, sus portavoces, Cristina Escoda y Juan Balastegui, han secundado las palabras de García Mayor reconociendo que se trata de un trámite meramente administrativo con el que había que cumplir, pero han hecho alusión a distintos informes que acompañan este documento en los que, según han afirmado, "queda en entredicho la gestión económica" del Consistorio benidormense durante el ejercicio de 2021.
Tanto Escoda como Balastegui se han referido en concreto a uno de ellos, que firma el funcionario que ejerce ahora como interventor municipal en funciones y en el que, según han asegurado, se alerta de "incumplimientos e irregularidades" que se habrían producido durante el pasado año y que, a su juicio, son "de carácter grave", aunque han eludido dar más detalles sobre los mismos.
"No podemos votar a favor de un punto al que acompaña un informe donde se habla de cosas tan graves que la ciudadanía debería conocer", ha criticado el portavoz de Cs.
La edil de Hacienda ha intentado restar importancia a este asunto y, además, se ha limitado a afirmar que el informe al que la oposición ha hecho referencia es "un informe técnico con discrepancias técnicas sobre el funcionamiento de otros departamentos, cuyos técnicos no han podido contestar".
Modificación presupuestaria
El pleno también ha sacado adelante, con los votos de PP y Cs, una nueva modificación del presupuesto municipal de 2022, la número 16 en lo que llevamos de año, para ampliar el crédito de algunas partidas y poder hacer frente a distintos gastos.
El principal, una partida de 13,6 millones de euros que servirá para financiar los nuevos accesos al futuro centro comercial de la ciudad. Esta cuantía se sumará a los 2,3 millones que ya contemplaban las cuentas de 2022 y a los 3 que se comprometió en su día a aportar la empresa que construirá la nueva superficie comercial, la multinacional francesa Unibail Rodamco, hasta alcanzar los casi 18,9 millones en los que está presupuestada la obra.
Este importe se costeará mediante un préstamo bancario que ahora tendrá que solicitar el Ayuntamiento de Benidorm, según ha criticado el PP, "porque el Estado no ha querido asumir un gasto que le correspondía, porque se trata de garantizar la seguridad en un enlace de una carretera nacional como es la N-332".
Además, también se incluirán en los fondos de Educación algo más de 320.000 euros para asumir un modificado de las obras del pabellón de usos múltiples del colegio público Leonor Canalejas, motivados por el encarecimiento del coste de los materiales y que, según la edil García Mayor, no ha querido asumir la Generalitat; y otros 50.000 euros para el departamento de Hacienda, con los que poder hacer frente al pago de nuevos intereses por el encarecimiento de los tipos.
En este asunto, los dos grupos de la oposición han criticado que el gobierno local esté disparando la deuda del Ayuntamiento durante la actual legislatura, hasta situarla en un 57% de su capacidad de endeudamiento, según los datos a los que se ha referido Cristina Escoda. La socialista ha criticado los gastos previstos en esta nueva modificación presupuestaria y que el Ayuntamiento vaya a tener que recurrir a un préstamo para pagar los nuevos accesos al polígono: "Si ese dinero fuera para ayudar a familias, nos parecería bien", ha agregado.
Por su parte, Balastegui ha considerado que el desbloqueo del polígono industrial y del centro comercial permitirán "generar riqueza y empleo en nuestro municipio", motivo por el que han apoyado la modificación, aunque también ha criticado que se vaya a financiar contrayendo deuda y ha augurado: "Cuando acabe la legislatura, la deuda municipal alcanzará los 80 millones.
Nuevo concejal
Antes de ambos asuntos, como primer punto del orden del día, el pleno ha acogido la toma de posesión de un nuevo concejal en el Ayuntamiento de Benidorm.
Se trata del socialista Miguel Soldevila, que ha prometido su cargo como edil de la corporación haciendo valer su lengua materna, el valenciano, en sustitución del exconcejal Dani Luque, que renunció al acta hace escasos días, tras la celebración de las primarias del PSPV-PSOE en las que Cristina Escoda resultó elegida candidata a la Alcaldía.
La dimisión de Luque "por motivos personales", según alegó el edil, comporta movimientos en la bancada socialista a escasos seis meses de las elecciones municipales de 2023. Y, además, coloca dentro de la corporación al que será, sin duda, uno de los hombres fuertes de Escoda de cara a los comicios para intentar arrebatar al PP el gobierno local.
Miguel Soldevila, que compaginará el cargo de concejal con el puesto de asesor de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), fue jefe de gabinete del exalcalde Agustín Navarro. Además, es secretario de organización de la ejecutiva del PSOE en Benidorm y una de las personas de confianza de la alcaldable.
Ahora, con su toma de posesión como concejal, que le permitirá "estrenarse" en la fila de autoridades durante las Fiestas, Cristina Escoda refuerza su hegemonía dentro del grupo municipal.
