Entrevista | Jaime Berenguer Ingeniero técnico del Consorcio de Aguas de la Marina Baixa

"Si no llueve, la Marina Baixa podría entrar en emergencia por sequía a principios de julio"

La comarca se encuentra en situación de alerta por la sequía aunque el abastecimiento de agua para este verano está completamente garantizado con los recursos propios y, sobre todo, con los externos como el agua desalada | El organismo prepara ya la petición de 5 hm³ más para afrontar la demanda

Jaime Berenguer, ingeniero del Consorcio de Aguas de la Marina Baixa.

Jaime Berenguer, ingeniero del Consorcio de Aguas de la Marina Baixa. / A. Vicente

-¿Cuál es la situación hídrica actual de la Marina Baixa?

-Estamos en periodo de sequía. La sequía se define cuando hay un periodo en el que las precipitaciones han sido muy inferiores a la media. Los últimos 12 meses ha llovido en torno a 120 litros cuando la lluvia en un año normal son 550 litros. Si sumamos que el invierno y primavera están siendo secos a un otoño del año pasado enormemente seco, se traduce en que el déficit entre 2023 y 2024 es de 388 litros, casi 400 litros.

-¿Tuvieron algún efecto las lluvias de la última semana?

-Las últimas lluvias de final de abril, han sido lluvias muy escasas aunque son bienvenidas para el mes de mayo donde cada litro vale por dos. En el sentido de que supone una parada de los regadíos, por ejemplo. En la instalación de referencia apenas se han recogido 20 litros. A día de hoy, la lluvia de 2024 está en 49,8 litros que es muy poco en comparación con la que debería haber, que sería en torno a 200 o 275 litros.

-¿Cuál es la consecuencia de la falta de lluvia?

-La consecuencia es que las reservas superficiales han comenzado a disminuir preocupantemente. En el embalse de Guadalest hay 4,22 hm³ y está al 36,15 % de capacidad; y el Amadorio, que es el más preocupante, tenemos 2,45 hm³ y está al 17,22 %.

-¿Se espera que llueva antes del verano? ¿Será suficiente?

-Hablar de lluvias más allá de un periodo de quince días, la probabilidad es al 50-50. Ahora han caído 20 litros y puede ser que en mayo caiga algo más de agua pero, evidentemente, cada vez que nos acerquemos al verano, la probabilidad va a ser mucho menor.

-No es la primera sequía, ¿ni será la última?

-La sequía es algo ineludible, propio del clima de la Marina Baixa y de la provincia de Alicante. La pluviometría es algo cíclico, cada cierto tiempo se produce un periodo seco. Da igual que nos haya tocado en 2024 porque nos tocará otra a lo mejor en 2030 y pico. Es algo que ha sucedido siempre y la única manera de paliarlo es mediante infraestructuras. La otra gran sequía muy importante que tuvimos fue en 1999-2001 el agua vino del sistema Júcar porque no había desaladora todavía en Mutxamel.

"La sequía es algo ineludible. Da igual que nos haya tocado en 2024 porque nos tocará otra a lo mejor en 2030 y pico. Es algo que ha sucedido siempre y la única manera de paliarlo es mediante infraestructuras"

-¿De dónde bebe y se abastece Benidorm y la Marina Baixa?

-La Marina Baixa tiene tres tipos de recurso, dos de ellos principalmente para abastecimiento, que son los recursos superficiales y los subterráneos. En periodos secos los que fallan son los superficiales que se nutren de las lluvias, como son los embalses, entre otros. Estos son los que se prevé suplir con recursos de agua de desaladora. El Consorcio de Aguas de la Marina Baixa desde los años 70 hemos ido incorporando recursos, primero superficiales, luego subterráneos, y por último, reutilizados, que son fundamentales. Se han intercambiado infraestructuras y recursos con los regantes, se han optimizado sus instalaciones… Es una de las grandes bondades del sistema de gestión de esta comarca. En torno al 20 % del presupuesto se repercute a comunidades de riego para mejoras o mantenimiento de instalaciones, entre otras.

-Estamos a las puertas de una nueva temporada turística. ¿Está garantizado el abastecimiento de agua para este verano?

-Sí, está garantizado mediante esa agua desalada, es decir, con recursos externos al sistema de la Marina Baixa. En un periodo de sequía, todas las noticias son alarmantes, pero es indiscutible que si se agotan los recursos en la comarca, llegarán los que sean necesarios para garantizar el abastecimiento para este verano. Si no llueve, la situación será complicada.

-¿Se va a incrementar la petición de agua desalada para atender a la demanda?

-El otoño e invierno pasado se asimilan a un periodo veraniego, en el sentido que el consumo se ha disparado enormemente, tanto el de abastecimiento como el de riego. Porque hemos tenido temperaturas casi veraniegas La sequía junto a la alta demanda ha provocado que haya que recurrir a más recursos. Teníamos previsto 1 hm³ en condiciones normales de la desaladora de Mutxamel que se va a adelantar y empezará a llegar en estos días. Además, el Consorcio ha empezado a tramitar, de acuerdo con el Plan de la Sequía, como medida sobre la oferta, una aportación inicial de 5 hm³ adicionales para garantizar el agua en verano.

"En un periodo de sequía, todas las noticias son alarmantes, pero es indiscutible que si se agotan los recursos en la comarca, llegarán los que sean necesarios para garantizar el abastecimiento para este verano"

-¿La situación puede ir a peor?

-Se prevé que durante la primera quincena de julio, si no llueve, se podría entrar en emergencia. Si se entrara en emergencia sí se podrían plantear alguna medida como alguna renovación en pozos para mejorar el rendimiento e incorporar mayores recursos al sistema, por ejemplo.

-¿La Marina Baixa ha apostado por contar con su propia desaladora en Benidorm?

-Una vez agotados los recursos que tenemos, la gran apuesta de la Marina Baixa y el Consorcio de Aguas es por las desaladoras, en este caso la de Benidorm, que tendría que estar hecha desde el año 2000. La complementaria a esa, es la de Mutxamel.

-¿El agua desalada va a ser clave en el desarrollo futuro de la comarca?

-Ahora mismo tenemos del orden de 7 hm³ en nuevos desarrollos, unos que se han producido o se producirán, en la Marina Baixa y se tienen que garantizar indudablemente de aportaciones de agua desalada. El futuro está ligado a ella con esas dos instalaciones, la que tendrá Benidorm y la de Mutxamel. Eso sí, se garantiza el agua a mayor coste, solo que el “mix”de agua subterránea y desalada es mucho más rentable que no al 100 % de la primera. Además, reclamamos a las administraciones que, igual que Cataluña tuvo fondos europeos para las desaladoras, que si hacemos la de Benidorm, cuente también con ellos. Con independencia de otras subvenciones de administraciones superiores.

-¿Hace falta más infraestructuras?

-Hay que distinguir entre sequía, que las hay periódicas y escasez. En la comarca, tenemos una escasez de infraestructuras de almacenamiento que nos permiten garantizar el agua en periodos secos. Los embalses de Guadalest y Amadorio, que son la mejor balsa que tenemos, se hicieron en el año 60 y ahora prácticamente el 25 % de su capacidad está aminorada por culpa de los resguardos que hay en función de la probabilidad de lluvia que tengamos cada mes.

-¿Qué son los resguardos de los embalses?

-Hasta el año 2000, cuando pasó lo de la presa de Tous, los embalses almacenaban el 100 % del agua. Si en Guadalest caben 12,5 hm³, cuando había lluvia, no se empezaba a verter hasta esa capacidad. Cuando pasa lo de la presa de Tous, se implementa en cada territorio, dependiendo de la probabilidad de la lluvia, esos resguardos. Una probabilidad que se calcula recogiendo datos de pluviómetros de toda Valencia. Qué sentido tiene que, por ejemplo, en el Amadorio, donde la lluvia media se sitúa en torno a 250 litros anuales, se vacíe a la mitad en octubre cuando es el mes de mayor probabilidad de lluvia.

-Los municipios y el Consorcio llevan tiempo reclamando que se cambien esos resguardos.

-Hemos hecho ahora una alegación al Departamento de Seguridad de Presas, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica (MITECO), porque creemos que existen otras metodologías y aspectos que no se han tenido en cuenta en este sentido. Cada cuatro años se producen desembalses como consecuencia de episodios de lluvia intensos y la implantación de los resguardos.

-¿Qué coste tiene eso?

-La pregunta que se debe hacer es qué sociedad puede permitirse tirar cada tres o cuatro años 5 millones de euros (1 millón =1 hm³) por la implantación de esos resguardos. Si podemos permitírnoslo o buscar soluciones. Lo que es llamativo que en 2022, entre mayo y septiembre, se vertió al mar casi 20 hm³. Si se pudiera haber almacenado 5 o 6 hm³ más, la Marina Baixa estaría en un régimen de normalidad. Racionalmente se debe buscar una solución alternativa a esos resguardos, de manera que se sigan manteniendo pero sin afectarnos. El valor del agua en una zona como esta es un factor que hay que tener en cuenta cumpliendo todas las medidas de seguridad.

"La pregunta que se debe hacer es qué sociedad puede permitirse tirar cada tres o cuatro años 5 millones de euros ( 1 milllón =1 hm³) por la implantación de esos resguardos de los embalses. Si podemos permitírnoslo o buscar soluciones"

-¿Qué más es necesario hacer en los embalses?

-En momentos de sequía hay que ceñirse a la parte significativa. El dragado de embalses son situaciones que hay en todos a nivel nacional. Pero hay una falta de mantenimiento, y antes de los dragados habría que renovar los órganos de desagüe en los propios embalses. Llevamos 25 años con los desagües de fondo de Guadalest y Amadorio dañados y no se han cambiado por parte del ministerio, están sin uso. Si se abre ese desagüe se vaciaría algo de fango también.

-¿Tendrán que tomar medidas los regantes de la comarca ante la sequía?

-Ya se acordó en la junta de desembalse de los regantes de la comarca que, si se entraba en alerta, se reduciría el uso del 50 % de “aguas blancas” y se incrementaría el uso de agua reutilizada. Otro futurible como las desaladoras y mayor almacenamiento, deben ser la apuesta por los terciarios, que es una apuesta de la Generalitat. Evitar que se vierta el 50 % en la EDAR de Benidorm y regenerar el 100 %, estos recursos son y serían fundamentales.

-¿Qué otros proyectos hay sobre la mesa?

-Por orden de prioridad estarían las desaladoras, la mejora del almacenamiento con ese cambio para no tirar el agua al mar, los sistemas terciarios y lo que le queda al Consorcio de Aguas es seguir renovando infraestructuras propias y de regantes para aumentar el rendimiento. Y luego las infraestructuras verdes. Hemos puesto hace poco en marcha una planta fotovoltaica y una microcentral hidráulica. En cinco o seis años se recupera lo invertido pero hay que invertir el dinero.

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