Mazón y Bernabé tienden puentes entre Consell y Gobierno "en búsqueda del beneficio común"

El president de la Generalitat, Carlos Mazón, y la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, celebraron este miércoles su primera reunión de la legislatura. Una cita en la que popular y socialista trataron de tender puentes entre ambas administraciones para favorecer el interés general de la autonomía y repasaron los deberes que se ponen el uno al otro.

Así, Mazón insistió en la urgencia de que Pedro Sánchez convoque una Conferencia de Presidentes y puso encima de la mesa reivindicaciones en múltiples áreas como Sanidad, agua, Educación o infraestructuras, mientras Bernabé reclamó a la Generalitat que "no retroceda" en derechos sociales, con especial foco en la violencia de género, ni en políticas verdes.

Ambos dirigentes exhibieron sintonía tras el encuentro, que se prolongó durante más de una hora y cuarto en las dependencias del Palau de la Generalitat. De hecho, Mazón aseguró que la relación con la delegada del Gobierno es "muy fluida" y pidió a los miembros del PSPV en las Corts que sigan su ejemplo. "Estaría encantado de que esta actitud fuera la tónica general en las Corts. Les solicito que miren con atención el ejemplo institucional y personal de Bernabé", agregó. Bernabé también explicitó la buena relación que guarda con Susana Camarero, vicepresidenta segunda y responsable de las políticas de Igualdad, si bien deslizó su desconfianza por la influencia de Vox.

La socialista tendió su mano al jefe del Consell para trabajar en acuerdos "que beneficien a todos" y destacó las políticas desplegadas por el Ejecutivo de Sánchez en la Comunitat Valenciana, tratando de desactivar la diana que tiene fijada Mazón en la Moncloa. También se esforzó por rebatir la imagen que traslada el Consell sobre el Gobierno, a quien acusa de falta de voluntad de diálogo. Bernabé remarcó ese "compromiso" del Gobierno "más valenciano de la historia" a través de ejemplos como los 5.000 millones en inversiones que dijo tiene en marcha el Gobierno en la autonomía, con especial énfasis en infraestructuras. El propio Mazón admitió los avances en esta materia llegados con Bernabé, si bien avanzó que seguirán siendo "reivindicativos" en temas como el soterramiento de las vías de Alfafar.

Demandas cruzadas

El buen tono del encuentro no evitó que se cruzaran demandas. El president pidió de nuevo la Conferencia de Presidentes para poder trasladárselas de primera mano a Sánchez. Mientras tanto, a Bernabé le trasladó peticiones como el pago del 50 % de la dependencia, cambios en la ley de costas, la ampliación de plazas MIR en Sanidad, la relajación de requisitos para incorporar profesores de informática o el refuerzo de la plantilla de Policía Nacional.

También invitó al Gobierno a sumarse a la mesa del agua autonómica, posibilidad que la delegada enfrió, y adelantó que próximamente pedirá la ampliación del aeropuerto de Manises y una segunda pista en el de Alicante para potenciar las posibilidades turísticas.

En sentido contrario, Bernabé exigió al Consell proteger los avances impulsados por el Gobierno en materia de derechos sociales y de desarrollo económico. También pidió coordinar esfuerzos para maximizar la captación de fondos europeos, que cifró en 4.800 millones los proyectos que ahora mismo se desarrollan en la C. Valenciana.

Asimismo, advirtió del "compromiso absoluto" del Ejecutivo en la lucha contra la violencia de género. Pese a su buena relación con Camarero, expresó su "preocupación" por la "invisibilización" del Consell al término "violencia de género" o la reducción presupuestaria en los juzgados especializados de atención a víctimas. "No se pueden borrar términos a nivel institucional, porque negar la violencia de género es echar gasolina a un fuego que queremos apagar. Pido compromiso, porque borrar de un papel la violencia de género genera negacionismo".

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