La cifra de mujeres ejecutivas en la Comunidad vuelve a disminuir por tercer año

Reducir la brecha de género en todos los ámbitos se ha convertido en una de las principales obsesiones de los gobiernos que aspiran a llegar a 2030 con los deberes hechos dentro de la agenda de objetivos de desarrollo sostenible (ODS). En la Comunidad Valenciana, y España en general, las políticas puestas en marcha todavía no han dado sus frutos o no están funcionado. El ODS número 5, que aspira a «conseguir la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y las niñas», de momento no progresa adecuadamente.

Según la última actualización de los datos en el Portal Estadístic de la Generalitat, la proporción de mujeres en cargos directivos y también en alta dirección ha disminuido en la Comunidad Valenciana por tercer año consecutivo, situándose en 2020 en un 28,5% y un 29,3 por ciento, respectivamente.

Así, la brecha de género es especialmente importante en los puestos de mando de las empresas. Solo 3 de cada 10 mujeres de la Comunidad Valenciana tienen la oportunidad de liderazgo. En el conjunto de España la situación es levemente mejor, ya que la proporción de mujeres en cargos directivos en el 32,2 % (dato de 2019) y la de porcentaje de féminas en puestos de alta dirección está en 33,7 por ciento. En ambos casos tres puntos por encima de diferencia respecto a la situación de la Comunidad.

Altibajos acusados

Como explica la propia Generalitat, la estadística de Indicadores de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible proporciona un marco que permite el seguimiento de las metas. Atendiendo a la estadística, la progresión no es buena. El mayor porcentaje de mujeres valencianas en cargos directivos se constató en 2013, con 33,3 por ciento, con viento a favor tras la burbuja inmobiliaria y la crisis de 2008. Cuando los efectos de este importante crash económico se hicieron notar de verdad, a partir de 2014, la cifra cayó seis puntos en un año. En 2018 hubo otro fenómeno inverso, con una subida de otros seis puntos. Desde ese año la cifra ha ido bajando progresivamente.

La curva de evolución de la proporción de mujeres en puestos alta dirección es similar. El tope, sin embargo, se alcanzó en 2018 con el 34 % de presencia de mujeres. Un año más tarde se hundió al 29,5 %.

Al margen de estos datos, el Consell del Botànic sí ha dado pasos al frente para atajar la brecha de género en la toma de decisiones. Con su desembargo en la Generalitat en 2015, se produjo un salto cualitativo y cuantitativo, al pasar del 37 % del último gobierno del PP al 55,6% del primer Botànic. En la reedición del pacto y con la entrada de Unides Podem al ejecutivo, la cifra bajó levemente hasta el 54,5%.

En cuanto al número de diputadas en las Cortes, ha crecido de manera progresiva. En 2007 alcanzó con el PP como partido hegemónico la cifra del 45,5%, para caer al 40% en 2011. Con el primer gobierno PSPV-Compromís se pasó al 44,4% de diputadas en la cámara valenciana, y con el tripartito se alcanzó en 2019 el tope histórico de 47,5%.

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