El calzado reclama actuaciones para ayudar al sector tras el desplome de las exportaciones

Las empresas piden estabilidad en los reglamentos y en las nuevas legislaciones, respetar los acuerdos alcanzados en el convenio colectivo pactado entre patronal y sindicatos y exigen a Trabajo más flexibilidad con los fijos discontinuos para frenar los despidos

La Comunidad lidera la caída de ventas al exterior

"Estamos en una situación límite", asegura la secretaria general de Fice, Marián Cano

Planta de produción de una empresa de calzado de Elche.

Planta de produción de una empresa de calzado de Elche. / Áxel Álvarez

Rubén Míguez

Rubén Míguez

El sector del calzado ha iniciado el año 2024 con una nueva caída en las exportaciones, algo que, aunque esperado, preocupa seriamente a los empresarios del sector que reclaman actuaciones para ayudar a una industria que se ha visto seriamente afectada por la caída del consumo como consecuencia de la inflación y la renta disponible. Además, las empresas del sector afirman que algunas medidas en materia laboral les están haciendo perder competitividad.

Las empresas piden estabilidad en los reglamentos y en las nuevas legislaciones, respetar los acuerdos alcanzados en el convenio colectivo pactado entre patronal y sindicatos y exigen a Trabajo más flexibilidad con los fijos discontinuos para frenar los despidos. Todo, tras caer un 7,5 % las ventas al exterior a nivel nacional en el inicio del año con respecto al mes de enero de 2023, situándose en torno a 251,4 millones de euros. "Han iniciado el año con una importante caída en términos de valor", ha lamentado el responsable de Internacionalización de Fice, Federación de Industrias del Calzado de España, Imanol Martínez.

Estos datos confirman la tendencia a la caída de las exportaciones que se está dando desde el pasado mes de agosto y las previsiones es que esta dinámica se mantenga, al menos, durante el primer semestre del año.

La mayor caída de las exportaciones se ha producido en la Comunidad Valenciana, con una caída del 24,9 % respecto a enero de 2023. De esta forma, si el año pasado se saldó con un descenso del 8,9 % en los envíos de zapatos desde las zonas productoras del Vinalopó, en enero se desplomaron casi un 25 %, al pasar de 126 a 95,1 millones de euros.

Informe

Según el último informe del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, que incluye además de calzado otras partidas de su industria auxiliar, en enero del presente año las firmas españolas exportaron zapatos por un valor de 267,6 millones de euros. En comparación con enero de 2023, las exportaciones fueron un 7,8 % inferior. Si comparamos estos resultados con los de hace cuatro años, previos a la pandemia, las ventas al extranjero fueron un 3,7 % más alto que en el mismo mes de 2020.

También han experimentado serias caídas otras comunidades, con menor peso del sector calzado, como Aragón, donde la caída ha sido del 34,2 %, Andalucía del 27,3 %, Baleares del 15,4 % y Murcia un 11,4 %. Sin embargo, Las exportaciones de zapatos subieron en Cataluña (29%), Galicia (12,6%), Castilla-La Mancha (0,2%), Madrid (45,6%), La Rioja (11%) y País vasco (35,8%).

Muestras de calzado en la pasada edición de Futurmoda.

Muestras de calzado en la pasada edición de Futurmoda. / Áxel Álvarez

En cuanto a las importaciones, en el primer mes del presente año, España adquirió en el exterior calzado por un valor acumulado de 405 millones de euros. Las compras en el exterior disminuyeron con respecto a enero de 2023 un 8,1 %.

En consecuencia, la balanza comercial del calzado durante el primer mes de 2024 arrojó un desequilibrio en términos generales a favor de las importaciones de 148,3 millones de euros, un 162,2 % más.

¿Y por qué esa caída tan acusada del valor de las exportaciones en la mayor zona productora como es la Comunidad Valenciana?

La Comunidad es fabricante de calzado, mientras que otras regiones solo funcionan de 'traders', importan y lo exportan. Esto explicaría el alto porcentaje de subida del valor de las exportaciones en Galicia, Madrid y Cataluña, donde la industria del calzado es residual, pero sí que importan de los países asiáticos los pares, principalmente de China, país donde, por cierto, se han incrementado los precios de venta al exterior, lo que, a su vez, ha obligado a las empresas españolas que les compran calzado, y que se sitúan en esas comunidades, principalmente, a venderlo al exterior más caro.

De ahí que haya subido el valor de las exportaciones en esas zonas. Un ejemplo, la importación media del calzado de piel chino es ya de 31 euros. 

Una compleja situación

La secretaria general de Fice, Marián Cano, explica que el sector del calzado en España enfrenta una serie de desafíos significativos. La compleja coyuntura económica, influenciada por la creciente inflación, conflictos geopolíticos internacionales y aumentos en los costes, ha colocado a las empresas "en una situación límite", denuncia. "Las empresas reclaman estabilidad en los reglamentos y en las nuevas legislaciones. Insistimos en que es necesario respetar los acuerdos alcanzados en convenio colectivo pactado entre patronal y sindicatos con consenso en asuntos como la jornada laboral", señala Cano.

Además, los empresarios expresan su "malestar" por la falta de flexibilidad en la aplicación de los criterios por parte de la Inspección en torno a la figura de los fijos discontinuos que, aseguran, está generando rigideces que podrían obligar a las empresas a reajustar plantillas ante la caída de la producción.

Por otra parte, desde FICE insisten en la enorme preocupación en torno a la ley Crea y Crece que afecta directamente a la competitividad de las compañías en mercados globales. "Esta ley interviene en las relaciones entre las empresas condicionando la libertad negociadora de las firmas zapateras en un mercado global en el que no se dan estas limitaciones", denuncia el sector.

Y junto a este intervencionismo, pone el foco en que hay que tener en cuenta que el calzado es un producto de baja rotación, desde que el producto llega al punto de venta hasta que se vende, el plazo es mucho mayor que el de otros bienes como pueden ser productos frescos.