EL AMIENTE DEL DERBI

Sonrisas y lágrimas en las gradas

La afición azulgrana celebra a lo grande la permanencia y los seguidores franjiverde acaban decepcionados y abatidos tras ver roto el sueño del ascenso

El Martínez Valero vive un ambiente de Primera, con más de 20.000 espectadores

El Martínez Valero vivió un gran ambiente, con más de 20.000 espectadores en las gradas

El Martínez Valero vivió un gran ambiente, con más de 20.000 espectadores en las gradas / MATÍAS SEGARRA

J. A. Galvañ

J. A. Galvañ

 Era difícil que todos quedaran contentos. Al final, la alegría y las sonrisas se vistieron de color azulgrana y la decepción y las lágrimas de franjiverde. 

El derbi provincial no defraudó. Las gradas del estadio Martínez Valero estuvieron repletas, con 21.186 espectadores. Cerca de 3.000 seguidores del Eldense, que disfrutaron de una tarde mágica y celebraron por todo lo alto la permanencia de su equipo en Segunda División. 

La otra cara de la moneda fue la afición del Elche, que terminó desesperada y abatida viendo como se esfumaba el sueño de poder regresar a Primera División

Desde dos horas antes del partido se notaba que era un día grande. Las dos aficiones recibieron a los respectivos autocares de sus jugadores con una ilusión tremenda, con vítores, cánticos y bengalas. 

La Federación de Peñas y la Grada de Animación Fondo Sur 1923 realizaron un último esfuerzo con la esperanza de que el conjunto ilicitano intentara apurar sus opciones de clasificarse para el «play-off».

En las gradas de Preferencia se desplegó un gran tifo: «Juntos por tu escudo, un sentimiento eterno». 

También se recuperaron las banderolas para recibir a los futbolistas a su salida al terreno de juego. 

En el anillo de Fondo Norte, donde estaban ubicados la mayoría de los seguidores azulgranas, también se vio un gran colorido y entrega para con su equipo. 

Conforme se iba desarrollando el partido, se veía que el Eldense estaba llevando mejor su guión de juego. En el descanso, con empate a cero en el marcador, ya se notaba un run run entre los aficionados franjiverde. Incluso, se oyeron algunos pitos de reprimenda. 

Tras los goles del Eldense, el júbilo se apoderó de la parte del estadio donde estaban los seguidores de Elda

Aficionados del Eldense disfrutando con su equipo

Aficionados del Eldense disfrutando con su equipo / MATÍAS SEGARRA

En el lado de los del Elche, la desesperación era la nota dominante. Las disconformidad con su equipo y con Beccacece fue creciendo y el sonido del viento fue creciendo. 

La grada franjiverde reclamaba a su técnico la presencia en el campo de Áleix Febas, que salió en el 66, ya con el marcador en contra. 

Con el golazo de Timor, que ponía el 0-2 en el marcador, la euforia se desató entre la parroquia eldense y la decepción aumentó entre la ilicitana. 

El 1-2, en los últimos minutos, solo sirvió para alargar la agonía del Elche. El empate tampoco servía. 

Muchos aficionados optaron por abandonar el Martínez Valero viendo que era imposible que su equipo pudiera alcanzar el sueño de poder disputar el «play-off» de ascenso. 

Seguidores del Elche abandonando las gradas tras el 0-2

Seguidores del Elche abandonando las gradas tras el 0-2 / MATÍAS SEGARRA

Con el pitido final, la afición del Eldense celebró por todo lo alto la permanencia de su equipo. Y la del Elche pitó y criticó duramente a sus jugadores, que tuvieron que aguantar estoicamente a sus seguidores durante la despedida del terreno de juego. 

Así es el fútbol. La alegría va por barrios y, en esta ocasión, cayó del lado azulgrana. 

A pesar de la desilusión en el Elche, por lo menos, la próxima temporada se volverá a vivir, de nuevo el derbi provincial y las aficiones, seguro, que se vuelven a volcar con sus equipos.