Elche empieza a pavimentar siete calles para dar prioridad al peatón tras diez meses en obras

El bipartito ha anunciado que la reforma para dar prioridad peatonal a siete calles del centro de Elche y de El Raval, o lo que es lo mismo, crear plataformas únicas, estará completada en junio tras diez largos meses de obras.

La primera en abrir al tráfico será «Fatxo», vial clave para acceder al casco histórico desde el Paseo de la Estación o Puente Ortices, que desde este miércoles permitirá la circulación de vehículos. En esta arteria el peatón pasará a tener prioridad peatonal, con lo que los vehículos tendrán que circular a 20 kilómetros por hora como máximo y deberán respetar a los viandantes. Habrá señales para indicarlo. El Ayuntamiento ha apostado por a alinear las aceras con la calzada para darle una mayor accesibilidad a los transeúntes en unas arterias donde las baldosas eran prácticamente intransitables, principalmente con carritos de bebé o sillas de ruedas.

Los concejales de Movilidad, Esther Díez, y de Modernización del Espacio Público, Héctor Díez, visitaron este lunes las obras de la calle donde se está aplicando la segunda capa de resina al pavimento. Indicaron que misma semana está previsto que se inicie el asfalto en otras calles donde se van a crear este tipo de plataformas únicas, como son el eje de Sant Miquel, Porta Oriola y Barques, una actuación que durará toda la semana. Para la próxima, arrancarán estos trabajos en Abadía, Fossar y Mare de Déu de la LLet. En la última semana del mes comenzarán en San Vicent (aquí se han ampliado aceras sin alinearlas con la calzada y se han eliminado aparcamientos), por lo que el equipo de gobierno espera que cuando acabe junio estén culminadas estas intervenciones que dieron comienzo en septiembre y que se han visto retrasadas.

La demora en abrir al tráfico estas céntricas calles, lo que ha ocasionado quejas vecinales, se debió a la aparición de restos arqueológicos, sobre todo en Fatxo, Abadía y Fossar, lo que retrasó el inicio de los trabajos de saneamiento y renovación de agua potable que se realizaron después en todas las calles.

La empresa de la reforma de «Virgen de la Cabeza» realiza subsanaciones por seguridad en el firme

En el caso de Fatxo, el Ayuntamiento ha puesto un pavimento diferente para resaltar que allí apareció parte de la muralla de la ciudad y está a la espera de colocar un panel informativo. Respecto al resto de viales en los que no ha habido hallazgos imprevistos, la edil de Movilidad, ha descartado incumplimientos de plazos. «Los tres meses que tenía la empresa para pavimentar se están cumpliendo», dijo Díez.

Estas actuaciones forman parte de la estrategia municipal del Plan Centro, cuyo coste supera los 900.000 euros entre las obras de Aigües d’Elx y las de pavimentación, que han pretendido modernizar las calles que carecían de accesibilidad. En concreto, el Ayuntamiento ha destinado un total de 589.000 euros a modernizar más de 1,5 kilómetros de conducciones de agua potable.

Esto supone la retirada de la red antigua de fibrocemento y su modernización con los materiales actuales. Con este importe se han renovado más de 600 metros de alcantarillado y se han cubierto las excavaciones realizadas con todas las medidas de conservación necesarias para que estén en las mejores condiciones posibles, según aseguró el equipo de gobierno durante las obras .

El Ayuntamiento reabrirá la calle Fatxo al tráfico el miércoles

«Una transformación con criterio sostenible». Así describió la portavoz de Compromís estas obras que el bipartito quiere extender a otros puntos del centro, la zona del Asilo de San José y de El Raval. Esther Díez ha anunciado que ese proyecto de renovación de calles está valorado en más de 600.000 euros y que pretenden desarrollarlo este verano para que una vez encuentren la financiación (la Diputación se comprometió a invertir en ello), se pueda empezar.

Por otra parte, respecto a la otra gran remodelación enmarcada en el Plan Centro que ha puesto en marcha el equipo de gobierno, en la calle Virgen de la Cabeza, la empresa ha entrado a realizar subsanaciones que garanticen la seguridad en la vía relacionadas con la pavimentación, tras rescindir el contrato el ejecutivo local hace una semana por abandonar ésta los trabajos en la recta final de la obra. Así lo anunció la edil de Movilidad, Esther Díez, quien apuntó a que desde el departamento de Contratación tiene en tramitación la rescisión y aseguró que tan pronto como se quede resuelta el Ayuntamiento asumirá el 10% de los trabajos que quedan pendientes, como son el asfaltado.

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