Día de la Disfagia: cuando la dificultad para tragar puede acabar en desnutrición

El Hospital General presenta una guía para ayudar a cuidadores a tratar con este trastorno que sufre uno de cada tres mayores de 65 y el 10% de la población

Cocineros enseñan a adaptar dietas para que no pierdan nutrientes y los sanitarios reivindican test diagnósticos desde Atención Primaria y que exista un acompañamiento a las familias para evitar atragantamientos

Docentes del FP de Hostelería del IES Cap de l'Aljub ofrecen una masterclass para preparar platos aptos para diafásicos

Docentes del FP de Hostelería del IES Cap de l'Aljub ofrecen una masterclass para preparar platos aptos para diafásicos / Antonio Amorós

J. R. Esquinas

J. R. Esquinas

Uno de cada tres mayores de 65 años corre alto riesgo de tener serias dificultades para tragar al igual que el 30% de los pacientes que sufre un ictus. Este trastorno, conocido como disfagia y que sigue siendo infradiagnosticado según los sanitarios, también puede desembocar en que quien lo padece acabe con déficits nutricionales porque o ellos mismos, o en la mayoría de casos sus cuidadores, les restringen alimentos de alto valor por no saber adaptarlos a la dieta.

Entienden que la carne o el pescado, por ejemplo, pueden complicar la deglución (el proceso por el que el alimento y la saliva pasan de la lengua al estómago) y provocar un atragantamiento, resalta Evangelina Boix, responsable de servicio de Endocrinología del Hospital General de Elche.

Un momento de las ponencias por el Día de la Disfagia en el Hospital General de Elche este martes

Un momento de las ponencias por el Día de la Disfagia en el Hospital General de Elche este martes / Antonio Amorós

Masterclass

Precisamente profesores de cocina del IES Cap de l'Aljjub de Santa Pola junto a nutricionistas han hecho una masterclass este martes en el departamento de salud, aprovechando el Día Internacional de la Disfagia, para dar a conocer las infinitas posibilidades de que los afectados puedan comer platos ricos y variados con todos los macronutrientes y sin recurrir a triturar todos los alimentos a la vez.

El docente Joaquín Caro Sánchez y la dietista Keila Pérez Mira han tratado de sensibilizar de que lo ideal es que si se va a preparar una merluza con salsa verde o unos pimientos del piquillo, que todos los alimentos tengan sus propios colores y sabores para que sean atractivos y el usuario con esta patología lo disfrute.

Guía

El motivo de este encuentro hoy, ante más de un centenar de profesionales sanitarios y cuidadores, era presentar la guía ‘Vivir con disfagia tras un ictus’ que, de forma sencilla, da las claves sobre cómo afrontar esta patología que se estima que afecta al 10% de la población. La misión principal es servir de ayuda a los cuidadores o a los propios afectados cuando aparece esta dificultad "porque tienen que volver a aprender a comer y los que están al lado se sienten impotentes y lo ven toser y creen que darle agua es la solución. La enfermera a veces se queda corta porque el tiempo es muy limitado y no sabemos si están preparados cuando están en casa", destacaba Mercedes Navarro, enfermera del área de hospitalización de Neurología.

La profesional entiende que esta es una herramienta muy útil para aprender a hacer la maniobra de heimlich, abordar texturas de los alimentos, "y se sensibiliza de que la higiene de boca es imprescindible y que quedan prohibidas las cañitas". El documento también arroja luz a los familiares sobre la cantidad de cubiertos adaptados que hay en el mercado y vasos "tipo nose" para que el usuario no tenga que levantar demasiado la cabeza a la hora de tragar porque puede ser perjudicial.

Profesionales sanitarios y cuidadores durante la jornada

Profesionales sanitarios y cuidadores durante la jornada / Antonio Amorós

Diagnóstico

Durante la jornada, en el salón de actos del hospital, se ha incidido también en la necesidad de que se acelere el diagnóstico, por lo que los sanitarios entienden que sería muy útil que los centros de salud pudiesen ofrecer test de volumen de viscosidad para conocer si se padece este trastorno sin tener que acudir al especialista. Los profesionales abogan por un abordaje rehabilitador para que quienes sufren este problema puedan minimizarlo, y lo cierto es que la mitad de los pacientes neurológicos, donde más suele darse este síntoma, logran mejorar a los días.

Afectados

Existen datos sobre disfagia orofaríngea en diferentes enfermedades neurológicas pudiendo afectar al 30% de los pacientes que han padecido un accidente cerebrovascular, al 52–82% de los afectados de Parkinson, al 60% como síntoma inicial de una enfermedad lateral amiotrófica (ELA), al 40% de los pacientes con miastenia gravis, al 44% de las esclerosis múltiples, hasta al 84% de los pacientes con enfermedad de Alzhéimer y al 25–42% tras un traumatismo craneoencefálico.