El alcalde de Elda ha reconocido que la pandemia está "desbocada en la ciudad" y, por ello, ha apelado a la responsabilidad de los eldenses para reducir al máximo la movilidad personal y los encuentros sociales y familiares. Rubén Alfaro ha agradecido que la Conselleria de Sanidad limite las reuniones en los cuartelillos festeros a seis personas y ha anunciado que ordenará a la Policía Local, desde este mismo viernes, un mayor control de los aforos en los mercadillos populares para evitar las aglomeraciones que se han producido en las últimas semanas.

El Ayuntamiento tiene previsto endurecer las medidas anunciadas en la noche del jueves por la Conselleria de Sanidad con la suspensión de actividades públicas y el cierre o limitación de horarios de instalaciones municipales, tanto en el ámbito cultural y deportivo como en el social y educativo. Este paquete de medidas se difundirá este viernes, a través de un bando municipal, una vez que sea analizado y consensuado en la junta de portavoces.

"Mensaje de fuerza y esperanza"

"Confío plenamente en las nuevas directrices de los científicos y de los responsables de la Conselleria de Sanidad para combatir al coronavirus, y considero que las medidas anunciadas son perfectamente asumibles", destacó el primer edil durante la comparecencia que realizó pasadas las nueve de la noche, en la Alcaldía, una vez que concluyó la rueda de prensa de Ximo Puig. A pesar de la avalancha de nuevos contagios de coronavirus que sufre Elda, Alfaro ha querido lanzar un mensaje de "fuerza y esperanza" al conjunto de la ciudanía así como de "cariño y fortaleza" para quienes hayan sufrido la pérdida de seres queridos o tengan enfermos hospitalizados. Por último ha mostrado un moderado optimismo respecto a los resultados de las medidas restrictivas que el Ayuntamiento adoptó dos semanas atrás. Una conclusión que extrae de los análisis de las aguas residuales que ya comienzan a reflejar una estabilización de la incidencia de la pandemia en la ciudad.