Mazón y Barcala piden la máxima movilización para lograr el cambio en el cierre de campaña

El candidato a la presidencia tira de alicantinismo y contrapone su programa con las «ayudas de Ximo Puig a su hermano»

La penúltima parada del candidato del PP a la presidencia de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, fue Alicante, su plaza y donde Luis Barcala concurre para su reelección como alcalde. Afiliados y simpatizantes de l’Alacantí arroparon a los líderes que se enfrentan a una cita electoral que se prevé sea reñida.

En las primeras filas, la candidatura de Alicante, autonómica y diputados provinciales como Sebastián Cañadas que se despide de la Alcaldía de Mutxamel y parte del equipo de Ciudadanos alicantino como la vicealcaldesa Mari Carmen Sánchez y el concejal Antonio Manresa. Barcala les agradeció su lealtad y su colaboración en este mandato en un largo capítulo de agradecimientos en el que quiso incluir también a todos los colectivos vecinales y festeros, entre otros. 

Mientras llegaba Mazón, hubo música de fondo en los salones de un conocido restaurante alicantino. De momento, todo paró y sonó uno de los temas de la campaña, una versión española de «Será porque te amo» del grupo italiano Ricchi e Poveri. El presidente regional junto al alcalde entraron saludando y lanzando besos. 

Alberto Nuñez Feijóo protagonizó un acto del PP de Alicante con hosteleros en el puerto.

Alberto Nuñez Feijóo protagonizó un acto del PP de Alicante con hosteleros en el puerto. / AXEL ALVAREZ

El equipo de Mazón ha hecho una campañan en la que se ha querido transmitir alegría, sonrisas, como dice su eslogan, y la canción es pegadiza. Tras el vídeo, Luis Barcala comenzó con los agradecimientos y pronto entró en la clave de una jornada como la de ayer: pedir el voto. Obras, proyectos, «oportunidades de futuro», ya se había dicho todo y el candidato popular, que se enfrenta a sus segundos comicios, no dudó en pedir el voto a todos. «Máxima movilización», dijo para poder gobernar con la mayoría suficiente los próximos cuatro años. «Ni un solo voto se puede quedar en casa. No nos podemos confiar. Tenemos que echar el resto. Alicante necesita un gobierno amplio y estable». 

Tras algo más de veinte minutos, le daba el relevo al presidente regional. Mazón subió al escenario con un tema de Queen (Don’t stop me now). El título enlazaba perfectamente con su agenda y con su arranque: «Después de 15 días, 7.000 kilómetros, 68 municipios y 98 actos» llegaba al acto que llevaba en la cabeza hacía tiempo, en referencia al cierre en Alicante. «Sois las pilas que cargan mi energía». 

Tras una hora de espera, el líder popular arengó a los suyos entre mensajes de orgullo alicantinista y proclamas repetidas como un mantra. «El PP es el proyecto ganador. Hasta ahora lo hemos hecho solos, sufriendo el mayor infierno fiscal», apuntó. 

Mazón enumeró temas como la sanidad, la rebaja de impuestos, la desidia de Ximo Puig y el ninguneo de Pedro Sánchez hacia la Comunidad Valenciana; contrapuso los problemas de los alicantinos a la facilidad con la que Francis Puig, hermano del secretario general socialista y presidente de la Generalitat, accede a ayudas que ligó con el chiste del ministro. A partir de ahí, fue el momento para demandar el voto a izquierda y derecha, a todos. «Vamos a por todas», concluyó. 

Con la mira en los hosteleros

De Alicante, el presidente se marchó a Elche y ahí cerraba una campaña muy intensa. La mañana empezó con la presencia del líder nacional, Alberto Núñez Feijóo, quien protagonizó un encuentro matutino con los hosteleros de la ciudad junto a Barcala y al presidente provincial, Toni Pérez. En el último día de campaña, el Partido Popular de Alicante se lanzó a por el voto de la hostelería, un sector en el que Ciudadanos se ha movido bien. 

Feijóo comenzó alabando la gestión tanto del regidor alicantino como del benidormense. «Estoy convencido de que Toni Pérez y Luis Barcala van a ser alcaldes muy útiles para la gente». Por otra parte, subrayó la importancia que tiene la hostelería. «Sigan cultivando esa marca de hospitalidad y calidad. Nunca se van a arrepentir. Si hay calidad, la gente pretende volver al sitio donde se siente bien. El clima ya lo tienen puesto». El presidente nacional aseguró que «si el turismo falla, se cae el empleo y el país entra en decadencia» y se comprometió a hacer lo contrario que Pedro Sánchez apoyando al sector y «en ningún caso, menospreciándolo».