Sanidad Pública: una inversión tan necesaria

Sanidad Pública; una inversión tan necesaria, para eso están los impuestos. Todo lo que se gaste en la salud de la población está más que justificado social y presupuestariamente. Una sanidad pública universal, gratuita y eficiente ahorra muchos recursos, significa más calidad de vida y más vida a las personas mayores y no solo a los mayores. En España se vive más y mejor que en casi todos los países del mundo, más que en otros más desarrollados, más ricos pero socialmente más injustos, en donde la desigualdad es dramática.

Sucesivas y constantes mareas blancas exigen más recursos para la sanidad pública, convocando a muchas miles de personas. Se necesita más personal, una mayor utilización de las instalaciones sanitarias, incrementar los salarios de los trabajadores que se ven obligados a emigrar.

El Gobierno en 1982 decidió que todo habitante en España pudiera acceder a la sanidad, no a la beneficencia ni a morirse en su casa si no contaba con recursos propios para recurrir a la sanidad privada. La privada es un recurso a la que la sanidad pública suele recurrir, dada la lista de espera en la pública, pero si la operación es "cara", un trasplante por ejemplo, se hace en la pública. La Junta de Andalucía ha derivado a la privada 700 millones de euros, a la pública le sobrará el dinero.

La sanidad es una inversión, evita muchos gastos, muchos, protegiendo a la población, a toda la población. A las ocho, durante la pandemia, salíamos a los balcones a aplaudir agradecidos. Aplaudir puede estar bien, pero no es suficiente. El personal sanitario necesita el apoyo de los usuarios, bastante tienen con una demanda excesiva y la falta de recursos. No son voluntarios pero proceden como si lo fueran.