La industria salinera de Torrevieja es una de las más importantes de Europa, en especial para la exportación de sal a granel vía marítima para deshielo de carreteras. En un buen año de producción puede llegar a generar más de 600.000 toneladas de sal. Sin embargo, la explotación no pasa por sus mejores momentos. A mediados de 2015 prescindió de la empresa torrevejense que realizaba la carga de sal, lo que supuso la pérdida de quince puestos de trabajo.

La plantilla actual apenas supera los 80 operarios -llegó a emplear a cientos e incluso miles antes de la mecanización de los años cincuenta del pasado siglo-Pese a las dificultades actuales, la empresa no ha llegado a plantear que deba prescindir de personal. A la entrada excepcional de agua se ha sumado la paralización del proyecto que desde 2015 pretendía abrir al turismo la explotación -la actividad no es solo una desconocida para los turistas, también para muchos torrevejenses que jamás han podido visitarla-.