El coste y sufrimiento de sacar adelante una explotación de alcachofas en la Vega Baja

La Asociación Alcachofa de la Vega Baja lanza una campaña para evidenciar el esfuerzo que hay detrás de su cultivo a través de las emotivas historias de agricultores y envasadores que luchan contra la subida de precios o el cambio climático para poder producir

Son 7.000 las personas en la comarca que dependen de forma directa e indirecta de esta hortaliza

Los tres protagonistas de la campaña de la Asociación Alcachofa de la Vega Baja del Segura.

Los tres protagonistas de la campaña de la Asociación Alcachofa de la Vega Baja del Segura. / INFORMACIÓN

Rubén Míguez

Rubén Míguez

Los bajos precios, la sequía, los costes de producción... Son problemas a los que se están enfrentando miles de agricultores en todo el país, y que también están evidenciando su hartazgo con las marchas de protesta por la Política Agraria Común (PAC), el aumento de la burocracia o las importaciones agrícolas baratas de países extracomunitarios. El campo es muy sacrificado, pero gracias al esfuerzo de esos agricultores podemos alimentarnos.

En la Vega Baja, la joya de la huerta por excelencia es la alcachofa, de la que dependen, directa e indirectamente, 7.000 personas en la comarca. Se cultivan en esta campaña unas 1.700 hectáreas. Y detrás de cada una de las explotaciones hay una historia de un agricultor o agricultora que evidencian el coste, el sufrimiento y el esfuerzo de sacarla adelante. Es lo que cuentan en la campaña que acaba de poner en marcha la Asociación de la Alcachofa de la Vega Baja.

Un agricultor jubilado de 80 años, una agricultora joven que ha dejado su profesión de peluquera para dedicarse al campo o una envasadora que lleva 24 años trabajando en la empresa de los principales exportadores de alcachofa de España, ponen voz al sector para dar a conocer todo el trabajo que hay detrás del cultivo de la alcachofa en la campaña "Historias con corazón".

La campaña de la «joya de la huerta» de la Vega Baja arrancó en diciembre con la estimación de que se producirán unas 6.000 toneladas menos que en la última temporada, por lo que serán 20.000 toneladas de producción, por la incertidumbre que provoca en los agricultores el agua, y las continuas decisiones sobre este recurso tan necesario, así como el aumento de los costes de producción y las elevadas temperaturas que han hecho mella en esta hortaliza que necesita de frío para desarrollarse. con precios altos en origen, que rondan de media los 3 euros el kilo. No obstante, bajará el precio ha ido bajando conforme la campaña ha avanzado y haya más producción, explican los productores, que confían en que se mantengan en unos márgenes razonables tanto en fresco como en la industria, lo que, lamentablemente, no siempre sucede.

"Tano el de la Barraca"

El vídeo recoge el testimonio de tres generaciones vinculadas al cultivo de la alcachofa con el objetivo de reivindicar el trabajo que hay detrás de esta hortaliza.

Los protagonistas son Cayetano Murcia, conocido como "Tano el de la Barraca", que está jubilado, tiene 80 años y lleva vinculado a la alcachofa desde que empezó con su padre cuando era pequeño. Tano habla con pasión de la huerta, de la que señala que es su vida, pero también resalta todo el sacrificio que hay en el campo y que pocas veces es visible para el consumidor.

Cayetano Murcia, conocido como "Tano el de la Barraca", que está jubilado y tiene 80 años.

Cayetano Murcia, conocido como "Tano el de la Barraca", que está jubilado y tiene 80 años. / INFORMACIÓN

Este agricultor jubilado afirma que el trabajo en el campo es duro. "Todo el mundo en su trabajo tiene su sueldo y en la huerta no es seguro. No hay días ni noches, ni descanso…", señala, pero reconoce que es su pasión y que siempre le ha gustado.

La esperanza de Lizeth Añez

Por su parte, Lizeth Añez ofrece un testimonio de esperanza en cuanto al relevo generacional en el campo. Ella, gracias a su suegro que tenía tierras y plantaba alcachofas, pudo dejar su trabajo en una peluquería para dedicarse a la huerta. El principal motivo que le llevó a tomar esa decisión fue su hija pequeña y la necesidad de tener mayor libertad horaria para poder conciliar y pasar más tiempo con su familia.

Lizeth Añez pudo dejar su trabajo en una peluquería para dedicarse a la huerta.

Lizeth Añez pudo dejar su trabajo en una peluquería para dedicarse a la huerta. / INFORMACIÓN

"Decidí probar, llevo tres años y estoy muy contenta", asegura esta joven agricultora que anima a las nuevas generaciones a que se atrevan a trabajar en el campo porque "aunque es un trabajo duro, también es muy gratificante". 

Silvia Alfosea, 24 años en la principal exportadora

Otra de las protagonistas es Silvia Alfosea, que lleva 24 años trabajando en Olé!, la principal exportadora de alcachofas de España. Asegura que su vida "es 100x100 alcachofa", ya que "lo llevamos en la sangre y siempre he estado muy relacionada con este cultivo".

Silvia Alfosea lleva 24 años trabajando la principal exportadora de alcachofas de España con sede en San Bartolomé.

Silvia Alfosea lleva 24 años trabajando la principal exportadora de alcachofas de España con sede en San Bartolomé. / INFORMACIÓN

Ella ha plantado alcachofas con su padre y también trabajó en una conservera. De esta manera, es conocedora de todo el esfuerzo y la dedicación que hay alrededor de su cultivo y de toda la mano de obra que genera, porque se recoge y se envasa una a una.

Habrá segunda parte

Esta primera pieza audiovisual donde aparecen estos tres testimonios tendrá una continuación de vídeos donde cada agricultor explicará su historia con algo más de detalle y también se podrá descubrir a otros protagonistas que hablarán de la importancia que tiene el agua para este cultivo, así como su valor desde el punto de vista de la gastronomía.

También de los beneficios para la salud de la mano de Daniel Martínez, del área técnica del Juzgado Privativo de Aguas Azud de Alfeitamí, del chef y crítico gastronómico Tony Pérez, y de Pedro Javier Zapata, del Centro de Investigación e Innovación Agroalimentario y Ambiental (CIAGRO) de la Universidad Miguel Hernández (UMH).

Corte de alcachofa al iniciarse la campaña 2023/2024 en Daya Vieja

Corte de alcachofa al iniciarse la campaña 2023/2024 en Daya Vieja / Tony Sevilla

Reconocer la labor

El presidente de la marca de la Alcachofa de la Vega Baja, Antonio Ángel Hurtado, ha señalado que con esta campaña, que cuenta con el apoyo de la Diputación de Alicante, se pretende reconocer la labor de las 7.000 personas que trabajan de forma directa e indirecta en el cultivo de la alcachofa y de la importancia que tiene este cultivo para el territorio.

"Nos encantaría que el consumidor fuera consciente de todas las historias con corazón que hay en cada una de las alcachofas que se cultivan en la Vega Baja del Segura, de lo que cuesta plantarlas y cultivarlas, de todo el sufrimiento que hay en el campo por los precios, por el cambio climático… y de lo importante que es consumir productos de temporada que contribuyen a garantizar el futuro del campo", indica Hurtado.  

Capazo de alcachofas de la Vega Baja del Segura.

Capazo de alcachofas de la Vega Baja del Segura. / Tony Sevilla

El presidente de la Asociación Alcachofa de la Vega Baja explica que esta iniciativa es una continuación de la campaña "Tenemos corazón" que se estrenó hace dos años. En aquella ocasión, un narrador hablaba del territorio y de las personas que forman parte del sector. "En este caso, hemos querido dar un paso más y que sean los propios protagonistas los que nos cuenten su relación con la alcachofa", concluye Antonio Ángel Hurtado.