El presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, ha anunciado este martes una partida de 10 millones de euros que se presupuestarán en las cuentas de la institución del próximo año para atender las necesidades del colectivo de mayores vulnerables de 65 años, "tras retirar la Generalitat Valenciana la financiación de los programas ‘Menjar a casa’ y ‘Major a casa’".
Tal como ha explicado el responsable provincial, “la Generalitat quiere dejar de ayudar económicamente a los ayuntamientos en la prestación de estos servicios, cuando en su responsabilidad”, un hecho que ha calificado de “muy grave e inmoral, por el desamparo al que se ven abocados los usuarios”.
“Es incomprensible que la Generalitat elimine la prestación que aporta a los consistorios para sufragar esta ayuda, lo que implica poner en jaque uno de los programas más importantes y sociales que tiene la Comunidad Valenciana desde hace muchos años”, ha insistido Mazón, quien ha asegurado que desde la Diputación de Alicante “vamos a dar la cara por los mayores y a no dejar abandonadas a las personas vulnerables en sus casas”.
Según ha trasladado el presidente, los ayuntamientos no tienen la capacidad para superar esta situación, por lo que ha anunciado que la Diputación de Alicante “abordará ese espacio de tránsito”, un objetivo para el cual “he dado instrucciones esta mañana a los servicios jurídicos y presupuestarios de la institución para integrar en el próximo presupuesto de 2023 una cantidad de 10 millones de euros”.
El propósito es conseguir que los consistorios puedan abordar durante el próximo ejercicio los programas ‘Major i Menjar a casa’ y que las personas usuarias en vez de aportar un 35% al mismo, solo asuman el 8%.
Finalmente, Mazón ha detallado que casi 5.000 personas vulnerables mayores de 65 años en la Comunidad Valenciana se benefician de ambos planes, que prestan un sustento tanto en el reparto de comida domiciliaria como en tareas de limpieza y atención. “Este colectivo, por la dejadez de la Generalitat Valenciana, se está viendo en una situación de abandono de cara a lo que queda de año y para el 2023”, ha concluido.
El programa “Menjar a casa” consiste en entregar a domicilio una comida completa a las personas mayores beneficiarias, compuesta por primer y segundo plato, pan y postre. Las comidas son preparadas y se sirven en frío. El programa “Major a casa” además incorpora la limpieza del domicilio y lavandería de ropa de cama y aseo una vez a la semana. Las personas beneficiarias las seleccionan los Ayuntamientos a través de los equipos municipales de atención primaria, y es requisito para acceder ser mayor de 65 años y tener una situación de vulnerabilidad social que impida que la persona mayor pueda cocinar, o garantizarse una alimentación adecuada.
Estos programas se prestan en la Comunidad Valenciana desde el año 2007. En un principio se pagaban a través de un convenio por el que Generalitat asumía el 42%, los ayuntamientos un 24% y los usuarios un 34%. Sin embargo, desde hace unos años, cuando los contratos entraron en resarcimiento, el coste lo asume íntegramente la Generalitat, según explican fuentes del mismo departamento de Aitana Mas.
Sin embargo, precisan desde Igualdad, ambos programas “son competencia municipal, y se encuadran en el servicio de promoción de la autonomía personal dentro del programa de atención domiciliaria”.
En julio de 2021 se comunicó a los ayuntamientos que el 1 de julio de 2022 ambos programas deberían ser prestados por los ayuntamientos, financiados a través del contrato programa.De esta manera, precisan las mismas fuentes será un 10% el coste que tengan que asumir los ayuntamientos por estos servicios, un 34% el usuario y un 56% entre Diputación y Generalitat.
