La provincia de Alicante tendrá dentro de 15 años casi 80.000 personas más viviendo en soledad de las que hay ahora. Para 2037, además, los hogares con un solo individuo serán ya cerca de un tercio del total, según los cálculos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Las proyecciones de población y de hogares realizadas por el organismo, publicadas la semana pasada, prevén que dentro de tres lustros haya en la demarcación 290.098 hogares con un único residente, frente a los 211.810 que se estiman en la actualidad. Cada año se espera que aumenten en 5.000, a un ritmo mucho más acelerado que los núcleos familiares tradicionales.
En estos momentos, los hogares unipersonales suponen ya un 27,4% del total en la provincia, pero se calcula que en 2037 serán ya más del 30%. En líneas generales, el INE calcula que en los próximos años se acentuará una tendencia que ya se viene observando desde hace algún tiempo: una atomización de la sociedad cada vez mayor, en lo que se refiere a la forma de vivir. Más que de individualismo, quizá sería más adecuado hablar de búsqueda de la individualidad, del deseo de desarrollar un proyecto de vida propio, condicionado además por otros factores como el progresivo aumento de la longevidad, y con ello también del envejecimiento.
Así, tal y como han apuntado a este periódico expertos en demografía y sociología en anteriores ocasiones en las que los datos ya han venido marcando este incremento de la vida en soledad, se trata de una tendencia creciente y con visos de seguir en aumento por un tiempo indefinido. Puede ser una soledad buscada, por la citada realización de un proyecto vital individual, o también algo sobrevenido, como por ejemplo tras la separación de una pareja o el fallecimiento de uno de sus miembros, y que no hayan tenido hijos o que ya se hayan emancipado. La mencionada longevidad no hace otra cosa que acentuar el fenómeno, dado que al vivir más tiempo las personas, crece también el número de individuos solos.
Los datos certeros más recientes hasta la fecha, de la Encuesta de Hogares que también realiza el INE, ya hablan de 5.000 hogares unipersonales más entre 2019 y 2020. Ese último año, la cifra se estimaba en unos 197.700, un 26% del total. Es decir, en apenas dos años se calcula que la vida en soledad ha crecido más de un 7%. En los próximos 15, el aumento alcanzará casi el 37%, bastante por encima de la cifra total de hogares, que se espera que se incremente en un 24,6%, una muestra más de esa tendencia creciente a la individualidad.
Nuevas formas de familia
Como ya adelantó este periódico hace unos días, el INE calcula que en 2037 habrá en la provincia de Alicante 963.283 hogares, y entre ellos serán mayoritarios los formados por dos personas, 320.734. Ya es así en estos momentos, como dicen tanto la Encuesta de Hogares de 2020 como la estimación de 2022; esta última cifra es de 244.673, por lo que se prevé que durante los próximos 15 años esta tipología de hogares se incremente en un 31,1%. Ahora bien, esta forma de convivencia también deja entrever la aparición de nuevas formas de familia.
La Encuesta de Hogares de 2020 señala que, de los 244.400 núcleos familiares de dos personas existentes en la provincia en ese momento, 170.700 correspondían a una pareja sin hijos, porque no los haya tenido o estén emancipados; sin embargo, los 73.700 restantes estaban formados por un progenitor solo y un hijo. Esta fórmula ha aumentado en los últimos años y, por lo tanto, es muy presumible que continúe en crecimiento en un futuro cercano. Hay que tener en cuenta que, en buena medida, la familia monoparental tiene ligazones con la búsqueda de un proyecto vital individual: una persona que, en soledad, decide tener un hijo, ya sea de manera biológica o a través de una adopción.
El cálculo del INE hasta 2037 no distingue entre las posibles tipologías de los hogares, más allá de su composición, pero resulta muy previsible que las familias monoparentales sigan ganando terreno. También se espera un aumento, aunque más leve, de los hogares compuestos por tres personas, como los de una pareja con un solo hijo o un progenitor solo con dos hijos, mientras que los de cuatro o cinco personas se estancarán. Así las cosas, se espera una leve pero constante reducción del tamaño medio de los hogares hasta las 2,32 personas.
