La rectora de la UA aboga por lograr una «buena financiación» sin límite de tiempo

Navarro prefiere que el Plan de Financiación responda a las necesidades de todas las universidades aunque suponga dilatar su aprobación más allá de marzo. La Comunidad presenta distancias de hasta 5.000 euros en el gasto por alumno

Alumnado a las puertas de uno de los aularios de la UA

Alumnado a las puertas de uno de los aularios de la UA / HECTOR FUENTES

Victoria Bueno

Victoria Bueno

«Lo importante es conseguir un buen plan de financiación, independientemente del mes en el que lo hagamos. Es preferible esperar y lograr un buen plan a hacer un mal plan porque haya una fecha límite». La rectora de la Universidad de Alicante se muestra rotunda ante la puntual fractura de las negociaciones porque la Politécnica de València disiente sobre los fondos para investigar porque entiende que se le perjudica. 

La investigación básica también cuenta en la financiación universitaria futura

La investigación básica también cuenta en la financiación universitaria futura / PILAR CORTES

«La financiación del sistema valenciano en relación a la docencia, al gasto por alumno, es francamente mejorable, y creo que no es incompatible con una buena financiación de la investigación y la transferencia del conocimiento», abunda Navarro al respecto.

Los datos más recientes sobre el gasto corriente por alumno referidos al curso 2020-21 en el conjunto de las universidades españolas, última anualidad computable, reafirma la necesidad de que el Plan Plurianual de Financiación incluya una «solución presupuestaria para el conjunto de las universidades», sopesa la rectora, sin necesidad de acelerar el proceso en marzo como pretende el Consell.

Pese a que la negociación está encallada, para Navarro es más importante que el acuerdo final obtenga el consenso del 100% de las universidades que aprobar un mal plan con plazo límite.

«Debe buscar dos cosas, por un lado la suficiencia para tener una docencia de calidad y una buena investigación y transferencia, pero también la equidad del sistema», concreta. La máxima autoridad de la Universidad de Alicante se refiere a que cualquier alumno del sistema público valenciano «cuente con los recursos suficientes para poder dar una docencia de calidad y poder hacer la investigación que hace en muchos campos, no en la transferencia, sino en la investigación básica, en humanidades, ciencias sociales, economía o tecnología. Ciencia básica y ciencia aplicada».

Gasto por alumno

Los datos que ofrece la estadística de cara la citada negociación sobre el nuevo Plan de Financiación, que revisa exhaustivamente los requisitos que deberán cumplir las universidades para recibir una financiación más estable, hablan por si solos. Ni la Jaume I de Castellón ni la Universidad de Alicante alcanzan los 8.500 euros anuales por alumno que seria la media nacional aproximada.

La Miguel Hernández de Elche y la Universitat de València se sitúan en la zona media de la tabla, con 8.645 y 8.773 euros anuales por alumno respectivamente.

Y la Politécnica de València, centro que ha roto puntualmente el consenso pleno por un nuevo plan financiero universitario, alcanza el top de la tabla con hasta 12.696 euros al año por alumno en el curso 2020-21, la mejor dotada de toda España en este sentido.

Este informe de la Fundación CYD muestra una diferencia sustancial en la dotación por alumnos entre las cinco universidades de la misma Comunidad, con hasta 5.000 euros de distancia entre la mejor dotada, la UPV y la peor, la Jaume I, a la que sigue de cerca la UA de Alicante con 8.365 euros por alumno, a 4.300 euros también de la Politécnica.

Plazos

«Las universidades consideramos necesario alcanzar esa equidad» de cara la dotación por alumno, abunda la rectora, y de hecho afirma que ya estaban «muy cerca del acuerdo, primero para el reparto de los fondos de 2023 y para seguir avanzando en un plan a más largo plazo».

Sin embargo, la diferencia entre universidades en el peso que se le quiere dar a la docencia, la investigación y la transferencia, ha provocado el desencuentro actual. «Hay que tener en cuenta -puntualiza Navarro- que las universidades son diversas. Que no es lo mismo una especializada politécnica que una generalista -léase la de Alicante- que tiene otro tipo de titulaciones menos proclives a la transferencia pero sí más proclives a la investigación básica o a la docencia».

La rectora de Alicante subraya que «necesitamos un Plan en el que todas las universidades sigamos aportando la calidad que aportamos al sistema universitario español en su conjunto». Y aboga por seguir negociando hasta el consenso al 100%.

A la espera de la conselleria

Las universidades están a la espera de lo que decida la Conselleria de Universidades, que dirige Josefina Bueno, sobre si se retoma o no la negociación del Plan Plurianual tras el parón que ha supuesto la disidencia de la Politécnica. Navarro sopesa estar dispuesta a seguir dialogando por lograr un «plan que nos guste a todos. No dudo que el rector Capilla (UPV) seguirá en la mesa», afirma la rectora de Alicante.