La Marina Deportiva de Alicante levanta el veto a los locales «rebeldes» a los que acusa de impagos

La concesionaria retira el vallado que bloqueaba el acceso a los establecimientos, pero sigue impidiendo colocar las terrazas

Locales del puerto recogen las terrazas tras las órdenes del servicio de seguridad.

Locales del puerto recogen las terrazas tras las órdenes del servicio de seguridad. / Héctor Fuentes / HÉCTOR FUENTES

Alejandro J. Fuentes

Alejandro J. Fuentes

Los locales del puerto de Alicante que se han declarado «en guerra» contra la Marina Deportiva por la caducidad de la concesión han recuperado este jueves su actividad, después de que la concesionaria levantase el vallado que había instalado frente a los negocios y que impedía a sus propietarios dar servicio a los clientes. Marina Deportiva, eso sí, insiste en que cuenta con el respaldo jurídico para extinguir los contratos de cesión de los locales y asegura que algunos de los propietarios de los establecimientos «rebeldes» están utilizando la polémica generada como medida de presión, dada la existencia de impagos.

Después de casi una semana, desde el pasado jueves, en la que varios negocios del puerto de Alicante no han podido atender a sus clientes, la Marina Deportiva (titular de la concesión de la Autoridad Portuaria) ha eliminado el vallado que «sitiaba» los locales, impidiendo el trabajo de sus propietarios. La situación provocó una denuncia de los afectados por presuntas coacciones para abandonar los establecimientos, pero la Marina Deportiva señala ahora que podría tratarse de una medida de presión, dado que algunos de estos establecimientos tendrían contraídas grandes deudas con los titulares de la concesión.

«Hay locales que deben hasta 50.000 euros en concepto de alquiler, luz, agua y gastos en general», señalan fuentes de la mercantil responsable de la gestión de la zona. Además, apuntan que «los negocios que no quieren abandonar los locales atraen clientela que no nos interesa y generan mal ambiente, llegando a protagonizar casos de violencia de género y agresiones sexuales, que no es lo que queremos para el puerto», apuntan.

Nuevos planes

Ante la «degradación» de la zona, denunciada por los titulares de la concesión y constatada por el aumento de intervenciones policiales en el entorno del puerto, el objetivo de Marina Deportiva es reconducir el modelo de negocio del puerto de Alicante hacia otro tipo de hostelería, con restaurantes de mayor nivel y terrazas que recojan sus servicios antes de las 3:00 horas de la madrugada.

Una decisión que no ha sentado nada bien a alguno de los responsables de los negocios actuales, que entienden que sus contratos todavía no han caducado. La discrepancia tendrá que resolverse en los juzgados, después de que varios de los locales «rebeldes» hayan acusado de coacciones a los titulares de Marina Deportiva. La concesionaria entiende que los contratos de cesión caducaron el pasado 13 de septiembre, después de 15 años de cesión acordados en 1993, sin embargo, los citados establecimientos señalan que como la mercantil ha prorrogado dicha concesión con la Autoridad Portuaria, de igual manera deben extenderse sus contratos de alquiler, durante otros quince años más.

Esta situación ha generado un ambiente de tensión en la concurrida zona del puerto, donde desde hace días existe un vallado perimetral, instalado para la realización de una serie de catas del suelo, imprescindibles para las obras que se van a desarrollar en la zona.

Los titulares de la concesión se apoyan en un informe jurídico privado, solicitado al bufere Ferrer Pallás, encargado de la defensa jurídica de Marina Deportiva, pero los locales díscolos insisten en que llevarán el asunto hasta el final, y confían en la justicia para poder seguir operando en la zona.