La Generalitat frena la adjudicación de la intermodal del TRAM de Alicante hasta firmar el acuerdo con Adif para la ocupación del suelo

La Conselleria de Infraestructuras y Territorio sostiene que dará luz verde a la contratación para la ejecución de obra, con un presupuesto de licitación de 132 millones, cuando la entidad pública "desbloquee" los terrenos

El ente dependiente del Ministerio de Transportes asegura que está a la espera de que el Consell remita el borrador del protocolo con las subsanaciones requeridas el pasado 6 de octubre tras recibir el primer documento el 20 de septiembre

Zona sobre el que se proyecta la intermodal del TRAM, que sería subterránea, en el entorno del estacionamiento de vehículos de Adif

Zona sobre el que se proyecta la intermodal del TRAM, que sería subterránea, en el entorno del estacionamiento de vehículos de Adif / Rafa Arjones

C. Pascual

C. Pascual

Ahora, a la espera de que se firme el protocolo para la ocupación del suelo. Tras el visto bueno definitivo del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, al proyecto impulsado por el Botànic para la estación subterránea de la intermodal del TRAM de Alicante después de las dudas exhibidas en público por el alcalde de Alicante, Luis Barcala, la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, que dirige la popular Salomé Pradas, asegura que no reactivará el proceso de licitación del contrato de ejecución de las obras para la construcción hasta que se firme el acuerdo con Adif (Administrador de infraestructuras ferroviarias) para la ocupación de los terrenos necesarios, que actualmente acogen el estacionamiento de vehículos junto a la estación del AVE. "Seguimos pendientes de que Adif nos desbloquee los terrenos. Ese es el paso necesario para seguir adelante, el camino que hay que seguir", defendieron la mañana de este miércoles desde la conselleria a preguntas de este diario.

Según explicaron desde Adif horas después, la pelota lleva unos días sobre el tejado de la conselleria. En concreto, explican que representantes del ente mantuvieron una reunión técnica el 8 de febrero con el Gobierno valenciano y Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), en la que "se acordó la necesidad de suscribir un protocolo de colaboración que estableciera los pasos para la realización de las obras y fijase los instrumentos a utilizar para facilitar la ocupación de los suelos de Adif y Adif Alta Velocidad". También, según las mismas fuentes del ente dependiente del ministerio, se pactó que la Generalitat y FGV "redactarían un primer borrador de protocolo, a partir de la información que Adif remitiese, en el que se delimitasen sobre plano los suelos de su propiedad". Esa documentación, añaden, fue remitida por Adif el 17 de febrero a FGV. Todo eso ocurrió con el Botànic de Puig al frente del Consell.

Los trámites se quedaron en "stand by" con el cambio de gobierno en la Generalitat, que implicó la llegada del ejecutivo liderado por Mazón. Así, hasta el 20 de septiembre, Adif afirma que no recibió el borrador del protocolo. Dos días antes de ese envío, el jefe del Consell, preguntado sobre el proyecto de la intermodal del TRAM, puso el foco en el Ejecutivo de Sánchez, ahora en funciones: "Tenemos que tirarle un poco de las orejas al Gobierno de España, porque necesitamos unos permisos y unas autorizaciones de Adif que no se han producido".

Unas dos semanas después de recibir el borrador de la Generalitat, el 6 de octubre, Adif apunta que respondió, en este caso con sus observaciones, en las que se contemplan, entre otras cuestiones, "la necesidad legal de solicitar la autorización administrativa para la ejecución del proyecto -ya expuesta en la reunión de febrero-, acompañada de los correspondientes títulos habilitantes para la ocupación de los terrenos de Adif". Y, según el ente público, nada más hasta hoy. "No hemos recibido respuesta a los comentarios trasladados a Generalitat y FGV", señalan este miércoles fuentes de Adif a consultas de este diario.

Al respecto, el subdelegado del Gobierno en Alicante, Carlos Sánchez Heras, ha criticado al Consell de Mazón por frenar el proyecto. "Los hechos demuestran que el Gobierno de España ha hecho todo lo que tenia que hacer. A Mazón le queda la parte más fácil: adjudicar un proyecto que ha heredado y que no le ha supuesto ningún esfuerzo", ha apuntado Sánchez Heras, para añadir: "Si, una vez más, quiere optar por la confrontación, en lugar de por el trabajo y perjudicar de esta forma a la ciudadanía, paralizando un proyecto clave para Alicante, tendrá que explicar los motivos. Es un tema muy serio, así que esperamos que apliquen el sentido común y empiecen a trabajar".

Tras conocer la cronología explicada por el ente dependiente del ministerio, la conselleria pospuso a este jueves la "verificación" de la versión de Adif.

Casi tres meses paralizado

El contrato para la construcción de la intermodal del TRAM, que se licitó a mediados de abril, a las puertas de las elecciones municipales y autonómicas del 28M, estaba a punto de ser adjudicado a una de las diez empresas licitadoras cuando el proceso se frenó en seco. El último trámite oficial se produjo el 25 de julio, con la publicación del acta de apertura del sobre relativo a las ofertas económicas, que se conocieron el 19 de julio. Previamente, el 14 de junio se abrió el primer sobre, sobre la acreditación del cumplimiento de los requisitos previos para contratar. Así, desde finales de julio, cuando el proceso ya estaba a la espera de la propuesta de adjudicación, nada más se ha avanzado en la tramitación.

Unos dos meses después, coincidiendo con el balance de los primeros cien días de los gobiernos locales, el popular Luis Barcala aseguró que habría que "repensar" el proyecto, impulsado por la Generalitat durante el mandato de Ximo Puig, alegando que se había "planteado una macroestación que puede no ser necesaria teniendo una estación en Luceros, a 150 metros, tanto por complejidad como por coste". Esta millonaria iniciativa, sin embargo, fue una reivindicación de Barcala durante los cuatro años que pasaron desde el anuncio de Puig, en la campaña electoral de 2019, hasta la licitación del proyecto, a las puertas de los últimos comicios autonómicos.

El proyecto, que permitirá que los pasajeros que llegan a Alicante en tren no tengan que desplazarse andando a coger el tranvía en Luceros para ir a las playas y Benidorm, una asignatura pendiente desde 2013, fue presentado en público en marzo de 2022. La propuesta plantea una nueva estación intermodal con cuatro vías y dos andenes centrales, que permitirá una mejora en la frecuencia de paso de los tranvías.

Esta iniciativa se planteó por la Generalitat como un proyecto fundamental para la expansión de la red tranviaria, siendo el punto de partida de una futura ampliación del TRAM que conectará con los municipios de Sant Joan d'Alacant y Mutxamel y por el suroeste de la ciudad de Alicante con los barrios de La Florida, Ciudad de Asís y Princesa Mercedes.