El Ayuntamiento de Alicante otorga un 6% menos de ayudas al alquiler que en 2022

El Ayuntamiento de Alicante concedió un total de 598 ayudas para el alquiler a personas vulnerables durante el pasado 2023. Pese a que, en esta convocatoria, el ejecutivo local espera agotar el presupuesto concedido por el Consell, en total, Alicante otorgó un 6,5% menos de prestaciones que el año anterior, cuando tuvo que devolver más de 240.000 euros de subvenciones.

La Concejalía de Bienestar Social ha tramitado durante los últimos 12 meses dos tipos de prestaciones para el alquiler. Por un lado, un programa de ayudas directas a personas en situación de vulnerabilidad, que tramita el Ayuntamiento, pero financia el Gobierno autonómico. Por este concepto, el Ayuntamiento aprobó 238 ayudas para 447 beneficiarios en 2023, frente a las 292 subvenciones que concedió a 554 personas el año anterior.

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Una línea de crédito que está destinada a facilitar una solución habitacional inmediata a víctimas de violencia de género, de trata con fines de explotación sexual, de violencia sexual, u objeto de desahucio de su vivienda habitual, entre otros motivos. Según fuentes municipales, en la última convocatoria no se ha devuelto ninguna cantidad a la Generalitat, sino que se ha destinado al pago de soluciones habitacionales de emergencia. Además, aseguran que se han aprobado todas las peticiones que cumplían con los requisitos.

El segundo de los programas, gestionado y financiado exclusivamente por el Ayuntamiento de Alicante, incluye la cobertura de gastos para la vivienda habitual. En este sentido, el gobierno local tramitó 360 prestaciones, dirigidas a evitar desahucios y prevenir impagos. Lo que ha supuesto una docena de expedientes y en torno a 40.000 euros más que en 2022. Pese a este ligero incremento, el cúmulo de concesiones tramitadas ha disminuido casi un 7% en un año.

Ayudas devueltas

En total, el Ayuntamiento alicantino devolvió el pasado año más de un millón de euros en subvenciones concedidas a lo largo de 2022 que no pudieron ser ejecutadas. Media decena de reintegros que pretendían destinarse a distintos programas de subvenciones además de a la contratación de personal.

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Este problema con la gestión de fondos concedidos por otras administraciones fue, durante el pasado año, uno de los principales blancos de las críticas de la oposición municipal, que señaló al gobierno local en reiteradas ocasiones por la pérdida de oportunidades para invertir en la ciudad y en los vecinos.

Por su parte, el ejecutivo municipal señaló de manera reiterada a los complejos requisitos de la Generalitat (entonces en manos del Botànic) para poder acceder a las subvenciones. Sin embargo, entre las ayudas devueltas también figuraba más de medio millón a la Diputación (liderada en esos momentos por Carlos Mazón) debido a que el Ayuntamiento llegó tarde al plazo de presentación.