Los embalses del Tajo baten el récord de agua almacenada en una década: 944 hm3

Mazón y López Miras se reúnen hoy para establecer la estrategia común de la Comunidad Valenciana y de Murcia en la oposición al recorte del trasvase

Castilla-La Mancha defiende la reducción del caudal porque «en tres meses podríamos estar sin agua»

Vista de las tuberías del trasvase Tajo-Segura a su paso por la Vega Baja.

Vista de las tuberías del trasvase Tajo-Segura a su paso por la Vega Baja. / Tony Sevilla

J. A. Martínez

J. A. Martínez

Los embalses de los que depende el trasvase Tajo-Segura acumulan en estos momentos el mayor volumen de reservas almacenadas en una década. Entre los pantanos de Entrepeñas y Buendía acumulan un total de 944 hectómetros cúbicos de agua, según el último parte semanal del Ministerio de Transición Ecológica. El otoño y el invierno han sido generosos en lluvias en la cuenca del Tajo, que se encuentra en estos momentos al 73,26 por ciento en todos sus pantanos. A pesar de la buena situación hídrica, la Comunidad de Castilla-La Mancha urge a seguir reduciendo las aportaciones del trasvase, ya que consideran que se trata de una situación provisional y que las previsiones apuntan a que en los próximos meses la sequía podría seguir en esta zona. Mientras tanto, la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia establecerán una estrategia común en la defensa del agua para estas zonas. 

El Ministerio de Transición Ecológica aprobó este miércoles un nuevo trasvase del Tajo al Segura de 27 hectómetros cúbicos de agua correspondientes a las aportaciones del mes de marzo. El volumen de agua embalsado permite aprobar esa cantidad automáticamente todos los meses, tal y como marcan las reglas de explotación del trasvase, que ahora Castilla-La Mancha quiere revisar.  

Las últimas lluvias han contribuido a aliviar el estado de los pantanos tanto en la cuenca del Júcar como en la del Segura, donde ha habido un ligero incremento de las reservas. En el Segura, los embalses están ahora mismo al 20,61 por ciento, con 236 hectómetros cúbicos, creciendo ligeramente de nuevo por cuarta semana consecutiva, tras haber estado cerca del 18 %. A pesar de estos incrementos, el volumen de agua sigue bajando en el pantano de La Pedrera de Orihuela, que cuenta con 49 hectómetros cúbicos (al 19,92 por ciento) y ha perdido uno en una semana. La Confederación del Segura ha declarado la situación de emergencia por sequía y ha abierto los pozos de reserva para frenar el descenso de las reservas.

En mejores condiciones están los pantanos en la cuenca del Júcar, que están al 51,41 por ciento con 1.463 hectómetros cúbicos embalsados. Sin embargo, ninguno de los pantanos de la provincia crece en agua almacenada.

En este contexto, el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, se reúne este jueves con su homólogo de Murcia, Fernando López Miras, para continuar sumando fuerzas «en la defensa y exigencia de los recursos hídricos que necesitan y merecen ambas Comunidades Autónomas».  

Es la primera cumbre del agua de la legislatura entre la Comunidad y Murcia, donde ambos profundizarán en una hoja de ruta común para defender «con argumentos técnicos y desde el rigor» el trasvase Tajo-Segura, según avanzó Mazón. En este encuentro, enmarcado en el Día Mundial del Agua que se celebra el 22 de marzo, ambos exigirán poner fin «a los recortes ideológicos de los caudales» del trasvase «por su perjuicio al sector agrario, a la economía y a las familias de ambas regiones a las que se les está negando un derecho esencial para su bienestar y prosperidad», incidió Mazón. 

Informes de Castilla-La Mancha

La Comunidad de Castilla-La Mancha enviará la próxima semana sus propuestas para cambiar las reglas de explotación del Acueducto Tajo-Segura, que considera que deben de ser modificadas cuánto antes para adecuarlas a la situación de cambio climático, antes de que «no haya vuelta atrás» en la disponibilidad del agua en la cabecera.

La consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, avanzó este miércoles que las propuestas van a ser enviadas dentro del plazo marcado por el Ministerio a las comunidades autónomas afectadas por el trasvase, en la primera reunión técnica que celebraron representantes de estas autonomías y del departamento ministerial para cambiar las reglas de explotación.

Gómez recordó que Castilla-La Mancha no está conforme con las reglas de explotación, aunque estén modificadas, porque probablemente la situación de normalidad que tienen ahora los embalses de Entrepeñas y Buendía, en la cabecera del Tajo cambie en los próximos meses. Es muy probable que la situación meteorológica «cambie sustancialmente», apuntó Gómez, que consideró que «es evidente que hay que hacer un esfuerzo añadido para modificar las reglas de explotación».

Por ello, Castilla-La Mancha presentará su informe técnico para que sean analizados y sobre todo ofrecer soluciones, porque nosotros ya hemos sido suficientemente solidarios y lo seguiremos siendo sobre todo cuando hablamos de agua para uso de boca, para los ciudadanos», afirmó la consejera.