Sanidad pone fecha al inicio del cribado de cáncer de cuello de útero: antes de que acabe el año

Los ginecólogos de Alicante urgen la puesta en marcha del cribado de cáncer de cérvix o cuello de útero, del que el gobierno del Botànic realizó una prueba piloto en la que invitó a participar a 4.292 mujeres en toda la Comunidad para la determinación del virus del papiloma humano pero no llegó a introducirlo en los protocolos.

Ante la conmemoración, este martes, del Día Mundial de la Prevención del Cáncer del Cuello Uterino, la Conselleria de Sanidad que dirige Marciano Gómez (PP) pone fecha a la implementación del programa poblacional de cribado: antes de que acabe el año.

El objetivo es prevenir un cáncer que es el cuarto en prevalencia en los países con más recursos y el segundo, detrás del de mama, en aquellos en los que no se hace diagnóstico precoz, es decir, citologías, pruebas del papiloma o vacunas, con hasta 50 casos por cada 100.000 mujeres al año.

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En la Comunidad Valenciana la incidencia de nuevos casos está entre 7 y 10 mujeres por cada 100.000 al año, por detrás de otros ginecológicos como mama, endometrio u ovario. Según estimaciones del Sistema de Información sobre el Cáncer de la Comunidad Valenciana (SIC-CV), una de cada 187 alicantinas desarrollará este tumor antes de los 75 años, aunque la media de edad es de 57.

De acuerdo a este registro, en 2021, último año del que manejan datos, hubo 212 casos nuevos en la Comunidad. Por provincias, se registraron 101 nuevos casos en Valencia, 90 en Alicante y 21 en Castellón.

Incidencia

La incidencia de cáncer de cérvix observada en la Comunidad Valenciana fue similar a la estimada en España por la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN) de 7,4 por 100.000 mujeres para 2021 y menor que la europea (11,7 por 100.000 mujeres para 2022) según el Sistema de Información de Cáncer Europeo.

En 2021 un total de 97 mujeres fallecieron por cáncer de cérvix en la Comunidad, con tasas similares en las tres provincias. El 68% de las mujeres diagnosticadas de cáncer de cérvix entre 2005 y 2021 sobrevive a los 5 años.

La supervivencia a 5 años depende de la edad en la que se detecta el cáncer de cérvix y de la presencia de metástasis: es mayor en las mujeres más jóvenes (85% en las mujeres de 20-39 años, 78% en las de 40-54 años, 63% en las de 55-69 años y 41% en las mujeres de 70 años o más); y en las que presentan tumores sin metástasis (75%) respecto a las que tienen metástasis (39%).

El cribado poblacional irá dirigido a las mujeres de entre 25 y 65 años. "Actualmente la Dirección General de Salud Pública está trabajando para su puesta en marcha de forma progresiva. El Botànic anunció en febrero de 2023 que tras el verano arrancaría el programa para empezar a hacer las pruebas en 2024 pero la realidad es que no dieron ni un solo paso para hacer posible su implementación en plazo", explican desde la actual Conselleria de Sanidad.

Prueba del papiloma

En 2019 se incorporó el programa de prevención de cáncer de cérvix poblacional en la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud con la prueba del papiloma (VPH) como preferente. El Ministerio de Sanidad indicó que debía instaurarse en cinco años y llegar a una cobertura del 100% en 10 años, en detrimento del cribado oportunista, que se hace de dos formas: con citología a partir de cierta edad y con la prueba del papiloma. Desde los años 90 está confirmada la relación entre una infección persistente por este virus y la presencia de las lesiones que se detectan en las citologías.

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"Se sabe ahora que para que haya un cáncer de cuello de útero tiene que haber durante varios años una infección persistente no curada por el virus del papiloma. En la población española el cribado se ha hecho hasta ahora de una manera oportunista. Es decir, las mujeres que quieren van de forma voluntaria al ginecólogo privado o al profesional de la sanidad pública y una vez al año se hacen la citología. Eso es un cribado no organizado y es lo que hemos tenido hasta ahora", explica al respecto el doctor José Antonio López Fernández, jefe del Servicio de Ginecología del Hospital General de Alicante.

El objetivo del Ministerio de Sanidad, apunta el médico, es organizar un cribado poblacional, como hacen otros países de Europa, para extender la prevención del tumor al mayor número de mujeres posible porque el mayor porcentaje se da en las que no acuden a revisiones. Sanidad cogerá el censo y lo organizará como hace con las mamografías para el cáncer de mama a partir de cierta edad, o con el de colon, con la detección oculta de sangre en heces.

"Se sabe ahora que para que haya un cáncer de cuello de útero tiene que haber durante varios años una infección persistente no curada por el virus del papiloma"

Doctor José Antonio López

— Jefe del servicio de Ginecología del Hospital General de Alicante

Para todas

"Será una manera de acceder a aquellas mujeres que nunca van de manera voluntaria al ginecólogo porque no tienen recursos o porque no quieren. Una forma mucho más justa, eficiente y eficaz, porque de la otra manera estábamos haciéndole las citologías siempre a las mismas señoras. De esta manera se hará cada equis tiempo y a toda la población", abunda el responsable de Ginecología del Hospital Doctor Balmis de Alicante.

"Será una manera de acceder a aquellas mujeres que nunca van de manera voluntaria al ginecólogo porque no tienen recursos o porque no quieren. Una forma mucho más justa para toda la población y más eficiente y eficaz"

Doctor José Antonio López

— Jefe de Ginecología del Hospital de Alicante

De cara a su introducción, la Conselleria de Sanidad afirma que el nuevo equipo de la Dirección General de Salud Pública se ha encontrado con que "no están desarrolladas las herramientas básicas para su puesta en marcha, como es el sistema informático que debe recoger la información asociada al cribado. Una vez más, el Botànic anunció una iniciativa sobre la que después no se llevaron las acciones necesarias, a pesar de la obligación de incorporar este cribado a la cartera de servicios en el plazo establecido", señalan desde el Consell en referencia a las denuncias sobre el abandono de otros programas de cribado que ya hizo el conseller como los de mama o cáncer de colon.

Para poder implantar el cribado, la Conselleria de Sanidad señala que está trabajando de manera intensiva en el desarrollo del sistema "imprescindible para poder comenzar la implementación del programa lo antes posible, que en cualquier caso será antes de finalizar el año".

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Pendiente de ajustes

Según explican fuentes sanitarias, el programa piloto ya está diseñado y pendiente de realizar ajustes para su puesta en funcionamiento inminente, con tres grupos de trabajo formados por profesionales de la salud de toda la Comunidad que realiza reuniones periódicas para su desarrollo, uno de apoyo a la transición, otro de confirmación diagnóstica y el tercero de técnicas de laboratorio.

Una novedad de este cribado es que la prueba del virus del papiloma humano la realizarán las propias mujeres mediante autotoma con dispositivos de muy fácil uso que podrán depositar en sus centros de salud.

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El doctor López recuerda que se hizo un estudio piloto en 2022-2023 para comprobar el funcionamiento del cribado en cinco departamentos de salud de la Comunidad Valenciana, entre ellos el de Alicante con 711 pacientes del centro de salud de Babel, en Alicante, en esta iniciativa . "Hay muchos aspectos que coordinar y pulir, pero este programa debería comenzar a lo largo de este año. Otras comunidades autónomas ya han empezado (País Vasco, Galicia, Madrid) y otras muchas están pendientes de iniciar al igual que nuestra Comunidad", apunta.

Erradicación

La Organización Mundial de la Salud se ha puesto como objetivo erradicar el cáncer de cuello de útero pues la conciencia sobre su prevención se inició en los años 50 del siglo pasado cuando el ginecólogo griego George Papanicolaou descubrió que mediante pruebas de citología se podían detectar lesiones previas al cáncer, y caló entre las mujeres la idea de que hay que ir al ginecólogo una vez al año para hacerse esta prueba y poder prevenir este cáncer, que se desarrolla de una manera muy lenta.

El 95% de los casos de cáncer de cérvix podría prevenirse gracias a la vacunación

"Es un cáncer en el que tenemos posibilidad de hacer una prevención primaria gracias a las vacunas; secundaria con detección mediante pruebas de papiloma o citologías antes de que aparezca el cáncer; y terciaria con el tratamiento de las lesiones antes de que aparezca el tumor".

Según explica el jefe de Ginecología del Doctor Balmis, las vacunas se incluyeron en España en el calendario vacunal en 2007, más o menos al mismo tiempo que la mayoría de los países de nuestro entorno. Ya hay numerosos estudios que avalan la disminución de las lesiones precancerosas en las mujeres vacunadas, y comienzan a aparecer evidencias también de la disminución del cáncer, como en un estudio sueco de 2020 que informa de la reducción de un 90% en la incidencia del cáncer en mujeres vacunadas en comparación con las mujeres que no recibieron la vacuna.

También es reciente la vacuna contra el papiloma a los varones de 12 años, no solo a las niñas, en la Comunidad.

Citología y autotoma

El cribado se hará entre los 25 y los 35 años con citología y a partir de esa edad con la prueba del virus del papiloma humano mediante autotoma. Si sale bien se repetirá entre tres y cinco años después. Se espera que el 90 % de las pruebas sean negativas pero si se observa alguna anomalía se remitirá a la paciente a la matrona para que se le haga el triaje, y esta la derivará al ginecólogo en caso de tener lesiones precancerosas.

Para la prueba del papiloma que se ofrecerá a las mujeres a partir de 35 años, la autotoma, se les remitirá una carta invitándoles a participar seguramente con un hisopo para realizar "una prueba sencilla, no dolorosa, y poder llevarla al centro de salud dado que se ha comprobado que la sensibilidad de la prueba hecha por un profesional o por autotoma es prácticamente la misma", afirman los expertos.

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