Una feria del libro más breve y sin porcentaje de autores alicantinos

La Feria del Libro de Alicante volverá a su cita en 2024 con algunas novedades y varias incógnitas. Entre las certezas destaca su ubicación en el Espacio Séneca y la plaza con el mismo nombre y la mayor novedad es que reduce a la mitad su fecha de celebración -se queda en cinco días- mientras que la participación de escritores de origen local y provincial, que debe incluirse en la programación general, se deja a la elección de la futura empresa que la gestione, ya que desaparece la cuota establecida en un 40% de autores alicantinos en las dos últimas ediciones.

Así se desprende de la nueva convocatoria abierta por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Alicante para contratar la organización de esta actividad anual (en concreto, para la programación, gestión, coordinación, dinamización y ejecución de la Feria del Libro de Alicante 2024), aprobada por la Junta de Gobierno Local la pasada semana por 36.489 euros, IVA incluido.

Esta es la tercera ocasión en que la gestión de la Feria del Libro de Alicante sale a licitación. La primera vez fue en 2021 y se adjudicó a la empresa malagueña Makyre, que en 2022 volvió a repetir, ya que fue la única oferta presentada, y cuya gestión se prorrogó en 2023. El primer año de Makyre al frente de la Feria del Libro comenzó con polémica, ya que se anunciaron pocas firmas de autores alicantinos en la programación oficial, algo que se corrigió parcialmente después pero que provocó el malestar de muchos de escritores y escritoras de la provincia, que promovieron un manifiesto de rechazo a la organización de la feria.

A partir de este escollo, el año siguiente se introdujo como condición específica del contrato que un 40% de autores presentes en la feria debían ser locales (un 30% nacido o residente en el municipio de Alicante y un 10% en la provincia) y el 60% restante, firmas consolidadas del panorama nacional. Ese requisito desaparece ahora en el pliego de 2024, que establece que la entidad adjudicataria debe ofrecer -en la caseta central- al menos diez presentaciones de libros de autores de reconocido prestigio "incluyendo autores o autoras de origen alicantino o con residencia en Alicante", pero sin concretar una proporción concreta. 

"No hay un mínimo ni un máximo"

Preguntada por esta cuestión, la concejala de Cultura, Nayma Beldjilali, ha manifestado que "se ha quitado el porcentaje, pero sí se exige que cuenten con autores alicantinos, por obligación, porque a lo mejor en vez del 40% hay un 60% de alicantinos. No hay un mínimo ni un máximo". No obstante, la edil ha señalado que "se valorará lo que cada empresa proponga para la feria" cuando se presenten los proyectos a licitación. "Lo que se ha quitado es el porcentaje, pero sí consta que tiene que haber autores alicantinos", ha reiterado.

Demandas de los libreros

Aunque la fecha exacta de celebración no se ha concretado en el pliego, el texto determina que esta "será de cinco días, a celebrar previsiblemente durante el mes de abril, comenzando la inauguración la tarde del miércoles y continuando hasta el cierre el domingo". Esta drástica reducción de días a la mitad, de diez a cinco, es una demanda que editoriales y libreros pusieron de manifiesto al cierre de la pasada edición, ya que se quejaban de que entre semana el público era escaso y diez jornadas eran "excesivas" para tan poca afluencia.

La Feria del Libro de Alicante, con más sombras que luces

Esta es una de las peticiones atendidas en la nueva convocatoria, que también incluye entre las obligaciones de la empresa organizadora la programación, al menos, de tres actividades de animación de calle -teatro música, danza, títeres, magia o lecturas teatralizadas- a realizar en la plaza Séneca. Con ello se responde a otra de las reclamaciones de las entidades participantes, ya que las casetas de la feria se instalan en la plaza, pero las actividades se realizaban dentro del Espacio Séneca, incluidas las presentaciones de libros de grandes firmas, lo que restaba público en el exterior.

La fecha vuelve a oscilar, ya que el pasado año la feria se desarrolló en mayo y el anterior en abril, pero también se han celebrado ferias en junio y hasta en julio. La ubicación parece ya definitiva en Séneca desde los últimos años, un lugar que algunas librerías rechazaban frente al paseo Gadea por ser poco transitado y algunas críticas se dirigieron, precisamente, a la falta de difusión de la feria, en cuyos carteles no destacaba ni el lugar ni la fecha de celebración. Ahora, sin embargo, se establece que la información se ofrecerá a diario a los medios de comunicación por los organizadores, que además deberán distribuir 2.000 carteles y/o folletos publicitarios de la feria por toda la ciudad, con especial incidencia en el centro.

Más presupuesto para menos días

El pliego de condiciones técnicas establece que las empresas o entidades interesadas pueden presentar ya sus ofertas hasta el próximo 22 de enero. El presupuesto base de licitación es de 36.489,97 euros (30.157 euros más IVA), dos mil euros más que en anteriores ediciones, algo que contrasta con la duración a la mitad de la feria que, inicialmente, invita a pensar que generará menos actividad.

No obstante, el principal desafío de la feria es atraer hasta Alicante a un mayor número de librerías o editoriales, tanto de la provincia como de fuera de Alicante, que es testimonial para una ciudad que roza los 350.000 habitantes: apenas 19 casetas el pasado año, de las que cuatro eran librerías, cuatro editoriales (incluidas de autoedición) y el resto, casetas institucionales (incluido el Ministerio de Defensa).