La Generalitat Valenciana ha dado al Ayuntamiento de Elche un mes de plazo para retirar la Cruz de los Caídos del Paseo de Germanías y las placas de más de un centenar de calles con nombres de personas que han sido vinculadas con el franquismo, la mayoría situadas en Carrús. Si no lo hace el equipo de gobierno, lo hará el Instituto Valenciano de la Memoria Democrática, los Derechos Humanos y las Libertades Públicas.
Así consta en la resolución que la Conselleria de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática ha trasladado la misma petición a todas las administraciones locales de la Comunidad que conserven símbolos, de la Guerra Civil y de la dictadura.
Precisamente, el ejecutivo local tiene paralizada desde hace unos meses la eliminación del controvertido monumento de la tradicional plaza del barrio de El Pla de San Josep por un problema en la licitación. En concreto, la Mesa de Contratación del Ayuntamiento excluyó en verano, bajo el argumento de que no cumplía con la puntuación mínima exigida, a la única empresa que se presentó a la licitación para remodelar la antigua plaza de El Pla, musealizar y reabrir el refugio, unas obras cercanas al millón de euros. Ante aquel traspiés, el ejecutivo local está viendo la fórmula para reflotar este polémico proyecto, al que se opone el PP, Vox y Ciudadanos, entre otras cosas porque recibió una ayuda europea para pagar la mitad de la obra que habría que devolver si no se ejecuta antes del 31 de diciembre del próximo año.
Hace un año
La administración autonómica recuerda que hace más de un año aprobó el catálogo de vestigios, la relación de los elementos contrarios a la memoria democrática y la dignidad de las víctimas que deben ser retirados o eliminados por no haber sido retirados o eliminados voluntariamente, y los criterios generales de actuación sobre los vestigios de la Guerra Civil y la Dictadura. Ahora, trascurrido ese tiempo desde aquella publicación, la Conselleria urge su retirada.
Con todo ello, el gobierno valenciano ha remitido escrito a todos los ayuntamientos en los que en el catálogo de vestigios constaban calles, placas, honores u otros elementos adosados a edificios públicos o situados en la vía pública, de competencia municipal, que no hubiesen sido retirados. Según publica el Diario Oficial de la Comunidad Valenciana, se les ha hecho constar, en todos los casos, que de no retirar los vestigios contrarios a la memoria democrática de forma voluntaria, en el plazo de un mes, procede la incoación del procedimiento previsto en el artículo 39.7 de la Ley 14/2017, de 10 de noviembre.
También dice la resolución que una vez transcurrido el plazo y, dejando constancia de que los vestigios no se han retirado voluntariamente, por Acuerdo de la Comisión Técnica de Coordinación de fecha 15 de septiembre de 2022, se ha aprobado la modificación y actualización del Catálogo de vestigios de la Guerra Civil y la Dictadura en el ámbito de la Comunitat Valenciana, la relación de los elementos contrarios a la memoria democrática y la dignidad de las víctimas que deben ser eliminados o retirados por no haber sido retirados voluntariamente, en el que se ha incluido los vestigios de los que ha sido conocedora la conselleria tras la primera publicación y se han suprimido aquellos que han sido retirados.
El catálogo del Consell, que recopila 327 vestigios franquistas de toda la provincia, también dice que tienen que ser eliminados del barrio de Carrús los nombres de 123 calles a los caídos en la Guerra Civil del bando nacional, así como la placa conmemorativa de las viviendas del grupo San Agatángelo con el yugo, las flechas y CNS. Lo mismo pide con las placas de Viviendas de Protección Oficial del Instituto Nacional de la Vivienda con el yugo y las flechas de las calles Castro y General Cosidó.
El gobierno valenciano recuerda que el Catálogo es un documento abierto y no definitivo que se nutre, en primer lugar, de la información comunicada por las administraciones públicas, fundamentalmente los ayuntamientos, y también de las comunicaciones y denuncias que realizan las entidades memorialistas, así como las realizadas por la ciudadanía.
