La Policía Nacional estrecha el cerco sobre la venta de droga en Carrús y detiene a tres personas

El operativo se desarrolla en un inmueble situado en el entorno de las plazas de Barcelona y de Madrid, donde vecinos y comercios se quejaban de conflictos por el tráfico de estupefacientes. A los arrestados se les imputan los ilícitos de tráfico de estupefacientes y pertenencia a grupo criminal

El operativo de la Policía Nacional desarrollado este martes en el barrio de Carrús.

El operativo de la Policía Nacional desarrollado este martes en el barrio de Carrús. / INFORMACIÓN

María Pomares

María Pomares

Tranquilidad, respiro, agradecimiento, satisfacción... Estas son sólo algunas de las palabras que este martes utilizaban vecinos y comerciantes de Carrús y, más concretamente del entorno situado entre las plazas de Barcelona y de Madrid, para definir su estado de ánimo. Todo después de que el Grupo de Estupefacientes de la Comisaría de la Policía Nacional en Elche haya empezado a estrechar el cerco en Carrús y desarticulara a primeras horas de la mañana un punto de venta de drogas al menudeo en la zona, con la consiguiente detención de tres hombres presuntamente responsables de esos hechos, además de identificar a otras personas que se encontraban en el inmueble.

Con el matiz, además, de que no se descartan más arrestos como consecuencia de los operativos que está desplegando la Policía Nacional en el barrio, y cuando, además, este es el tercer operativo en ese enclave en prácticamente dos años. Tras muchos meses de lucha, con presentación de escritos en el Ayuntamiento y recogidas de firmas de por medio, vecinos y comercios de Carrús reciben una bocanada de esperanza, como ellos mismos confesaban al filo del mediodía.

No en vano, la operación se inició precisamente tras las quejas vecinales y las ulteriores reuniones que los residentes han venido manteniendo con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado a lo largo de las dos últimas semanas para tratar de buscar una solución a los altercados y los actos vandálicos que venían sufriendo. En la zona se situaba un domicilio al que acudían regularmente toxicómanos para la compra y el consumo de sustancias estupefacientes, y ese era el foco de sus problemas

24 horas al día

La venta, de hecho, se producía las 24 horas del día, algo que, como es lógico, y así lo hicieron saber, preocupaba significativamente a los vecinos. Sobre todo, por lo que llevan aparejados estos puntos de venta de estupefacientes: de hurtos a robos, pasando por peleas entre los clientes de esos puntos, y la consiguiente sensación de inseguridad y alarma social, como así evidenciaron en los escritos presentados, y como así lo trasladaron en los encuentros que han mantenido con los representantes de los cuerpos policiales, de la Subdelegación del Gobierno y del Ayuntamiento

La Policía Nacional, durante otro operativo, en una imagen de archivo.

La Policía Nacional, durante otro operativo, en una imagen de archivo. / INFORMACIÓN

Así las cosas, pronto se iniciaron las pesquisas de los investigadores. Con ellas, se corroboraron las informaciones captadas, y sus posteriores indagaciones centraron a una serie de personas que, supuestamente, se encargarían del suministro y venta droga en el domicilio en el que se desplegó el operativo este martes, utilizándolo como punto de venta y consumo de drogas.

Mucho movimiento

El trasiego en ese enclave era de una magnitud considerable y la Policía Nacional pudo constatar que en una mañana podían llegar a pasar hasta medio centenar de personas. No sólo eso, también pudieron comprobar que la mayoría de ellas consumían la sustancia en el interior de la vivienda investigada, por lo que el punto podría considerarse lo que en el argot policial se denomina «fumadero».

Con estos puntos de partida, y tras las indagaciones de rigor, se pasó este martes a la fase de desarticulación del punto «negro» de venta de droga, bajo la atenta mirada de algunos de los afectados de la zona. Fue así como en torno a las nueve y media de la mañana el Grupo de Estupefacientes, en colaboración con la Unidad de Prevención y Reacción, especializada en este tipo de entradas y registros, accedieron, con la ayuda de un ariete, a un inmueble en el que se intervinieron útiles para la distribución de la sustancia estupefaciente, báscula de precisión y una pequeña cantidad de cocaína, y dinero fraccionado, indicios y pruebas inequívocas para los agentes de la actividad ilícita llevada a cabo en el lugar.

Pequeñas cantidades

El que se tratara de una «pequeña» cantidad de cocaína no es casual. En los puntos de distribución al menudeo, los presuntos facilitadores no suelen disponer de grandes cantidades de droga para evitar perdidas importantes si se da una intervención policial. Es más, desde el Cuerpo Nacional de Policía indican que la notoriedad de la intervención radica principalmente en la desactivación del punto de venta al menudeo y en la detención en este caso de los tres presuntos autores, tres varones españoles de entre 53 y 59 años de edad. Entre los arrestados, se encontraría el propietario de la vivienda mientras que los otros dos serían supuestamente ayudantes para la venta y distribución de la droga. A todos ellos se les imputan los ilícitos de tráfico de drogas y pertenencia a grupo criminal.

Una vista aérea del barrio de Carrús, en una imagen de archivo

Una vista aérea del barrio de Carrús, en una imagen de archivo / Antonio Amorós

Tranquilidad y agradecimiento

Al final de la mañana, una vez concluido el dispositivo, los vecinos y comerciantes no ocultaban la sensación de respiro. «Estamos muy agradecidos por la tranquilidad y seguridad que nos ha dado la rapidez de la intervención», señalaban. No obstante, no ocultaban sus «recelos», como ellos mismos confesaban, dados los antecedentes. Sobre todo porque temen, según subrayaban, que, como ha ocurrido en otras ocasiones, queden en libertad más pronto que tarde. Por eso mismo, en la línea de lo que ya dijo el comisario principal de la Policía Local, César Zaragoza, hace algo más de una semana, sostienen que es necesario una reforma legislativa que permita el cumplimiento íntegro de las penas en caso de que se trate de reincidentes. Zaragoza, de hecho, tras la junta local de seguridad extra ordinaria celebrada el pasado 16 de febrero pidió al alcalde, Pablo Ruz, que diera traslado de esta demanda a las Cortes Generales

Sinergias

Mientras, desde la Policía Nacional señalan que la colaboración entre la ciudadanía y el cuerpo es una de las «sinergias» que mayores éxitos ha registrado en la lucha por el mantenimiento de la seguridad ciudadana. Al respecto, recuerdan que uno de los canales existentes para que esa colaboración se produzca es el servicio Contacta, de la sección Colabora, de la web de la Policía Nacional. A través de ese cauce, puntualizan, se puede informar de cualquier ilícito del que se tenga conocimiento.

Varias reuniones en las dos últimas semanas y más presencia policial

Fue el 13 de febrero cuando vecinos y comerciantes hicieron pública su denuncia a través de este periódico. Sólo un día después, el alcalde, Pablo Ruz, anunció la convocatoria urgente de una junta local de seguridad en la que se decidió crear un retén permanente de la Policía Local en la plaza Primero de Mayo -ya lo había prometido en la precampaña-, así como impulsar la Comisión de Coordinación Policial, que se constituyó la semana pasada y que optó por que la Policía Local y la Policía Nacional participaran en las juntas de distrito de Carrús Este-Plaza de Barcelona y Carrús Oeste-Toscar. Por su parte, el subdelegado del Gobierno, Juan Antonio Nieves, en otra reunión con residentes y comercios, junto al comisario jefe provincial, Manuel Lafuente, y el comisario de Elche, Pedro Montore, se comprometió a que la Policía tendría un contacto directo con los vecinos. También se ha reforzado la presencia policial en la zona.