El Gobierno rechaza la macroplanta solar de una empresa noruega entre Biar, Villena y Cañada

El Ministerio de Transición Ecológica ha declarado desfavorable el proyecto debido a su gran impacto negativo sobre el medio ambiente

Imagen aérea de una planta fotovoltaica del Alto Vinalopó instalada en una finca arrendada por un agricultor de Beneixama

Imagen aérea de una planta fotovoltaica del Alto Vinalopó instalada en una finca arrendada por un agricultor de Beneixama / Áxel Álvarez

Adiós al proyecto de la macroplanta fotovoltaica Tendetes en el Alto Vinalopó. La planificación puesta en marcha por una empresa pública noruega, que pretendía ocupar unas cuatrocientas hectáreas de terreno entre los municipios de Biar, Villena y Cañada para la construcción de una planta solar con una potencia de172 MWp, cuenta con la evaluación desfavorable del Ministerio de Transición Ecológica.

Así, entre las razones por las que han evaluado como desfavorable el informe para la implantación de esta macroplanta fotovoltáica, destaca la tasación de un gran impacto negativo sobre el medio ambiente. En este sentido, la valuación del órgano ambiental estima que "el proyecto es susceptible de producir impactos ambientales significativos sobre suelos de interés agrológico, hábitats de interés comunitario prioritarios, montes de utilidad pública, terrenos forestales estratégicos y ordinarios, poblaciones faunísticas, espacios protegidos pertenecientes a la Red Natura 2000, paisaje, riesgos de erosión e inundación y efectos sinérgicos".

Por tanto, el Gobierno estima que estas afecciones no pueden evitarse o reducirse mediante las medidas propuestas por la propia empresa noruega interesada en el proyecto, provocando que el parque solar resulte inviable ambientalmente, tal y como apoyan los sucesivos informes desfavorables emitidos por la Dirección General de Medio Natural y de Evaluación Ambiental y por la Dirección General de Política Territorial y Paisaje, ambas de la Generalitat Valenciana. Estos problemas de implantación derivan, en gran medida, de la ubicación en que se ha proyectado la planta fotovoltaica y la excesiva distancia desde la misma hasta el punto de volcado de la energía. 

El tendido eléctrico de la planta planificada, de unos 50,2 kilómetros, discurre por los términos municipales de Villena, Biar, Onil, Ibi, Castalla, Tibi, Jijona, Alicante y Mutxamel. Así, este extenso recorrido se había marcado para conectar la planta de Tendetes con la subestación Bonalba, y un tramo aéreosubterráneo de 3,761 kilómetros hasta la El Cantalar, donde vertería la energía.

Ecologistas en Acción ya manifestó en su día que este recorrido carecía "de toda lógica" y que causaría "un impacto inasumible". Además, el tendido aéreo ocuparía suelos forestales estratégicos donde no están permitidas estas infraestructuras, así como monte público para cuya ocupación no se ha pedido permiso. 

Ahondando más en las características negativas que marcan como desfavorable el informe, el Boletín Oficial del Estado (BOE) recoge que los soterramientos y apoyos se localizan "en zonas de elevado riesgo de deslizamiento y erosión que pueden causar afecciones muy graves a los recursos geológicos, especialmente si afectan a zonas yesíferas de alta vulnerabilidad". Esto, además, se une a la coincidencia parcial con zonas de peligrosidad de inundación.

El resultado de la evaluación realizada por el Ministerio de Transición Ecológica ha sido celebrado por la plataforma de rechazo al proyecto, que ha mostrado su satisfacción por la negativa del Gobierno a la planta fotovoltaica Tendetes, habiendo "tumbado" el estudio de impacto ambiental haciendo ver que la DIA presentada por la empresa noruega Statkraft "hacia totalmente inviable el proyecto casi en la totalidad de sus puntos".

Entre las razones por las que agradecen esta resolución, indican que la negativa al proyecto significa que "hay vecinos que no van a perder su hogar, su forma de vida, no van a perder su verdadera planta de eliminación de huella de carbono traducido en más de un millón de olivos que no van a ser arrancados" y que se va a seguir "preservando la fauna y flora" de la zona.